Dos aclaraciones previas:
1) Aquí estamos hablando de cuestiones opinables y, por tanto, es lícito y saludable disentir y discutir. Para eso está el blog.
2) Conozco por referencias al P. Álvaro Sánchez Rueda que, a pesar de lo que dice Juan Cuyano, existe, y tengo la mejor de las impresiones de él, de su valentía y su coherencia.
Vayamos, entonces, al post. Me resultó llamativo el argumento que aporta el P. Álvaro para definir a una nación católica. Él dice refiriéndose a los ingleses: Que devuelvan las Islas Malvinas, que pidan perdón por tantos años de ilegítima usurpación; que pidan perdón por los soldados argentinos muertos; que además de pedir perdón, paguen la deuda material que por la usurpación han adquirido con el pueblo argentino; que pidan perdón por los miles y miles de crímenes que cometió el imperio inglés -y la nación inglesa- a lo largo de siglos y siglos de historia. Recién entonces comenzaremos a pensar en una Inglaterra católica, y no en lo que es ahora.
Yo propongo dos respuestas. En primer lugar, un argumento ad hominem: si es lícito razonar como lo hace el P. Álvaro, entonces sería lícito este argumento hecho por un español: “Argentina será una nación católica cuando pida perdón por todos los soldados españoles muertos durante la guerra de sedición que llevó a cabo contra su legítimo soberano después de 1810, por…, etc.”. Y también este otro hecho por un argentino, o por un colombiano, o por un mexicano, o por un cubano, o por un filipino: “España será una nación católica cuando pida perdón por los soldados que mató durante las guerras de la independencia en la que nosotros, pueblos soberanos, nos levantamos contra la injusta opresión del monarca español. Y cuando pida perdón por los crímenes que cometió el imperio español en América, en África y en Asia; y durante el saqueo de Roma, cuando se atrevió a profanar la ciudad del papa y sus iglesias, pillando, incendiando y violando, y cuando… etc.”. Algunos dirán que algunas guerras fueron legítimas, y por tanto lícito la muerte del enemigo, y que otras no lo fueron. Pero, admitámoslo, todo depende del cristal con el que se lo mire. Cualquier teólogo “del palo”, es decir, tomista y tradicionalista, de comienzos del siglo pasado habría dicho que los españoles peleaban por una causa justa, como era conservar la unidad de su territorio, y los teólogos “progres” vernáculos, en cambios, defendían la justicia de la guerra de las colonias. Sobre esto, me parece, no hay nada definitivo.
Pero me interesa profundizar un poco más en el fondo del argumento del P. Álvaro que considero bastante peligroso, aunque no por eso menos manido por el nacionalismo argentino, y que consiste, sencillamente, en una vieja práctica judía: la utilización de Dios para los fines personales o comunitarios. Bouyer tiene una reflexión interesante: el segundo libro de Samuel (c. 7) narra que, cuando David termina de edificar su palacio, pretende comenzar a construir un templo para Dios. Pero Yavé, por boca del profeta Natán, se lo prohíbe: Él es un Dios que ha vivido siempre en tabernáculos, errante con el pueblo por el desierto. Su templo no será edificado por David.
¿Qué hay detrás de este enojo de Yavé ante una iniciativa aparentemente bienintencionada de David? Es que el Señor sabe con qué facilidad el hombre se embarcaría en la desorbitada pretensión de ligarse a Él y captarlo para encerrarlo en su sistema político, para hacer de Él un engranaje obediente dentro de la máquina de dominio del mundo, del cual el hombre quedaría como único dueño. Es precisamente lo que implica para las religiones cananeas la presencia del baal en su templo. Guardado de la vista como un rehén de categoría, y por otra parte cebado con los sacrificios, se le tiene a disposición propia como un todopoderoso, pero como dócil instrumento para fecundar la tierra y asustar a los competidores. David, en definitiva, quería usar a Dios para sus fines políticos, más allá de la legitimidad de ellos. Pero Yavé no habita en templo hecho por mano de hombre, sino que habita en el cielo.
