tag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post8394102096795052126..comments2024-03-28T17:57:20.201-03:00Comments on Caminante Wanderer: El aullido del Lobo (contra Tollers)Wandererhttp://www.blogger.com/profile/12627188765184070835noreply@blogger.comBlogger22125tag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-45758018017545305632007-12-11T18:08:00.000-03:002007-12-11T18:08:00.000-03:00Estimado Lupus: tiene ud. razón en muchas cosas. M...Estimado Lupus: tiene ud. razón en muchas cosas. Me parece que en realidad, en rigor, no discrepamos. En cualquier caso, es muy grato y provechoso discrepar con Usted. Cordialmente, El GalloAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-9657439409337250522007-12-11T13:50:00.000-03:002007-12-11T13:50:00.000-03:00Y tiene Ud. razón, Emboscado: tratar de interpreta...Y tiene Ud. razón, Emboscado: tratar de interpretar la acción de Dios en el conjunto y la acción de Dios en la persona, y aun distinguirlas, no tiene por qué derivar en confrontación.<BR/><BR/>LupusAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-784743684620767762007-12-11T13:30:00.000-03:002007-12-11T13:30:00.000-03:00Una sola cosa más voy a decir, dada la saludable i...Una sola cosa más voy a decir, dada la saludable intervención del Emboscado. Incluso podría agregar a su argumento eso de los "invisibles aceros" que se cruzan a lo largo de nuestras vidas. Los ángeles también siguen combatiendo.<BR/><BR/>No hay bando que se le pueda oponer a Dios mano a mano. El problema está en nosotros. Por eso doy en llamar "banda" a los rebeldes y a los "sin Dios". En el final, la sola presencia de Cristo los fulminará, manifestando la disparidad sustancial y reduciéndolos a sus categorías específicas: banda, bandido y bandidaje.<BR/><BR/>Va de vuelta: es inexorable que en la historia se constituyan "bandos". Referido a lo que es de Cristo y lo que no surge el punto que provoca controversia: ocurra lo que ocurra, más allá de las victorias o derrotas visibles, siguen y seguirán siendo "bandos" desparejos. Uno es el defensor de lo que no tiene mengua y otro el usurpador, el aspirante a sustituto, la "banda" (más precisamente "bandas"), el contrincante del que ya conocemos destino si es contumaz, nos pase lo que nos pase a nosotros en el combate.<BR/><BR/>Como ya conocemos nosotros el destino que se nos ofrece, SÓLO Y SI conservamos la caridad y el amor, antes, durante y después del combate, que es lo que el verdadero enemigo (repito: hay que discernirlo en su contumacia) no conoce ni puede empuñar. Esta diferencia esencial es lo que hace que los hombres se rindan a Cristo con armas y bagajes. Cuando esto se retira, lo que queda es el odio interminable de los "bandos" y el desprecio de los "demás".<BR/><BR/>De lo que hablo es de la caridad de la verdad, de la belleza que le corresponde a la verdad, que es lo que la hace apetecible. De su sobrenatural unidad con el bien.<BR/><BR/>LupusAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-43950591625918181322007-12-11T12:26:00.000-03:002007-12-11T12:26:00.000-03:00Estimados: Muy interesante el intercambio. Gracias...Estimados: Muy interesante el intercambio. Gracias a ambos (Toller y Lupus). Debo leerlo nuevamente despacio. <BR/>Ahora me limito a recomendarles una libro, puesto que alguien (creo que Tollers) pidió que alguien ponga esta historia en una novela.<BR/>Me imagino que la conocerán, pero me vino a la cabeza en cuanto terminé de leer los posts.<BR/>Se trata del libro de Eugenio Corti "El caballo Rojo", y es la zaga de unas familias italianas antes durante y después del conflicto mundial. La subido del Duce, el papel de la guerra, y las posiciones de los distintos personajes, uno de los cuales puede identificarse con el propio autor. Lo mas interesante es la construcción italiana de la posguerra.<BR/>El autor el católico, y esta novela puede ponerse al lado, y sin rubores, de las mejores novelas católicas hasta la médula, al nivel de Zienkiewikz y su trilogía sobre la historia polaca.<BR/>Se los recoiendo mucho, aunque e smuy difícil de consehuir en castellano y la versión en inglés está pesimamente traducida.