martes, 15 de febrero de 2022

Cuaresma con Newman


 

Comenzó el domingo pasado el tiempo de Septuagésima, y la Iglesia nos manda comenzar a prepararnos para la Gran Cuaresma.

Aquí les propongo una buena idea: hacerlo acompañados por el cardenal Newman, con un libro que Este libro reúne once sermones que santo predicó durante el tiempo de cuaresma mientras fue párroco de St. Mary the Virgin, la iglesia parroquial de Oxford.

Aunque los sermones fueron predicados en diversos años, todos ellos están tejidos en la espiritualidad propia de Newman, en la que une a los episodios evangélicos su propia experiencia de cristiano, y acompaña así a sus lectores en el camino de la imitación de Jesucristo. 
Un estudiante de la época, Charles Furse, que luego terminó siendo sacerdote católico, relata así la experiencia de escuchar las predicaciones de Newman: "...era como si Newman me practicara una vivisección. Empezaba con los órganos menos vitales, a veces los más alejados, luego atacaba hacia arriba y hacia adentro. [...] Te sentabas, y era todo el tiempo el Buen Samaritano derramado vino en tus heridas -siempre el vino primero, luego el aceite [...]. En más de una ocasión, tras el sermón fui incapaz de entrar en el Hall y me quedé sin cenar" (LD 32, 559).
Quienes se acerquen a estos Sermones de Cuaresma, aunque no puedan gozar de escuchar la voz serena de Newman en sus oídos, podrán escucharlo igualmente a través de la lectura, y la experiencia, probablemente, sea similar a del estudiante Furse.
Disponible en Amazon en formato digital e impreso.

13 comentarios:

  1. Lo leeré, gracias por la información y "la introducción"
    J. H. Newman, siempre llena, nunca defrauda. "Bendito sea Dios, en sus Ángeles y sus Santos" gracias otra vez.
    Newmantino

    ResponderEliminar
  2. Hoy el predicador oficial de los sermones de cuaresma en Roma es el Cardenal Raniero Cantalamessa -campeón de la unión de todas las confesiones cristianas y del ecumenismo con las religiones no cristianas- a quien Francisco creó cardenal sin ser obispo, algo muy poco frecuente en la Iglesia.
    La diferencia entre Newman y Cantalamessa es tan obvia como la que existe entre la Iglesia de Pío IX y esta de Bergoglio...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "creó cardenal sin ser obispo, algo muy poco frecuente en la Iglesia."

      No es por corregirlo estimado, pero eso que dice no es así. En la Iglesia medieval eran muy comunes los cardenales diáconos y cardenales laicos. Tengo entendido que el último cardenal laico fue el abogado Teodolfo Mertel, nombrado por Pío IX. Recién con el Cód. de Derecho Canónico nuevo se introdujo la norma del can. 351 §1 que establece que los cardenales deben ser obispos o ser ordenados/consagrados obispos antes de la efectivización del nombramiento con la entrega del birrete.

      Eliminar
    2. Estimado anónimo, tiene usted razón, "en la Iglesia medieval eran muy comunes los cardenales diáconos y cardenales laicos".
      Incluso más allá de la Edad Media, no cabe duda que los Medici y los Borgia -especialmente Alejandro VI y su hijo César- siguieron con esa costumbre impulsados por el oscuro nepotismo que sus poderosas familias ejercían sobre la Iglesia donde las ambiciones políticas solían decidir los asuntos eclesiásticos.
      Al decir que Francisco creó cardenal a Cantalamessa sin ser obispo yo me refería a la época actual.

      Eliminar
    3. Tampoco es tan raro. Se me ocurre por lo menos un caso similar reciente: el Cardenal Bartolucci en la época de Benedicto XVI.
      Por lo visto, cuando alguien mayor de 80 años y que no es obispo es designado cardenal parece que no recibe la consagración episcopal.

      Eliminar
  3. Newman es más necesario que nunca y más en la próxima Cuaresma que nos viene encima con el Sumo Pontífice reuniéndose con Judas en estos días y concertando el precio de su beso con él. Así se traiciona la memoria de su maestro y de sus hermanos necesitados bajo la apariencia de ser los puros y los auténticos, los separados de la plebe impura. El que tenga oídos que oiga.
    S. Juan Enrique Newman ora por nosotros y pide que pasemos de la oscuridad a la luz amable de la Resurrección.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿ Nos quieren meter en la reserva india, don Eck ?