Creo que el P. Álvaro nos propone retornar a esta práctica. Instrumentalizar a Dios para nuestra causa; identificar a Dios, en este caso, con la causa argentina y convertir, de ese modo, lo que es no más que una legítima reivindicación humana y terrenal, en la guerra de Dios, Deus lo vult!
No sé si Inglaterra es católica o no lo es; podremos discutirlo, pero ciertamente no ha dejado de ser católica porque haya matado en una acción bélica a soldados argentinos en Malvinas. ¿O es que, acaso, los soldados argentinos morían en defensa de la verdadera fe? ¿Es que fueron ellos mártires de la religión? ¿Es que los ingleses los mataban porque eran católicos? No estoy poniendo en duda, por cierto, la legitimidad de los reclamos argentinos, aunque podría discutir la oportunidad de la guerra, pero es importante tener en claro que no se trató de una cruzada emprendida por Galtieri en defensa de la Santísima Trinidad y de la religión católica, sino en una guerra más de reivindicación territorial.
Mal que nos pese, Dios no es argentino, y tampoco es inglés. Dios es.
Muy estimado Wanderer. Luego de celebrar la Santa Misa -desde la primera que celebré, una de mis intenciones primeras es pedir por la recuperación de las Islas Malvinas y, por gracia de Dios, seguiré celebrando por esa intención hasta el día de mi muerte-, me encuentro con su artículo. No deja Ud. de sorprenderme siempre, gratamente. Desde que conocí su blog lo sigo asiduamente, y soy un seguidor suyo, aunque no esté registrado. Admiro en Ud. su lucidez, su erudición, y también su valentía, pues fue uno de los pocos en tratar ciertos "temas fundacionales" -y muchos otros- con una claridad de criterio y una altura intelectual que muchos sacerdotes quisiéramos tener. Con respecto a su respuesta, no deja de resultarme divertido el verme identificado, de alguna manera, con los judíos. Coincido totalmente con Ud.: Dios no es argentino, sino que "Es", es Acto Puro de Ser, actus essendi, creador del esse participado creatural, y no pretendo, ni por un instante, confinarlo a una nación (Argentina) y a una causa (las Malvinas), y tampoco creo que en la devolución de las Islas y en el pedido de perdón radique la conversión en sí de una nación; pero sí creo que, supuesta la conversión de Inglaterra como Nación debe, como garantía de una verdadera conversión, devolver lo que no le pertenece, así como un ladrón arrepentido debe devolver lo que robó. Era esto simplemente lo que quería decir. Lo saludo, felicitándolo no solo por su 'blog', sino también por su honestidad intelectual y, como dije antes, por su valentía y su lucidez. P. Álvaro.
ResponderEliminarWanderer,
ResponderEliminarEn el anterior post lo putié un poco a Ud. y quizás, por interposita persona, a Marlon Brando, Luis (el pío) y otros.
Ahora debo decirle, pues la nobleza me obliga, que éste post no tiene desperdicio.
Otra cosa mas: dió en el clavo (o en la clave) para desenredar toda la interpretación nacionalista-católica de nuestra historia argentina.
Mal que le pese a mis amigos.
El Séptimo Rey Mago
Guarda Padre, que el wanderer es "legión". Usted le está escribiendo a un vago colectivo.
ResponderEliminarSalvador
Aquí si, completamente de acuerdo.
ResponderEliminarEn el fabuloso libro de C. S. Lewis. "Los Cuatro Amores", se hallarán (promediando el primer capítulo) reflexiones medulares del insigne inglés sobre el nacionalismo, y entre otras ésta:
ResponderEliminar"Si la causa de nuestro país es la causa de Dios, nuestras guerras tendrán que ser de aniquilación. Se le da una falsa trascendencia a cosas que son muy de este mundo."
