jueves, 21 de septiembre de 2023

El poder despótico del pontífice romano



Decía en el último post, y lo hemos dicho muchas veces en esta página, que los problemas más graves del catastrófico pontificado actual no pueden achacársele solamente a Bergoglio sino que son la eclosión natural del sobredimensionamiento del pontificado romano que hunde sus raíces en varios siglos atrás, aunque se consolidó con el Papa Pío IX. 

Hace algunos días recibí un comentario de un lector del blog, que comenta con frecuencia con reflexiones muy valiosas pero, en esta ocasión, él no está conmigo y yo no estoy de acuerdo con él. El comentario venía a cuento de lo que está ocurriendo con Mons. Strickland. Yo decía que esta libido por remover obispos incómodos que demuestra Francisco tiene un antecedente cercano: San Pío X, que removió a los dos tercios de los ordinarios de diócesis, abadías, arciprestazgos y prelaturas nullius italianas mediante traslados, promociones o nombramientos ex novo

El comentario que me llegó decía los siguiente: “La comparación con San Pio X es lamentablemente desacertada. Si con mano fuerte actuó fue por razón de Fe. Si uno no entiende esto es por dos cosas, o porque no comprende la penetración nociva de los errores liberales y modernistas en el episcopado de aquel tiempo, o porque desconoce por completo la figura de San Pio X, para lo cual bien haría en comenzar una revisación (sic) de la misma, pudiéndose empezar por ejemplo con su biografía oficial, la de Girolamo Dal Gal. Y si no es así nómbrese un solo obispo ( y uno solo pido, no un tercio) que por causa de su ortodoxia haya sido presionado por San Pio X para que renunciase. No se puede comparar estos procedimientos, porque ¿qué tienen en común la coacción que un padre ejerce sobre su hijo extraviado para que deje de pecar a la coacción que otro padre ejerce sobre un hijo santo para alentarlo a pecar? Nada tienen en común, antes bien, son el agua y el aceite. Además, y por el contrario, de San Pio X se retrata un espiritu (sic) de caridad admirable, incluso con aquellos que se veía obligado a deponer o censurar, penetrado de dolor y luego de retardar la condena todo lo máximo posible. Si uno pierde de vista la doctrina y compara modos así sin mas, puede pensar que lo que es diametralmente opuesto en realidad se parece, porque al perder de vista la doctrina no entiende el espíritu con el que se procedió. El Señor se digne, en un infinita misercordia (sic), darnos otro San Pio X”.

En primer lugar, estoy de acuerdo en que es edificante leer la piadosa biografía de San Pío X escrita por el padre Dal Gal. El problema es que es justamente la biografía oficial escrita para su canonización, y que tiene casi ochenta años de escrita. En las últimas décadas se conocieron muchas cosas que Dal Gal no conocía por un hecho elemental: toda la documentación del pontificado del Papa Sarto estaba embargada en el archivo del Vicariato de Roma y fueron trasladados en 2005 al Archivo Secreto Vaticano.  A esa documentación  sólo pudo accederse a comienzo de los '90. Confiar ciegamente en la biografía de Dal Gal sería como confiar en una biografía de Lenin escrita por el Politburó soviético en 1950 o en la biografía del P. Carlos Mugica escrita por el P. Pepe Di Paola. No sería serio ni confiable. Por otro lado, aquí estamos tratando una cuestión muy específica: las visitas apostólicas y posterior remociones de obispos. Es un tema que necesita una investigación especializada y no puede ser tratado en una biografía general. Y esa investigación existe: es la de Giovanni Vian [no confundir con Giovanni Maria Vian], La riforma della Chiesa per la restaurazione cristiana della società. Le visite apostoliche delle diocesi e dei seminari d'Italia (1903-1914), Roma: Herder, 1998. Se trata de dos volúmenes de más mil páginas en las que el autor —un historiador profesional y profesor en la Universidad de Venecia—, trata el tema con recurso permanente y constante a la toda documentación ahora accesible. 

El autor del comentario da por supuesto que San Pío X corrió a los obispos de sus diócesis porque eran modernistas. Y no es así. Si ese hubiera sido el caso, al primero que debería haber corrido es al arzobispo de Pisa, Pietro Maffi, de inocultables simpatías modernistas. No sólo lo mantuvo en su sede sino que también lo creó cardenal. Otro sospechoso de modernismo era Giacomo Della Chiesa, a quien nombró arzobispo de Bolonia, y luego lo sucedió en el pontificado como Benedicto XV. Tampoco presionó la renuncia del arzobispo de Florencia, el escolapio Alfonso Maria Mistrangelo, sospechoso de liberal; simplemente, se contentó con no otorgarle el cardenalato.