<BR/>Saludos y nuevamente gracias por el interesantísimo post.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-71512802537098959562007-12-11T10:07:00.000-03:002007-12-11T10:07:00.000-03:00Estimado Lince: traté de seguirlo, pero no sé cómo...Estimado Lince: traté de seguirlo, pero no sé cómo fue a parar ahí; del nazismo me limité a criticar su fatalismo, para mí evidente en la división preestablecida entre inferiores y superiores; decir que esto no se puede ignorar no equivale a ser aliadófilo o liberal, salvo que Ud. necesite que yo lo sea para decir algo pour la gallerie.<BR/><BR/>LupusAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-82099131821017488412007-12-11T09:02:00.000-03:002007-12-11T09:02:00.000-03:00Se impone, de mi parte, una aclaración: he "colgad...Se impone, de mi parte, una aclaración: he "colgado" un comentario que se aplicaba (si se aplicaba) al “post” (¿así se dice, no?) de Tollers, y que mandé antes de haber leído con atención el siguiente de Lupus, el cual, ciertamente, lleva el tema a otra cuestión, y respecto del cual mi comentario queda como “descolgado”. (y la aclaración llega tarde porque recién hoy pude entrar nuevamente al blogg)<BR/>Hecha la aclaración, encuentro a ambos excelentes. Tanto el de Tollers, más vehemente y visceral, como el de Lupus, más sosegado.<BR/><BR/>Y creo que ambos son verdaderos y no hay confrontación entre ellos. ¿Será una cuestión de planos? Porque el “Fin de juego”, me parece, se aplica más a la historia en general, mientras que la réplica de “Lupus” va más a la cuestión de qué nos hacemos, o de qué hacemos cuando ya parece haber caído el katejon, para lo cual arremete contra la conformación de bandos que dejarían afuera a los demás, a quienes no forman parte de los “bandos” que nosotros nos inventamos, a los desarrapados, los inconsistentes, los desorientados, etc., respecto de quienes no podemos desentendernos.<BR/>Tengo para ambos una observación o, mejor dicho, una pregunta.<BR/>A Tollers: me parece que habría que explicar la cuestión del triunfo de las virtudes blandas, porque no existen tales virtudes blandas en la modernidad. Son las virtudes “vueltas locas”, que no son virtudes, y que no pueden subsistir separadas de lo que él llama las virtudes duras, aparentemente contrarias, pero que se sostienen mutuamente, en aquello que tan bien describiera Chesterton al referirse a las paradojas del Cristianismo.<BR/><BR/>A Lupus: veo bandos por todos lados. Desde la primera de las batallas, que es descripta en el Apocalipsis: “Hubo una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles peleaban con el dragón, y peleó el dragón y sus ángeles”. El bando de Mikael respondiendo “Quien cómo Dios” al bando del Demonio y sus ángeles, a su soberbia y a su “Non serviam”. Desde esa primera batalla, digo, hasta la que trae el propio Lupus, la de Harmagedón, en la que el profeta ve “a la bestia, y a los reyes de la tierra, y a sus ejércitos reunidos para hacer la guerra al que montaba el caballo (Cristo) y a su ejército), pasando por todas las batallas intra-históricas, hasta el ‘45 (¿se habrán acabado allí, intra-históricamente hablando, los bandos? En algún sentido, y sólo en algún sentido, creo que sí, y en esto le doy razón a Tollers).<BR/><BR/>En cuanto a nuestro apuro, impaciencia y presunción a la hora de definir los “bandos” y meter a los demás (y a nosotros mismos) en alguno de ellos, a “los demás” en uno y a “nosotros” en otro (ya sabemos cada quien en cuál) es otro cantar, y esta parte de la crítica de Lupus me parece acertadísima.<BR/> Por eso, yo tampoco creo en los bandos, pero que los hay, los hay. Por qué, si no, dice San Pablo en la Segunda Carta a los Corintios (y cosas semejantes en tantos otros lugares): “no os juntéis bajo un yugo desigual con los que no creen. Pues, ¿qué tienen en común la justicia y la iniquidad? ¿O en qué coinciden la luz y las tinieblas? ¿Qué concordia entre Cristo y Belial? ¿O qué comunión puede tener el que cree con el que no cree?, etc.”. Insisto, creo que hay bandos.