Hay mucho más para leer y releer.
J. T.
Humildes acotaciones:
ResponderEliminarDios le prohibió a David la construcción del templo porque sus manos estaban teñidas de sangre. Las de Salomón, en cambio, no (aunque despues metiera la gamba).
No eran manos puras, lo que quizás sea de mayor relevancia que el argumento de la apropiación política.
Que una nación o institución (ambas integradas por personas) pida perdón por acciones cometidas en el pasado por otras personas no me cierra. No hay identidad de sujetos entre los que piden y dispensan el perdon, por un lado, con quienes cometen la ofensa y quienes la sufren, por otro, aunque estos puedan sufrir algun coletazo.
Humildemente creo que las naciones tal cual las conocemos hoy por hoy son fruto del error del modernismo ergo es completamente ilicito atar esa nacion (cualquiera sea UK Argentina o Bolivia) a la Religion, diciendo tal o cual nacion es catolica o aquella protestante o aquella lo otro.
ResponderEliminarSi una nacion fuese catolica entonces sus gobernantes necesariamente tendrian que ser del Clero, perdon por mi logica Guelfa, en fin decir que Dios banca a los "revolucionarios" criollos de 1810 o a los soldados argentinos de la gesta de Malvinas no es mentira en el hecho de que Dios esta con sus fieles pero de ahi a decir que Dios "quiere" una revolucion o la retoma de las malvinas, me parece hay una gran diferencia.
Otro es el caso de las Cruzadas en donde realmente si, en principio hubo una guerra de religion. Otra cosa tambien es la defensa de cierto grupo de fieles contra un ataque concreto contra ellos por el solo hecho de profesar la Fe (ejemplo la guerra civil española).
En fin esa es mi humilde opinion.
Benigno.
Comentaba este post con un amigo, y salió el tema de la política católica.
ResponderEliminar-Teseo, ¿leíste "La Perversión democrática"?
-No, pero fijate, lo tengo en el anaquel, justo detrás tuyo. ¿Vos?
-Sí.
-¿Qué te pareció?
-Muy bueno. Falta la praxis nomás.
Y es que el nacionalismo católico se ha dedicado a disertar. Cosa muy buena.
Pero, ¿qué pasa con la actividad? ¿No es el nacionalismo algo práctico, un traspaso, digamos, armónico de la theoría a la praxis? ¿Las doctrinas políticas no se piensan sino para ponerlas por obra? ¿Tiene el nacionalismo “doctrina política”, propiamente?
En la peor de las respuestas, ¿qué queda por esperar de la doctrina nacionalista católica? Si la democracia no está enferma, sino que es la enfermedad; si "participar" en el gobierno es alta traición; si intentar algún manotazo (¿de ahogado?) por vía constitucional es claudicar en la recta doctrina, ¿es que esperamos que nazca un Rey, que España se convierta y nos adjunte a su rebrote patrio-religioso?
¿No será que la doctrina política "católica", secular, deste pueblo, se ha auto-enmancado desde el vamos?
Ojo: no comparto el liberalismo político. Pero ESO es otro cantar.
Teseo:
ResponderEliminarYo pensaba como Ud, hasta la aprobación del putimonio.
Ahí se vió que todo el arco político está igualmente corrompido mentalmente y que, con excepción de Negre de Alonso, un tucumano que no me acuerdo como se llama, y alguno que otro, no se puede votar a nadie.
Nunca más poner una boleta con una lista de tipos que votan cualquier cosa o venden la conciencia.
Y la buena gente, en el orden práctico, es IMPOSIBLE (salvo milagro) que llegue.
Juancho.
Dios no es argentino, Nihil Obstat! eso puede llegar a creerse en la popular de la bombonera, paradójicamente los Domingos.
