Que Plutarco esté muerto no es la única razón por la que nunca se podrán escribir las Vidas Paralelas de Bergoglio y Mauricio. Por el contrario, salvo en su origen común - hijos de inmigrantes ambos- es difícil concebir identidades tan disímiles. Diríamos que son rectas divergentes, que después de ese punto de inicio no volverán a cruzarse nunca más.
En el corto espacio de veintidós minutos esta evidencia quedó al desnudo. Como en ese cuento de Philip Dick donde se toma una droga para ver la realidad, distorsionada por otra droga, reapareció la faz de Bergoglio, la faz sólita, la cara sobreactuadamente adusta, oculta bajo la euforia de la parafernalia pontifical. Como cuando los adultos ponen "cara mala" ante los chicos, Bergoglio está enojado.
El enojo responde a la frustración. El papa más político de los últimos siglos es una catástrofe política, un aprendiz fallido de Maquiavelo. Opción que apoya, opción que pierde, como ha quedado evidenciado y documentado por el Sr. Durán Barba en la última elección argentina. Y lo peor de todo es que sus filias y fobias no responden a un vector basado en la fe o en la moral pública católica, sino que se apoyan en dos curiosos pilares: su construcción ideológica personal (bizarra mezcla de progresismo, resentimiento y socialismo declamatorio mezclado con algunas dosis de veterofascismo peronista) y sus caprichos.
Estas veleidades lo han precipitado en un doble estandard indignante donde derrama sonrisas con Obama y Fidel Castro y recibe como si fuera Stalin a Macri. Esto se llama, en buen lenguaje teológico, acepción de personas, y es indignante. Ya no es una rareza escuchar a la gente común quejarse de las manipulaciones pontificias y de sus contradicciones flagrantes. “Pecadores sí, corruptos no”, mientras no sean de izquierdas o no presidan la FIFA o no tengan programas masivos de televisión o no se roben un país. Ni siquiera se molesta en justificar estas arbitrariedades; apenas un adlatere suyo, rector de la Universidad Pontificia, ha salido con un artículo donde descalifica a los críticos del famoso rosario con un autoritarismo argumental digno de mejor causa. Mientras tanto, muchos presos políticos siguen esperando sus rosarios - pero no hay rosarios para la derecha, el único crimen irredimible-. Por izquierda se roba mejor y no se sufren condenas moralistas, nos lo enseñó Néstor, de quien Bergoglio aprendió mucho.
Entendamos: papas caprichosos y obstinados los ha habido y los habrá. La edad provecta, el vértigo del cargo ("la Sede de Pedro no puede ser juzgada"), el clericalismo, pueden llevar a que un papa anteponga sus propios deseos y voluntad a los intereses supremos de los fieles y de la Iglesia. Es entendible, pero es gravísimo, sobre todo en el grado en el que lo está haciendo este papa. Sobre todo porque estos enfrentamientos inútiles con el Estado los pagan los fieles y la Iglesia. Subrayo lo de inútiles: no está en juego más que la ideología bergogliana, que se extinguirá con su vida. No hay en discusión ni los principios cristianos del gobierno, ni la libertad de la Iglesia, ni la moral pública, únicos temas que pueden justificar un enfrentamiento con el César.
Por cierto, en las últimas semanas este esquema de conflicto se ha trasladado a un candidato presidencial norteamericano, a quien estigmatizó como no cristiano por propiciar un muro. Donald, agradecido, porque la torpeza de la mención lo favoreció en el indómito electorado yanqui que no tolera injerencias clericales, no tardó en advertir que el debelador de muros vive en un Estado completamente amurallado. Como católicos, lamentamos profundamente este papel de idiota útil de la progresía mundial en que se ha empeñado Francisco, olvidando que el papado exige la más ácida renuncia a los caprichos personales: una ascesis de la persona en aras de la Institución. No se te dio el papado para imponerte, ni para imponer tus opiniones contingentes, porque si lo haces caes en un abuso de poder tiránico. Sic transit gloria mundi, et gloriae tua.
Debería recordar que a un antecesor suyo su obstinación y su tirria contra el Emperador le costaron el saqueo de Roma. Gracias a Dios Macri no es Carlos V, ni Trump Enrique VIII -de esto no estoy tan seguro-, pero Bergoglio está jugando con fuego.
Ludovicus
Don W, este comentario no tiene que ver directamente con el tema, pero se refiere al Papa.
ResponderEliminarEstuve con un hijo espiritual y "amigo" de Bergoglio que hace unos días estuvo con él, en una de sus visitas regulares. Dijo que "el Papa es muy consciente de que un sector «muy grande» de la Iglesia está en contra de él". Explicitó esto diciendo que son "conservadores" (y adjetivos similares) y que al papa no le importa porque él "va a seguir haciendo las cosas igual". (Esto último, al menos, en el sentido de seguir trabajando).