<BR/><BR/>Y también, que hacia el final de la historia, esos bandos irán diferenciándose más y más, hasta que sea Satanás soltado de su prisión, para “extraviar a las naciones que moran en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, y reunirlos para la guerra.... Y cercarán el campamento de los santos y la ciudad amada... Pero descenderá fuego del cielo y los devorará”. <BR/><BR/>“Dios nos pille confesados”, como dijera Castellani.<BR/><BR/>P.S. Me parece que se aplica lo de Castellani en el comentario a la Parábola del Trigo y la Cizaña. Allí compara esta parábola con la del Sembrador. Y refiriéndose a la primera, dice que es la actividad de Dios en la entera sociedad o colectividad humana. Mientras que la otra representa la actividad de Dios en las almas individuales. Un poco lo que pasa entre Tollers y Lupus. <BR/>Aunque no lo parezca, es una pregunta. Ustedes dirán.<BR/><BR/>El Emboscado.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-68577768872211313022007-12-10T19:23:00.000-03:002007-12-10T19:23:00.000-03:00Lince,Lo que la gente quiere es que sus gobernante...Lince,<BR/><BR/>Lo que la gente quiere es que sus gobernantes se saquen la foto comulgando. Si no, no le ven la veta religiosa. Es medio kukú, qué vamos a hacerle.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-39434565927601438482007-12-10T17:06:00.000-03:002007-12-10T17:06:00.000-03:00Breve y apurado para verla a Cristi asumiendo.Esti...Breve y apurado para verla a Cristi asumiendo.<BR/><BR/>Estimado Lupus:<BR/><BR/>Con respecto a su esfuerzo por mantenerse alejado de toda semejanza al error maniqueo, le recuerdo que cuando se separen las ovejas a la derecha y los cabritos a la izquierda va a encontrar una clara división (mejor no hablemos de bandos). Más o menos, "el que no está conmigo, está contra Mí; el que no junta conmigo, desparrama."<BR/>Cierto que en la Historia uno no tiene por qué "asociarse" sí o sí a uno de los bandos que se confrontan, como que uno sea el "bueno" y otro el "malo".<BR/>Pero tengo contra tí algo que es claro. Tanto la Primera como -más explícitamente- la Segunda Guerra Mundial fueron piedra de toque. Del lado de los aliados no hubo ninguna oveja. Sólo se encontraron cabritos. Del lado del Eje, había mezcla, pero no se puede dudar que hubo de lo bueno. A las virtudes que señaló Tollers (las referidas al arte, la estética, la jerarquía, la familia, el predominio de lo rural, etc., etc.) y también las duras habría que agregar, le recuerdo, las virtudes blandas. Los prisioneros tomados por Alemania fueron tratados con respeto. Los habitantes de las ciudades conquistadas, también. Sólo los traidores fronteras adentro fueron tratados con la dureza que exigían las circunstancias y tal vez más. Las iglesias de Rusia volvieron a abrirse al paso de los nazis. Se colocaron nuevamente los íconos que tenían escondidas algunas familias. ¿Algo más? Tengo material pero no el tiempo.<BR/>Ahora bien, estoy de acuerdo que se trata solamente de limitarnos a decidir si podemos darle la mano al Eje o no, omitiendo consideraciones de bandos que sean necesariamente "buenos" y "malos". Creo que sí, que puedo darle la mano al Eje, si se me permite tomar la diestra de alguien a quien le conozco muy bien algunos defectos que no hacen sombra a sus virtudes.<BR/>Cuando uno juzga a alquien, parte de asumir que va a encontrar virtudes y defectos. El tema es si, por su entidad, arraigo, etc., se destaca la virtud o el vicio, y a partir de eso uno concluirá que Fulano es un santo varón o un diablo, con todos los matices que puede haber entre uno y otro veredicto. Algo análogo ocurre -o debe ocurrir- cuando uno juzga al Eje. Lo cierto es que lo que había de bueno y verdadero en el mundo estaba de este lado. Explíqueme cómo todo esto pudo haber sido convocado indefectiblemente por una horda de voluntaristas, modernos, materialistas, salvajes, y siga el baile, si no es por otras virtudes mucho más fuerte que todo esto último. Sus virtudes superaron largamente sus defectos y por eso hoy el Eje es sinónimo de testimonio contra el mundo.<BR/><BR/>El lince.