ResponderEliminarMas la divina intervención en la Historia es innegable, la Revelación, su Palabra (vero tradicionalismo leí por ahí, muy bueno) cuenta con infinidades de estos ejemplos. También me parece innegable que muchas veces se ha utilizado la Voluntad de Dios como excusa, fundamento para fines meramente temporales, los estadistas mas pragmáticos y que han ensayado los cambios más radicales han debido de acudir a discursos de tinte espirituales para justificar sus intervenciones (tan nefastas en cuanto mayor sacralidad y mesianismo quería endilgarse a la tarea)...pero tb existen esas raras y particulares ocasiones en que se nos es dado desde lo alto un "in hoc signo vinces". Mas alla de lo dicho hasta acá, cabe una agustina visión de la Hsta, todo se resume en la pugna entre estas dos ciudades, toda la Hsta es asi, Cristocéntrica y a la m…! The rest is silence. Sería alarmantemente ingenuo el pensar que los ámbitos temporal y espiritual se encuentran desligados (sé q no es el caso aquí, pero vale aclararlo a los mas pedestres como yo). Es muy pertinente, me parece, la explicación etimológica que nos trae el padre Castellani cuando Cristo dice “Mi reino no es de este mundo”, el cura traduce: “no procede de este mundo” pero denotando un movimiento hacia, como si dijese: esta viniendo a este mundo…(ayúdeme wanderer usted q es avezado en el griego). Lo que quiero decir es que la dialéctica planteada en el post me suena a falsa, Dios siempre interviene en la HSTA y creo q eso está claro, pero que dicha intervención sea más evidente para estos ojos encarnados q otras veces, o que se utilice su Nombre para fines netamente temporales en otras oportunidades, es otro cantar, lo cierto es que todo esta contenido en el Logos, ya sea en directa intervención o en pasiva permisión, Él tiene los hilos de nuestro devenir (y nosotros tb, misterio…).
La identificación de una nación con la Voluntad Divina en una circunstancia dada en la Hsta me parece legítima, en tanto que uno puede ver que un hecho es injusto o una proposición falsa, y tratar de corregirla o de impedir la injusticia, ambas negaciones de Dios.
Me vuelvo a estudiar…ah! Teseo…” ¿Las doctrinas políticas no se piensan sino para ponerlas por obra? ¿Tiene el nacionalismo “doctrina política”, propiamente? En la peor de las respuestas, ¿qué queda por esperar de la doctrina nacionalista católica? Si la democracia no está enferma, sino que es la enfermedad; si "participar" en el gobierno es alta traición; si intentar algún manotazo (¿de ahogado?) por vía constitucional es claudicar en la recta doctrina, ¿es que esperamos que nazca un Rey, que España se convierta y nos adjunte a su rebrote patrio-religioso?”… Con respeto le digo que todo depende de su concepto de política, si lo entiende como partidocracia, y mas aún, como la lucha agónica por el poder, le doy la razón, pero si acude a la etimología del término, si entendemos la política en su acepción mas amplia como Gramsci lo hizo, usted se equivoca, el nacionalismo católico si tiene una praxis que proponerle, y a mi entender, una praxis mucho mas exquisita y fructífera.
In cor Iesu!
Leonardo Kempis.
Estimado Teseo:
ResponderEliminarEso mismo se preguntaba Castellani en Cabildo (el original) en los '40 (cf. Las canciones de Militis). Y parecía que a eso se iba a dedicar el Padre... Pero terminó escribiendo sobre el Apocalipsis. Por algo será.
Suyo in Dº
P.S.: También habló y escribió de nacionalismo "a corta distancia", materia que (parece) aún estamos lejos de aprobar...
P.P.S.: Me equivoco, también habló de los pecados "privados" de los nacionalistas... En fin, mejor no me meto en esto.
Gracias coronel por el PS!
ResponderEliminar"Patota" Moreno dijo,
ResponderEliminarA mí me revienta que me robó la exclusiva Marcelo de PCI. Así no se puede chantajear tranquilo.