Sabe que -no sólo conservadores- cada vez son más los católicos que no lo apoyan y, sin embargo, sigue coqueteando con el mundo y buscando su aprobación.
Espero que después de negar a su Señor, se de cuenta y llore amargamente; pero me pregunto ¿cuánto falta para la tercera negación? yo ya perdí la cuenta, paré de contar, pero creo que Bergoglio todavía no empezó...
TW
Buenísimo comentario Ludovicus! (Solo una pregunta, humildemente, me parece que "adlater" es una deformación, ¿no es correcto "a-later"?)
ResponderEliminarEl de H.
Trump al poder, y cartón lleno!
ResponderEliminarRegalarle a Francisco una cruz de las matarazas fue una broma genial que mucho debe haber contribuido a la cara de asno. Después de haber agradecido la el regalo de Evo, no podía negarse. Y menos aún tras el comunicado oficial que lo convertía en un obsequio "políticamente correcto" fruto de los "pueblos originarios" "inculturados" por los jesuitas.
ResponderEliminarNo sé si fue idea de Macri o de algún asesor, pero fue excelente.
Gracias Ludovicus por compartir su visión.
ResponderEliminarMe quedo con el concepto "acepción de personas"... Que importante para la vida... Si Dios hace salir el sol sobre malos y buenos, tenemos que pedir la gracia de tratar con caridad a todos.
Juancho.
https://www.youtube.com/watch?v=Db4gpF_wg2o
ResponderEliminarEl Nevado
Animo al Coronel, o a otro, a que explique para los extranjeros por qué es gracioso lo de la cruz de las matarazas. Y quizá también por qué en Sin Doblez llaman matarazas a las monjas kukuses.
ResponderEliminarEl de H.:
ResponderEliminaradlátere
Alterac. del lat. a latĕre 'al lado', por confusión de las preps. lats. a 'desde' y ad 'junto a'.
1. adj. Dicho de una cosa: Aledaña o supeditada a otra. U. t. c. s.
2. m. y f. despect. Persona subordinada a otra de la que parece inseparable.
http://dle.rae.es/?id=0m2Qr5J
Los Sin Doblez llaman "matarazas" a las monjas kukusas porque se llaman Servidoras del Señor y la virgen de Matará y portan esa cruz.
ResponderEliminarDe todos modos, los Sin Doblez son los que hoy ven lo que el resto vio hace muchos años. Y De golpe pretenden que todos vean lo que ellos no veían hasta hace 4 meses.
Un Plutarco contemporáneo podría escribir las vidas paralelas de Macri y Trump, yo los veo bastante parecidos. Aunque en la Amércia de Donald el ecuatoriano Duran Barba se queda afuera, por latino, detrás del muro.
ResponderEliminarDuran Barba la tiene clara, en la campaña dijo que a nadie le importa un pepino lo que diga el Papa, la gente vota lo que se le da la gana; agregando incluso que en el ámbito familiar es muy probable que los hijos voten por el candidato contrario al elegido por sus padres. Así que estimados, se ría o ponga cara de tuje, a nadie le importa.
ResponderEliminarYo soy lector de este blog .... tambien tengo una hermana " Mataraza "......,se dedica a los discapacitados ...............
Habría que analizar a qué público intenta llegar Francisco al acercarse de ese modo a los miembros más colorful y estereotípicos de la izquierda latinoamericana. Porque -claramente- no está llegando a los pobres, que en toda América Latina huyen en masa hacia el Pentecostalismo. En rigor, parecería que pretende llegar a teólogos alemanes y holandeses, y a monjas sexagenarias.
ResponderEliminarPancho I no hace mas que mostrar todos los dias un poco mas su verdadera calaña.
ResponderEliminarNo es mas que un Peroncho resentido ignorante y vulgar (puede ser que sean todos sinonimos, perdon por eso).
Lo mejor es que las viejas taradas neocons que lo bancaban al principio, ahora lo estan aborreciendo.
Incluso Leuco esta ahora poniendo peros en su patetico programa de radio, ya no tiene mas la patetica seccion del Papa Francisco y lo unico que hace es criticarlo.
Es bueno, aunque sea por estos medios que la gilada se de cuenta de quien es realmente Pancho I.
Lo triste es el daño irreparable que le hace a la Iglesia.
Benigno
Miguel, ¡como los lefes!
ResponderEliminarAclaremos, su comentario se parece al de los lefes!
ResponderEliminarPor el grado de refinamiento maligno, me juego a que la broma de la cruz de Matará no viene de los CEO-tecnócratas.