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-27642173557036120992007-12-10T12:34:00.000-03:002007-12-10T12:34:00.000-03:00Estimado Childerico: hace muy bien en aclarar los ...Estimado Childerico: hace muy bien en aclarar los parecidos y diferencias entre cucús y kukús. Yo me los confundo un poco por que que no he visto muchos cucús, salvo ésos pajaritos de madera que indican el tiempo con tono de maestra ciruela, que al principio parecen simpáticos y luego incordian. Descripción que, en términos generales, también se aplica a los kukús, vendrá de allí la confusión. Cordialmente, el GalloAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-55460328960886960252007-12-10T09:00:00.000-03:002007-12-10T09:00:00.000-03:00Apreciado Wanderer, no dispongo de conexión durant...Apreciado Wanderer, no dispongo de conexión durante los fines de semana, por lo que llego un poco tarde con estas necesarias aclaraciones.<BR/><BR/>Tollers no entiende qué tiene que ver “exactamente” lo que digo con lo que dice, y tiene razón, porque aproveché nada más que el espíritu de su alegato para establecer algunas distinciones anteriores o laterales, como se quiera. Lo que tenía para él quedó dicho en el principio; después hablé de otras cosas que pasaban de ahí. Advertido, volví a aclararlo en el final, pero no alcanzó. Pues bien, lo diré de modo más sencillo: no crea Tollers que todo lo mira a él. Atribuyo la incomprensión a mi falta de claridad. Para no ir coleccionando minucias añadiré que mi preocupación, en todo caso, estriba en lo que falta, lo que se da quizás por sobreentendido, y las consecuencias provocadas por dejar navegar a su aire ciertas consideraciones.<BR/><BR/>Traté de poner énfasis en otra cuestión; anterior o lateral, como les guste. Respecto de la cual ahora dejaré hablar a alguien que Wanderer rescató con toda justicia: “Aquí es donde los santos se diferencian de nosotros: en su actitud hacia la humanidad. Ellos aman de verdad a sus semejantes como tales; sienten el mismo placer al ver a cualquier hombre bajando por la calle que el que sentimos nosotros cuando vemos bajar a un amigo nuestro. Y, por consiguiente, aquel que muestra al santo una hostilidad cerrada, que habla mal de él, que le hace objeto de persecución, es para el santo sencillamente un amigo que se está poniendo pesado... Yo dudo que sea posible para un ser humano amar a todos de una manera comple-tamente imparcial. El propio Señor amaba especialmente a San Juan, y sin duda Nuestra Señora ocupaba un lugar único en los afectos de su Sagrado Corazón. Lo malo que nos ocurre a nosotros, principalmente, no es que pongamos demasiado amor en nuestros parientes y amigos, sino que no hemos empezado en absoluto a amar a la humanidad en general. Y esto es lo que tenemos que pedir, y esperar, como resultado de tratar de imitar a Nuestro Señor; no una indiferencia sin ánimo ante el odio y el mal comportamiento de nuestros semejantes, sino un amor total por ellos tan intrépido, tan clamoroso, que ni el mayor número de insultos, ni la abundancia de ingratitud, pueda vencer su irresistible optimismo”. Y unas páginas después: “La tragedia del mundo son los corazones duros, no los corazones dolientes” (Ronald Knox, “Sermones pastorales”, Patmos, 1963).<BR/><BR/>En cuanto al Gallo, cuyo belicoso disenso no puedo ignorar, creo haber dicho con claridad que acá abajo, sobre todo en las encrucijadas de la historia, es inevitable que se constituyan bandos antagónicos, pero que, insisto, no hay relación de paridad en el orden de lo creado. Son los pocos muy malos los que logran cautivar, seducir, engañar y oprimir para obtener el "número". Ahora, si cree que por atender a los fariseos desatiendo a los filisteos, está equivocado. Digo que ninguno en forma separada, tal como los conocemos hasta hoy, será la contrapartida final. Habrá, en todo caso, una combinación de ambos, más una adecuada dosis de otras viejas y nuevas malicias. Sin embargo, la lacra interior, letal por su cercanía y disimulo, emulará de algún -por ahora- indescriptible modo a aquel parásito. Estamos en el territorio de lo todavía velado y todavía develándose, de modo que, situados allí, tiene pareja importancia señalar la realidad actual y, a la vez, las líneas que de dicha realidad se extienden hacia el futuro.