Recuerdo aquellos años locos... cuando vino Mons. Lefebvre, y el gordo Durán dijo aquellas memorables palabras sobre la moral nacionalista, que una vez traducidas a Monseñor, le causaron una visible ira:
ResponderEliminar"...Monseñor, nosotros somos monjes-guerreros: Monjes de la cintura para arriba, guerreros de la cintura para abajo..."
Qué plaaato!
Patota Moreno:
ResponderEliminarla moral nacionalista, como ve, no dista mucho de la suya.
"¡Por la nación contra el caos!".
"¡Alguien tiene que decir la verdad!"
"¡La verdad no se negocia"!
E via dicendo...
Uno que quiere ser de Cristo dijo:
ResponderEliminarAcá te envío wanderer, lo que anda diciendo Monseñor Williamson, que cuando quiere es un personaje de los más oscuro y otras veces habla claro. A ver si te animás a postearlo.
Salute!
COMENTARIOS ELEISON 167 (25-IX-2010) : DOCTRINA SUBESTIMADA
En una revista norteamericana que por lo general invita a reflexionar, "Culture Wars" ("Guerras Culturales"), el Editor recientemente nos echó en cara, a mí y a la Sociedad de San Pio X como un todo, el mantenernos deliberadamente fuera de la Iglesia oficial. Permítanme presentarles tan breve y justamente como sea posible el argumento de E. Michael Jones, con sus principales etapas indicadas con letras consecutivas para facilitar la respuesta: --
Su principal tesis se basa en que el problema del Vaticano II no es doctrinal: "(A) Los documentos del Concilio no son responsables de cualquier locura que le siguió al Concilio en nombre de su "espíritu". En cuanto a los documentos mismos, de hecho estos son a veces ambiguos, pero (B) Dios está siempre con Su Iglesia, razón por la cual (C) solo algo Católico puede obtener la aceptación de los obispos reunidos, como sucedió en el Vaticano II. (D) Por lo tanto se puede y debe estar satisfecho con la interpretación de las ambigüedades a la luz de la Tradición, como el mismo Arzobispo Lefebvre una vez la propuso.
"Por lo tanto (E) el Vaticano II es Tradicional, y cualquier problema entre Roma y la FSSPX no puede ser doctrinal. (F) De ahí que el problema real de la FSSPX es que se niega a la comunión basada en el temor a ser contaminada, (G) procedente de su falta cismática de caridad. (H) La culpa subsiguiente la ocultan, pretendiendo que la Iglesia se encuentra en un estado de emergencia sin precedentes, propiciado por la anti-doctrina del Vaticano II. (I) Por lo tanto la FSSPX está diciendo que la Iglesia ha fallado en su misión y que la FSSPX constituye la Iglesia. ¡Tonterías! Obispos de la FSSPX, ¡cédansea Roma!
sigue
CONTESTACIÓN: el problema con el Vaticano II es ESENCIALMENTE doctrinal. (A) Desgraciadamente, los documentos del Vaticano II son de hecho responsables del "espíritu" del Vaticano II y de sus consecuencias locas. Es la ambigüedad misma de los documentos, reconocida por E.M.J., la que dio rienda suelta a la locura. (B) Dios de hecho está con su Iglesia, pero Él otorga a sus sacerdotes el libre albedrio, con el cual pueden escoger de hacer a la Iglesia un gran daño, pero nunca un daño mortal (cf. Lucas XVIII, 8). (C) De este modo es que Él permitió que la mayoría de los obispos Católicos cayeran en la atroz crisis Arriana del siglo cuarto. Lo que sucedió entonces está sucediendo nuevamente, solo que peor. (D) En una etapa inicial en la lucha post-Conciliar por la Tradición, pudo haber sido razonable el pedir que el Vaticano II fuera interpretado a la luz de la Tradición, pero esa etapa pasó ya hace mucho. Los frutos amargos de la ambigüedad han demostrado desde hace tiempo que los documentos Conciliares sutilmente envenenados no pueden ser rescatados.