ResponderEliminarMe suena a una broma pesada de los culturales: Aveluto / Pignata-Lombardi?
Me imaginé que la Cruz de Matará era un llamado para que el Papa revisara de una vez su Catecismo. Como tirarle un diccionario por la cabeza a un burro.
ResponderEliminarEl riesgo que veo es que, una vez declarada formalmente la mutua prescindencia entre el César y Pontifex, el primero aproveche para lograr popularidad instalando alegremente el aborto a la carta para proveer laboratorios.
Gracias por el artículo.
ResponderEliminarLos católicos tradicionalistas no son los únicos para escrutar y analizar los " signos de los tiempos " ..
¿Pero leuco no es jude??
ResponderEliminarLeuco era secretario de un montonero o sea guerrillerito, ¿para que lo ven?, mejor escuchen a un periodista como Cachanosky.
ResponderEliminarAnónimo 15:29,
ResponderEliminarEn primer lugar, por si no lo sabe, lo que publica Sin Doblez "nunca existió", son historias irreales de una congregación imaginaria en una tierra desconocida. No sé si me explico.
En cuanto a lo que me pide, en este blog se ha hablado del tema hasta el cansancio. Lo invito a recorrer sus posts.
Saludos
Más allá del riesgo de que esta distancia con el papa y sus provocaciones pueda dar lugar a innumerables perjuicios para los intereses legítimos de la Santa Iglesia en la Argentina y la libertad de los fieles, lo más criminal es el increíble "lucro cesante" en que incurre Bergoglio. Aterra pensar el desperdicio que implica desaprovechar la única oportunidad en que tendremos un papa de nuestra nacionalidad. Juan Pablo II marcó su Patria con una impronta importante, dejó múltiples consecuencias positivas en su país. Bergoglio no deja más que ruinas, desafección hacia la Sede de Pedro (que para el católico medio es imposible de discernir del papa reinante), confusión doctrinal y la idea de que el catolicismo es cualquier cosa blanda.
ResponderEliminarA LUDOVICUS HABRÍA QUE PASARLE EL ARTÍCULO DE INFOCAÓTICA: IDEALIZACIONES HISTÓRICAS I y II.
ResponderEliminarMiguel: tiene razón el Coronel; en nuestro sitio se habla de parábolas. ¡Cuándo entenderán los que nos leen! Es como querer descubrir cómo el mago hace magia: ¡pues disfrute ud. del truco, hombre!
ResponderEliminarAdemás, si en SD hemos visto algunas un poco más tarde que ud., es simplemente porque en las cavernas hay ancianos y hay niños.
Saluti
SD
http://www.clarin.com/politica/Carrio-durisima-Papa-menor-mediocre_0_1533446862.html
ResponderEliminarEL Nevado
Tengo miedo de que el peronismo, o post-kirchnerismo del papa provoque anticlericalismo en Argentina.
ResponderEliminarYa vi en twitter comentarios del estilo "que el Estado le saque los subsidios a la Iglesia" por la mala acogida que el Papa le dio a Macri, mientras le encanta recibir a Guillermo Moreno.
Anónimo de las 20:19:
ResponderEliminarUn poco de anti-clericalismo no vendría nada mal. Un poco... sobre todo ahora.
Los subsidios a obras de caridad -que no creo sean mucha plata- y a los colegios parroquiales no los sacarán porque no conviene: al Estado le costaría más hacerse cargo.
Y los sueldos fenomenales y autos con chofer de que gozan los Obispos tampoco los sacarán porque así los tienen domesticados -salvo algunas rara avis.
Lamentablemente.
El Aprendiz II
Que bueno, porque se veia muy contento con Bachelet! Que se vaya de una vez!
ResponderEliminarRodrigo
Es penoso para mí notar que la rabieta de la alta burguesía argentina contra Francisco no se debe a sus divagues teológicos, litúrgicos y pastorales (que hasta hace poco le aplaudían a mano batiente) sino a comprobar que el Papa no ha querido ser el capellán mayor del gobierno de los Managers y CEOs, negándoles la ansiada foto sonriente a la pareja reinante. No saquemos de foco a nuestras legítimas preocupaciones eclesiales y religiosas, distrayéndonos en cuestiones políticas provincianas. Y aprovechemos la Cuaresma para purificarnos de toda mancha proveniente de la adhesión al capitalismo masónico o al liberalismo que, como sabemos, es pecado.
ResponderEliminarMuy agudos Sin Doblez y el Coronel. Lástima que hablen desde y para su selecta ironía, tan despectiva con quien no la entiende. Por eso las críticas a Bergoglio que llegan desde la Argentina son las menos valoradas. Parecen más simples rabietas de una clase social que una sana indignación espiritual.
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