      Eliminar
  4. Don Wander:
    “Comenzó el domingo pasado el tiempo de Septuagésima, y la Iglesia nos manda comenzar a prepararnos para la Gran Cuaresma”.
    La luz lleva a la Luz. Bravo Don Wander, por recordarnos la importancia del tiempo fuerte de la Iglesia que vamos a comenzar a vivir a partir del 2 de marzo, esto es, el tiempo de Cuaresma. Con providencial sabiduría, hoy nos convocas para vivirlo tomados de la mano de ese gran santo que fue John Henry Newman, del cual no es necesario realizar ninguna presentación. Como lo fue ese otro gran Juan, del que cuentan las Escrituras que “Él no era la luz, sino el que debía dar testimonio de la Luz” (Jn, I, 8), también ese egregio cristiano que fue el Cardenal Newman, el cual, pero, al mismo tiempo, con un excepcional ánimo, fruto de la presencia de Dios en él, sin medir en gravosos costes, consagró su vida para llevar a llevar a Dios a quienes tuvo cerca. Yo sólo quiero agregar a esto que, sus vidas, las vidas de estos grandes santos de la Iglesia, no importan tanto por lo que valieron por sí mismas, que, por cierto, no fue poco, sino, fundamentalmente, por Aquél a quien dieron a conocer, Aquél que, entregándose a sí mismo, por amor al Padre y a todos los hombres, se dirigió a su Padre diciendo: “No se haga mi voluntad, sino la tuya” (Lc, 22, 42).
    ¡Señor, protege a tu Iglesia! ¡Alabado sea Jesucristo!
    Chapado a la antigua

    ResponderEliminar
  5. Pregunto a todos los lectores del blog
    ¿Qué traducción de la biblia al castellano recomiendan?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. -La Biblia Platense de Ms. J. Straubinger, muy buena y los comentarios son ortodoxos. Es la que mas uso. Una gloria de la Argentina. Es la que recomiendo.
      -la Nacar-Colunga y la de Bover-Cantera son sólidas y seguras, siempre que sean anteriores a 1960. En cambio, son muy literales por lo que pierde elegancia.
      -Por supuesto la Torres-Amat y la de Scio, que siguen a la Vulgata-Clementina, pero tienen el defecto de contener tales arcaismos (muy artificiales) que a mi no me agradan.
      -La Biblia de Navarra es correcta.
      Desgraciadamente las más bellas literariamente no son católicas: la Casiodoro-De Valera originales, protestante, y la Biblia de Ferrara, judía.
      En mi opinión, la más completa es la Platense.

      Eliminar
    2. Creo que cualquier intelectual católico, especialmente de habla materna románica, debe leer la Vulgata en latín. No hay excusa.

      Es un latín muy sencillo, que cualquiera con un par de años de latín de bachillerato puede entender. Es cierto que necesitará un glosario por capítulo (con internet eso ya existe) y otro que explique las instituciones judías de la época. En muy poco tiempo podrá leer de corrido. Y la mayoría del vocabulario se repite una y otra vez.

      Para los que hablen español o portugués, que sepan que este latín y no el clásico es el que ha influido en la lengua y que, con un mínimo de aplicación, siempre puede mejorar su español o portugués conociendo este latín.

      En el largo proceso de destrucción de la paideia griega en occidente (la última y definitiva con los cambios en los seminarios católicos tras el CVII) hay pequeñas islas, como ésta (también vale memorizar poesía, bailar danzas regionales, estudiar a Euclides...no son excluyentes), que pueden salvar nuestra civilización, como en su tiempo lo salvaron los monasterios de las invasiones bárbaras.

      Eliminar
    3. La llamada "Biblia del Oso" de ex fraile jerónimo y converso protestante Casiodoro de Reina es un placer para leer como literatura. En ARCHIVE se puede encontrar gratis.

      Esta es la Biblia que edita su compinche y hermano de hábito Cipriano de Valera con algunas modificaciones.