ResponderEliminarPor lo tanto (E) el Concilio no es para nada Tradicional y el conflicto entre Roma y la FSSPX es ESENCIALMENTE doctrinal. Así es que (F) existe una buena razón para temer la contaminación, debido a la falsa doctrina del Vaticano II - está guiando a las almas al Infierno. (G) Ni existe una mentalidad cismática entre Tradicionalistas (no-sedevacantistas), aunque (H) la Iglesia se encuentra en medio de la peor emergencia de toda su historia. (I) Pero justo como en la crisis Arriana los pocos obispos que mantuvieron la Fe comprobaron que la Iglesia no había fallado en lo absoluto, así la FSSPX pertenece hoy a la Iglesia y está guardando la Fe, sin pretender con esto el remplazar la Iglesia , o constituir por sí sola la Iglesia.
Michael, ¿cuándo, en toda la historia de la Iglesia, fueron sus obispos reunidos deliberadamente ambiguos? ambigüedad sino para abrUsted admite la ambigüedad del Vaticano II. ¿En qué otro momento en la historia los sacerdotes recurrieron a la ambigüedad sino para abrir el camino para la herejía? En la Iglesia de Nuestro Señor, que sea siempre vuestro hablar sí, sí; no, no (Mateo V,37). Kyrie eleison.
Estimado Wanderer, retomo una idea: Dios no es argentino, pero sí es hebreo (la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, al encarnarse, asumió una naturaleza humana de raza hebrea: el Hombre-Dios Jesucristo era de raza hebrea); por lo tanto, es lícito, desde el punto de vista hebreo, tomar a Dios como parte de su causa. Y si nuestra Patria nació a la sombra de la cruz del Hombre-Dios, entonces también es lícito identificar a nuestro Señor con la causa nacionalista, y más todavía cuando se trata de una flagrante usurpación como el de Malvinas. No quiero con esto invocar a una "guerra santa" ni nada por el estilo pero, desde este punto de vista, es lícito entonces argumentar por medio de su Iglesia: pretender y exigir, como garantía de una supuesta conversión nacional inglesa, la devolución de lo que no les pertenece. Es lo que enseña el Catecismo: "No robarás". "Y si robas, devuelve lo que robaste", podemos agregar. Sólo el buen ladrón, el ladrón arrepentido, entró en el cielo. P. Álvaro.
ResponderEliminarP. Alvaro, no será mejor pensar en grande... La Patria que nació bajo la Santa Cruz es el Imperio Hispano-Americano de los Austrias.
ResponderEliminarEsa es la Patria Grande a la que debemos aspirar. No una lonjita de tierra entre los andes y el mar. Sino TODA nuestra herencia hispana, que abarca dos hemisferios y tres continentes.
Por menos, mejor quedemonos en casa tomando mate.
Martín Steel
Martín Steel. Mi Patria no es una "lonjita de tierra entre los andes y el mar". Es la tierra de mis padres, y es el don venido del cielo, que por venir del cielo es inmensamente grande. Y por si fuera poco, mi Patria lleva, en sus entrañas, en su nacimiento, en su historia, en su memoria, en sus héroes, en sus gestas, el signo de la cruz, porque por la cruz se convirtió en Patria y dejó de ser tierra de paganos. Estoy en un todo, en total acuerdo, que la Patria Grande es Hispanoamérica unida a la Madre Patria España. Pero precisamente, la construcción, o mejor dicho, la re-construcción de la Patria Grande, comienza con la re-construcción de la Patria chica, y esa re-construcción no se hace tomando mate. Mucho menos hoy, cuando los Enemigos de la Cruz -y por ende, de la Patria-, salen de sus madrigueras a cara descubierta.