<BR/><BR/>No voy a ser tan iluso de pensar que el tema quedó resuelto, ni mucho menos. Se presenta de continuo en estas páginas. Para aclarar debidamente mi posición, sobre todo en cuanto a los amigos en pugna, quizás convenga preparar, inspirándome en este día de la asunción patagónica, un “Elogio guerrero con bando, bandera, banda y bastón”, si es que me siguen soportando y si, por supuesto, Wanderer y los demás lo permiten. Bastará un poco de paciencia.<BR/><BR/>LupusAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-25160062721587023122007-12-09T11:45:00.000-03:002007-12-09T11:45:00.000-03:00Estimado Lupus:No va para Ud. Me ha costado captar...Estimado Lupus:<BR/><BR/>No va para Ud. Me ha costado captar el sentido de su post. Si con mis preguntas estoy bien rumbeado, créame que me las aplico sólo a mí.<BR/><BR/>Cordiales saludos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-41574265415141758292007-12-07T19:25:00.000-03:002007-12-07T19:25:00.000-03:00Pablo: no sé si va para mí, pero si es así le doy ...Pablo: no sé si va para mí, pero si es así le doy la razón y agradezco la advertencia.<BR/><BR/>LupusAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-26616132278639305632007-12-07T18:53:00.000-03:002007-12-07T18:53:00.000-03:00Sr. Gallo:Me extraña que, siendo Ud. un ave, caiga...Sr. Gallo:<BR/>Me extraña que, siendo Ud. un ave, caiga en tamaña confusión. A ver si aprende:<BR/>CUCÚ: Avecilla pequeña que habita en casas de madera con tejado a dos aguas. Permanece la mayor parte de su vida dentro de su nido, saliendo del mismo sólo en periodos regulares (por lo general, cada hora, aunque hay especies que los hacen cada media hora o, incluso, cada quince minutos) y emitiendo un trino uniforme.<BR/><BR/>KUKÚ: Ave de la familia de las gallináceas, similar a la avutarda, con vuelo rastrero y corto. Habita en muchas regiones del globo debido a su extraordinaria capacidad de adaptación a todos los medios y costumbres de aquellos seres de quienes puede conseguir alimento o cualquier otro beneficio. Su trino no es uniforme ya que también adapta el mismo a los variados gustos de los oyentes.<BR/><BR/>CARACTERÍSTICAS COMUNES: ambos pajaros poseen en común la pronunciación de su nombre y el gusto y placer que encuentran en convivir con gente mersa y vulgar: los cucú lo hacen en la plaza de Villa Carlos Paz, y los kukús en todos y cada uno de los nidos que arman.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-91464263259203070282007-12-07T18:52:00.000-03:002007-12-07T18:52:00.000-03:00Ay, ay, en qué honduras nos metemos!!! O nos han m...Ay, ay, en qué honduras nos metemos!!! O nos han metido Tollers y Lupus, genialmente atizados por el gran director de orquesta que es Wanderer, que sabe sacar lo mejor de cada instrumentista! Que nos ha regalado un ámbito donde poder oir y ventilar lo que verdaderamente nos pasa, nuestras verdaderas dudas y angustias, y no los discursos con buena intención pero algo adocenados que solemos pronunciar y escribir. Yo creo que esta conversación es la que necesitábamos y no podíamos tener, ni por escrito ni a viva voz. Algunas ideas desordenadas:<BR/>1) Chesterton decía que lo malo de las peleas es que interrumpen la discusión. Y no era un pacifista. Calló frente a A.Crowley, como Jesús frente a Herodes. Pero cuando pudo habló.<BR/>2) Ganaron los maricones, sin duda. Las pruebas están a la vista. Pero no parece a la altura del genio de Tollers la división entre duros y blandos. Genio que brilla como pocas veces en su último post. Martín Fierro decía "con los blandos yo soy blando y soy duro con los duros".<BR/>3) Claro que hay bandos. Pero recordemos lo de Castellani:<BR/>Nosotros somos los buenos, nosotros ni más ni menos.<BR/>Los otros son unos potros<BR/>comparados con nosotros.<BR/>4) Lupus en un grande. Me da bronca en este blog cuando veo escritas -por muchos de los participantes- las cosas que me doy cuenta que pienso y que no articulo en palabras.<BR/>5) A riesgo de ser pesado, vuelvo a decir que debemos releer y meditar la parábola del trigo y la cizaña.