      La característica es que no es una traducción de la Vulgata jerónima, sino directamente del hebreo (texto "masoretico") a la vista de la llamada "Biblia de Ferrara", traducción hecha al castellano por sefarditas establecidos en esa ciudad italiana.

      Eliminar
  6. "volver a una “Iglesia primitiva en la cual la unidad no había sido aún amenazada por los cismas y las herejías, y que en cuanto tal puede ser el lugar de encuentro ecuménico por excelencia”."

    Bueno, tal vez en público no lo haya dicho nadie, pero evidentemente ese es el fundamento del calvinismo, del luteranismo, del anglicanismo y el de todas las sectas protestantes (son miles) por una parte y, por otra, de los cambios reales que impulsó Montini con la excusa del "Concilio": Liturgia protestantizante, teología creativa protestantizante, salas de oración -que no iglesias- criptoprotestantes y clero protestantizante (pastores laicos y clero no consagrado)

    Me pregunto por qué es tan importante la presunta "unidad" (no hay ni habrá nunca ninguna unidad entre las sectas protestantes ni tampoco entre las diversas tendencias dentro de la secta) y qué estaba mal (¡TODO!) con lo que había antes.

    Yo creo que la única razón de la Iglesia es cumplir el mandato expreso de Cristo de ir y predicar la buena nueva. Pero el tiempo pasa y ya no vamos a la sinagoga y al Templo, como los primitivos cristianos: hemos desarrollado una cultura reaccionando y reflexionando sobre los problemas vivenciales, porque evidentemente ya no vivimos en el siglo II y tampoco existe el Templo donde cumplir la Ley con sacrificios de sangre (y esto únicamente para aquellos cuya madre es judía; para los gentiles les estaba prohibido pasar al Templo)

    No. No queremos volver al siglo II, con sus injusticias, sus enfermedades, su falta de oportunidades, sus guerras...

    Muchos, especialmente los s.j. entienden que la "Iglesia Primitiva" era un socialismo "avant la lettre" y que votando peronismo, socialismo o comunismo se podrá forzar al incauto a vivir como un "primitivo cristiano" lo quiera o no.

    Al menos podrá consumir robando legalmente a los demás y así "no habrá bombas atómicas" (experiencia Arruoe s.j.).

    Touché!

    Pero eso no son exactamente las palabras del Salvador, que enfatizaba la libertad de cada uno a convertirse o no (por eso predicaba pero no imponía s.j.)

    También dentro de la Iglesia Católica, pero conservando sus dogmas, cultura y tradiciones ha habido fieles que han querido voluntariamente vivir como la "Iglesia Primitiva" (compartiendo los bienes, no luteranizando ni judaizando y viviendo las virtudes cristianas):

    Son las órdenes y congregaciones religiosas e incluso podríamos añadir las órdenes terceras en lo que pueden viviendo en el siglo.

    Hoy sabemos que cualquier trabajador puede vivir "como la Iglesia Primitiva" fundando una cooperativa. Incluso no necesita ir a misa ("banquete eucarístico" y "lectura idolatrica de la Palabra). Libremente.

    También todos hemos visto que en la Unión Soviética los trabajadores vivían "como la Iglesia Primitiva" compartiendo el fruto de su trabajo y sin la molestia de ir a misa (los primitivos cristianos NO iban a misa, queda una invención tardía )

    Tal vez estos primitivistas nos dejarían en paz (¡Señor, qué cruz s.j.!) si permitimos que los católicos alemanes se conviertan libremente s.j. a los errores luterano, los católicos suizos, franceses y holandeses se conviertan libremente a los errores calvinistas s.j. y que los católicos ingleses se conviertan libremente a los errores s.j. henrico-octavistas..

    Pues mira, si eso nos va quitar dolores de cabeza, ¿por qué no?. Siempre que sea libre.

    Porque no vamos a repetir el crimen contra los derechos humanos de Montini:

    Es un derecho humano tener libremente una religión o no tenerla libremente.

    Forzarnos a ser protestantes, aunque sea de la primitiva observancua s.j., es un crimen que se debe denunciar en el Tribunal de la Haya de Derechos Humanos. Huela o no a oveja.

    ResponderEliminar