ResponderEliminarPadre, nuestros límites actuales son ilegítimos: medidos con el compás y la escuadra de la logia de york. No somos sino apenas una pequeña lonja del gran Virreinato del Río de La Plata. Recuerde que hasta Ecuador deberían llegar nuestras fronteras!
ResponderEliminarMientras ese criterio no prime, siempre habrá otros dibujitos tripuntes como el Uruguay, Chile, Paraguay, etc. Que solo servirán para pelearnos y dividirnos.
Malvinas será hispanoamericana de vuelta, cuando también vuelvan a ser nuestras las costas del pacífico.
Hoy en día el desafío es ser Imperio o Colonia.
Martín Steel
Padre Álvaro:
ResponderEliminarsigo sin comprender su argumentación. Traer a colación el acto de elección libre de Dios sobre el pueblo de Israel no fuerza de ninguna manera a pensar que sus mismas prerrogativas deban trasladarse a la patria Argentina. Identificar las magnalia Dei en favor del pueblo elegido con las gesta saecularia de los gentiles injertados en el tronco es demasiado.
En el pueblo de Israel fueron preparativas a la revelación del Verbo, en la gentilidad el trasunto misterioso y consecuencial de la riqueza divina.
Aun cuando en el pueblo de Israel la promesa no ha alcanzado su pleno cumplimiento, aguardando la mirada sobre el "Traspasado", sin embargo la elección es indeclinable. El Apóstol "antisemita" nos recuerda, en el diálogo de Jesús con la samaritana, que la salvación viene de los judíos. O sea que el tronco, mediando la sequedad de la corteza, mantiene su carácter único de mediador para con el orbe entero que recibe la Buena Nueva.
No así con Argentina, ni con nación alguna. Sus gestas son cristianas en la medida que guarden orden directo con la voluntad salvífica de Dios. Pero de un Dios que salva individualmente, no por etnia ni sangre, ni por gestas humanas rociadas de agua bendita.
La única promesa de sangre fue dada a Israel, NO A LA ARGENTINA. Las gestas propiciadas por Yahvé, directa y manifiestamente, fueron en favor Israel. Todo el A.T. son su relato. Con la gentilidad, las gestas no guardan la misma formalidad: es que la revelación fue completada, y confiada al oficio profético, jerárquico y discente, no a las armas ni al sudor.
T.
Pregunto: Nosotros, entonces, no tendriamos que devolver la parte de Paraguay que nos robamos?
ResponderEliminarPadre, ¿no oyó hablar de "cuando se acabe el tiempo de las naciones"?
ResponderEliminarGelfand, corrija su comentario: Paraguay históricamente era parte del Virreinato. Buenos Aires es hija de Asunción... lo deforme, loco y sin sentido es su existencia como país "independiente". Seamos sinceros: hace tiempo debería ser provincia argentina.
ResponderEliminarEl argentino tarijeño
Martín Steel y Teseo.
ResponderEliminarEl error en que caen ustedes está en argumentar cuando el nacionalismo vive de arengas, no de razones.
Argentino Tarijeño: No corrijo nada. Dígame Uds. donde dice que la Argentina debía heredar todo el Virreinato. La que hizo la Revolución fue Bs.As. (y no Tarija) y no le preguntó a nadie si la querían o no. Se la impuso por la fuerza. Sino, preguntele a Liniers.
ResponderEliminarEstimados lectores:
ResponderEliminarEl 25 de septiembre de 2010 23:35, realicé el siguiente comentario:
"Patota Moreno:
la moral nacionalista, como ve, no dista mucho de la suya.
"¡Por la nación contra el caos!".
"¡Alguien tiene que decir la verdad!"
"¡La verdad no se negocia"!
E via dicendo..."
Simplemente aclaro: jamás pasó por mi cabeza referirme a la vida privada de particular alguno. Fue solo un comentario general,por lo demás apresurado.
Las tres expresiones entrecomilladas léanse impersonalmente, sin relación directa a persona alguna.
T.