<BR/>Gracias a Tollers y a Lupus. Nos hacen bien<BR/><BR/>El anónimo normandoAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-61413055445795094052007-12-07T16:58:00.000-03:002007-12-07T16:58:00.000-03:00Otro sí digo: por muy por encima de los bandos que...Otro sí digo: por muy por encima de los bandos que tratemos de estar, nuestra vida es más en ésta tierra es más de milicianos que de filósofos. Por mucho que querramos zafar de la dialéctica, ésta nos alcanza. En ése estado, aún los cucús -a quienes, Dios sabe, en tanto que cucús no quiero nada- están "del lado de acá", y aún a ellos debemos defender (sin mentir nunca, claro) frente a los "del lado de allá". No hemos de criticar a K delante de Laguna; éso no es filosofía, sino deserción y suicidio.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-18590344679349216272007-12-07T16:50:00.000-03:002007-12-07T16:50:00.000-03:00Estimado Wánderer y estimado Lupus: no comparto en...Estimado Wánderer y estimado Lupus: no comparto en ninguna medida la crítica que Lupus hace a Tollers, y por intermedio de éste a todo nuestro “bando”, que también es el de Lupus. Creo que vamos a coincidir con Lupus en que, al menos en cierto sentido, sí hay un bando (o partido, o bandera o causa o como se lo quiera llamar) cristiano, y otro que no lo es, y eso resulta y es consecuencia de que Nuestro Señor, quien trae la espada, es levantado como Signo de Contradicción. Uno es el bando de los Apóstoles y de los que los siguen; y otro de aquellos que no los reciben, para quienes llegará un día de mayor rigor que para la tierra de Sodoma, como enseña Mateo 10 y creo que hay concordancias al menos en los otros dos no sinópticos. Junto con las expresiones de su Misericordia -y hasta ternura- Nuestro Señor y sus Apóstoles emplean muchas veces expresiones de guerra y combate, y no sólo de combate interior contra nuestra concupisencia. San Pablo habla de los adversarios del Evangelio, y dice a los Corintios (IIda) que recibió contra éstos “armas capaces de arrasar fortalezas” y derrumbar los sofismas y baluartes que se levanten contra el Evangelio. Entonces hay bandos. Claro que, hasta el momento mismo de la muerte, la pertenencia a uno u otro bando no es definitiva. Y claro que no podemos hacer un juicio sobre el corazón de tal o cual. Nosotros vemos lo externo; juzgamos según la carne como los fariseos, lo que no deja de ser peligroso, cierto, pero a efectos jurídicos y políticos es imprescindible. Sólo Nuestro Señor hace el juicio verdadero, y en su momento, no antes. Más aún; Jesucristo mismo lo aclara: ni aún en ése momento Él acusará; sino que seremos acusados por sus palabras. Claro que no todos los que aparecen en un bando son buenos, y no todos los que aparecen en otro son malos. Pero uno es el bando bueno y el otro malo, así nomás, “simplíciter”. Con todo el cinismo que como consecuencia de mis pecados he recogido en los últimos años, no dejo de ver que hay un bando bueno y otro malo, como en las Crónicas de Narnia. Con relación a la Cruzada Española, creo que el Alzamiento Nacional fue justo, y fue justa la guerra sobreviniente. Y que allí también hubo un bando bueno y otro malo, por más que, redundo, ni todos los buenos eran buenos ni todos los malos malos. Y hoy aquí estamos nosotros, y, créalo, Lupus; con nuestras lacras y nuestros prejuicios, y fatuidades y tonteras, con todo y eso, y a pesar de eso, sin merecerlo en modo alguno... somos los buenos. Si fuera por nosotros, medrada estaría la buena causa. Es cierto que a veces somos arrogantes y hostiles al cohete, y eso no es bueno. Pero digamos en nuestra defensa que éso le ocurre a todos los que llevan la carga de una pesada y larga batalla. Reflexionemos sobre nuestras miserias para corregirlas con la ayuda de Dios, como hicieron nuestro mayores; pero evitemos las “autocríticas” al uso al cabo de las cuales parece que mucho daño hizo Israel y mucho bien los filisteos.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-48335609890200635242007-12-07T13:12:00.000-03:002007-12-07T13:12:00.000-03:00Amigos,el comentario de Lupus--voy a tener que lee...Amigos,el comentario de Lupus--voy a tener que leerlo dos o tres veces más, porque juro que en buena parte se me escapa exactamente qué quiere decir y a cuento de qué... exactamente. En lo que entiendo, más bien estoy de acuerdo con él. <BR/><BR/>Seafarer es distinto. Releí mi propia "tirade" y no encontré, ni explícita ni implícitamente, una cuestión de bandos, de "nosotros" y "ellos"... a no ser los bandos que se disputaron el siglo XX. Y nosotros estábamos afuera. <BR/><BR/>En cuanto a la síntesis de mi trabajo tal como lo formula Lupus, "faltó inteligencia, sobró voluntad, y por eso, ganaron los maricones"-no es del todo justo. Se dice algo parecido por concomitancias o como ilustración de un caso. No, es más fácil que eso. Digo, 1) Que faltó inteligencia. 2) Que sobró voluntad. 3) Que hubo una guerra entre duros y blandos y, 4) Que, contra toda apariencia, ganaron los blandos.<BR/><BR/>En ese marco sostuve que la Iglesia, precisamente por defender a "los demás", no puede tomar partido entre blandos y duros justamente porque es y representa ambas cosas y ninguna de las dos.<BR/><BR/>Ni Orwell ni Huxley eran católicos, pero cada uno, a su manera dijo media verdad. Me parece que los católicos deben intentar una síntesis (superadora)como a osadas todavía no se ha hecho. Y menos con el nivel de "1984" y "Un Mundo Feliz".<BR/><BR/>Quizá el "Breve Relato" de Solvieff anduviera más acertado, pero, claro, tuvo que adivinar mucho de lo por venir... y nosotros ya lo vimos. <BR/><BR/>Mis nerviosos (e incompletos) apuntes, eran como una convocatoria a que se hiciera la síntesis pendiente. Y si saliera en forma de novela... mejor todavía. Pero ni Malachi Martin, ni Volkoff, ni Benson, ni Bruce Marshall, ni siquiera el propio Castellani pudieron del todo. <BR/><BR/>Quizá porque las cosas les pasaban demasiado cerca, que eran contemporáneos de cosas terribles. <BR/><BR/>Ahora bien, como lo recuerda Ratzinger en su última encíclica, eso no quita que todos, más o menos, aparte de escribir lo mejor que podamos, tengamos otras incumbencias, como las que señala Lupus. Más o menos como las que tenía San Agustín (cito al Papa): <BR/><BR/>Así describió una vez su vida cotidiana: « Corregir a los indisciplinados, confortar a los pusilánimes, sostener a los débiles, refutar a los adversarios, guardarse de los insidiosos, instruir a los ignorantes, estimular a los indolentes, aplacar a los pendencieros, moderar a los ambiciosos, animar a los desalentados, apaciguar a los contendientes, ayudar a los pobres, liberar a los oprimidos, mostrar aprobación a los buenos, tolerar a los malos y [¡pobre de mí!] amar a todos »[22].<BR/><BR/>Fin de la cita. ¡Ah no, momento! Sigue el de Hipona con otra frasecita:<BR/><BR/> « Es el Evangelio lo que me asusta »[23]<BR/><BR/>Y sí, señores Seafarer, Lupus, et alios. <BR/><BR/>Yo también estoy aterrorizado.<BR/><BR/>Jack TollersAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-69846110014269183622007-12-07T10:45:00.000-03:002007-12-07T10:45:00.000-03:00¿Y si el maligno me tendiera la trampa de denuncia...¿Y si el maligno me tendiera la trampa de denunciar al fariseísmo con celo amargo y sutil vanidad? ¿Y si pudiera terminar siendo un fariseo que se dedica a cazar fariseos y se olvida de los hombre comunes?<BR/><BR/>Pablo (Rosario)Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-30778221670868699382007-12-07T10:02:00.000-03:002007-12-07T10:02:00.000-03:00Perdón, omití la cita. Es del libro "El Soldado Ol...Perdón, omití la cita. Es del libro "El Soldado Olvidado", de Guy Sajer. <BR/>El Emboscado.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-3088162902808462832007-12-07T09:53:00.000-03:002007-12-07T09:53:00.000-03:00Estimados: acá va, para lo que pueda servir, el te...Estimados: acá va, para lo que pueda servir, el testimonio de un protagonista, un joven francés enrolado voluntariamente en el ejército alemán y que luchó en el Frente del Este, como tantos jóvenes de toda Europa, en defensa de... Europa: <BR/> <BR/>[...] Sabía que debíamos pasar por aquellos malos momentos para conocer después una Humanidad bondadosa. Por lo menos era lo que nos había dicho nuestro Führer Adolf Hitler. Nada de esto existe. Que descanse en paz. No le guardo rencor como tampoco a los demás grandes dirigentes de este mundo. Por lo menos él nos ha beneficiado con la duda, puesto que no ha tenido ocasión de establecer esos días siguientes a la victoria. En cuanto que los otros, que han organizado su pequeña paz temblorosa en los cuatro rincones del mundo, los otros que, estúpidamente obsesionados por un pánico injustificado y en nombre de una evolución educadora, han dejado a los primates del mundo la ocasión de encender un poco en todas partes amenazadores incendios, esos otros pueden ser juzgados. <BR/>Comeciantes dignos de la horca. Comerciantes que no pudiendo vender negros, han encontrado un negocio casi tan rentable y venden en la actualidad los blancos a los negros. Todo ello arropado en una pequeña política melosa de mujer vieja. Una política que no toma posición.<BR/> <BR/>¿Quién sabe? El viento puede cambiar. Evidentemente, en la actitud de Hitler o de Mussolini había otro estilo. Éstos se permitieron decir no a los viejos convencionalismos. A todos los potentados, indistriales, masones, judíos o culos benditos. En aquella época, todos esos indolentes callaban como muertos, locos de inquietud ante sus huchas en las cuales el director de orquesta Hitler se surtía a manos llenas. Esto, evidentemente, les hacía palidecer viendo derrochar todo aquel dinero para relizar una gran ópera. Entonces, los especuladores cagones y atemorizados subieron al escenario y estrangularon al director de escena pródigo. Pero no conocen la paz. Los cólicos los torturan sin parar. Están a merced del primer músico, negro o amarillo, que se arriesgue a hacerles bailar otro baile. Pero ese baile no será europeo y eso no lo entienden. [...]<BR/><BR/>Y, también:<BR/><BR/>"Demasiadas personas traban conocimiento con la guerra sin ser incomodados por ella. Se lee tranquilamente en un sillón o en la cama la historia de Verdún o Stalingrado, con las nalgas bien caldeadas, sin comprender, y al día siguiente se reanuda el apacible quehacer... No, estos libros hay que leerlos en la incomodidad, forzadamente, considerándose feliz de no verse obligado a escribir a los suyos desde el fondo de una trinchera, con las nalgas en el barro. Hay que leer esto en las peores situaciones, cuando todo parece ir mal, a fin de darse cuenta que los tormentos de la paz no son más que cosas fútiles por las cuales es un error que le salgan a uno cabellos blancos. Nada es verdaderamente agradable en la paz confortable y hay que ser muy tonto para preocuparse por una subida de sueldo. La guerra hay que leerla de pie, velando hasta muy tarde, aunque se tenga sueño. Como lo escribo yo, hasta que amanezca."<BR/><BR/>El EmboscadoAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-62388826103238508852007-12-06T22:07:00.000-03:002007-12-06T22:07:00.000-03:00Y se me olvidó una pequeña nota al pié de página: ...Y se me olvidó una pequeña nota al pié de página: <BR/><BR/>"Ganó el liberalismo, esto es, ganaron los maricones (¿será casual que el gran héroe de las películas de Hollywood sobre la heroica actuación de los yanquis durante la guerra se reveló con los años como maricón?)."<BR/><BR/>Sí, estimado Tollers, es pura casualidad, porque si mal no recuerdo Sir Ian Mckellen(actor de Gandalf) es maricón declarado que participa en marchas de orgullo gay etc., creo que eso no lo hace maricón al Gandalf de las películas.<BR/><BR/><BR/>The Seafarer.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-3867065999767864372.post-8951586846399047002007-12-06T21:54:00.000-03:002007-12-06T21:54:00.000-03:00Estimado Lupus:Gran comentario el suyo. La verdad ...Estimado Lupus:<BR/><BR/>Gran comentario el suyo. La verdad que habla por mí. <BR/><BR/>Jack, lo que usted comentó ya se lo he oido innumerables veces(lo que no es un reproche) y cada vez veo algo que trato de entender, y es eso que Lupus señala sobre "nosotros" y "ellos". No puedo negar que me despierta un eco Kukú. También eso de lo maricones, me hizo acordar al comentario sobre los Kukús y su confusión entre virilidad y patoterismo. Espero sepa disculpar mi falta de argumentos y el llamarlo Kukú, pero lo único que puedo hacer y decir es lo que mi poca inteligencia me permite. <BR/><BR/>Todo suyo<BR/><BR/>The Seafarer. <BR/><BR/>PS: "Hay que tener cuidado al elegir los enemigos porque uno termina pareciendose a ellos" No simpatizo con Borges, pero algo de razón hay en esta frase.Anonymousnoreply@blogger.com