Apenas llegado al pontificado, San Pío X resucitó dos antiguas prácticas de la Iglesia, ya en desuso: las visitas apostólicas y los comisariamientos. Eligió personalmente a 58 visitadores apostólicos que recorrieron las 263 diócesis italianas. A raíz de estos procedimientos, se consideró inadecuados a más de la mitad de los obispos, la mayor parte de los cuales fueron desplazados. Los motivos podían ser la edad, pues había ordinarios muy ancianos que seguían en sus sedes, desmanejos económicos, desarreglos morales o problemas con el clero o el seminario, o simple incapacidad. 

Los procedimientos para expulsar a los obispos eran obligarlos a presentar la dimisión y nombrar un administrador apostólico. En algunos casos, los propios prelados presentaban voluntariamente su renuncia; otros muchos se resistieron, por lo que se ejercían presiones lo suficientemente discretas para no despertar antipatías en los fieles. Los documentos que reproducen las notas emanadas de la Santa Sede dirigidas a los obispos que se buscaba deponer, no muestran precisamente la figura de un padre amante y bondadoso que sufre por el castigo que debe aplicar a sus hijos, como nos dice el comentarista.

No me cabe duda que la mayor parte de los obispos desplazados por San Pío X no eran buenos obispos. El problema está en que la sede romana se erigió como la sede suprema ejerciendo un poder absoluto y posicionando a los obispos como meros delegados de ella: el Papa como gerente general de una multinacional del cual dependen los gerentes de todas las sucursales, y están a su merced. Eso nunca había existido en la iglesia católica. Los obispos son tan sucesores de los apóstoles como lo es el Papa de Roma, que no puede tratarlos como meros subordinados. Cuando los obispos no funcionaban, o funcionaban mal, como era lo que aparentemente ocurría en la Italia de comienzos del siglo XX, los procedimiento que la Iglesia aplicaba tradicionalmente eran otros: se convocaba un sínodo provincial en el que los obispos que componían esa provincia eclesiástica escuchaban a los acusadores y escuchaban al acusado, dándole la oportunidad de defenderse, derecho que tiene cualquier ser humano y, con mayor razón, un sucesor de los apóstoles, y luego emitían su veredicto. La solución más fácil y rápida, el atajo, es echarlo al mal obispo y reemplazarlo, pero los atajos siempre se cobran su factura. Son peligrosos; a la larga, se vuelven en contra.

Nosotros tendemos a pensar, o a soñar, que sería muy bueno para la Iglesia que llegara un Papa de temple que echara de un plumazo a la parva de obispos malos que pueblan el país y el mundo. Ese sería el atajo; pan para hoy y hambre para mañana. Es lo que hizo San Pío X, sin darse cuenta que detrás de él podía venir, como de hecho vino, Francisco, que no ha hecho más aplicar el mismo método de gobierno que el santo Papa Sarto.  

    Se usaron medios extremos —la suma del poder absoluto que concede el pontificado— para fines lícitos —correr obispos inservibles por diversos motivos—, pero al final quedó el instrumento vuelto loco y se evaporó la buena doctrina y las buenas intenciones que tenía San Pío X; vino Francisco, se apoderó del instrumento que le había dejado servido y estamos ahora a merced de un Papa dictador. Los atajos, una vez más, siempre se cobran su factura.


64 comentarios:

  1. Estoy a grandes rasgos de acuerdo con Wanderer. Por desgracia, la forma en que el Papa Francisco trata a los obispos es, a menudo, vergonzosa. ¿Alguien se imagina que San Pedro echara del colegio apostólico a San Felipe, por ejemplo, y se negara a recibirlo siquiera? La autoridad en la Iglesia, incluso cuando es suprema, no debe ejercerse nunca de forma despótica, pero lamentablemente ese modo ilegítimo de ejercicio no es nuevo y pueden encontrarse muchos ejemplos a lo largo de la historia.

    Dicho eso y por romper una lanza en favor de San Pío X, yo diría que absolutamente todo lo que hacemos pasa factura y, a menudo, con consecuencias imprevisibles para nosotros, tanto para bien como para mal. Es parte de nuestra limitación humana y también del legado del pecado original, así que hay que ser cuidadoso antes de reprocharle a alguien esas consecuencias que, para él, fueron imprevisibles.

    Los poderes excepcionales son eso, excepcionales y habitualmente no hay que utilizarlos, porque de otro modo dejan de ser excepcionales. Sin embargo, si existen es por algo y la razón de su existencia es, precisamente, ser utilizados en situaciones excepcionales.

    Creo que, cuando por alguna razón conviene echar a dos tercios de los obispos de un país o región, por definición nos encontramos en una situación excepcional, en la que las soluciones habituales ya no bastan. Y la demostración es muy sencilla: ¿alguien cree que convocar un sínodo provincial en Alemania o centroeuropa serviría de algo en la actualidad? Ya hemos visto el resultado del sínodo alemán, que es más herejía y barbaridades cada vez mayores. Y lo mismo sucedería, créanme, con un sínodo belga, suizo, austriaco, etc. Hay momentos de crisis en los que lo único que se puede hacer es utilizar la escoba y barrer todo hasta que quede limpio. Aunque hacerlo tenga consecuencias imprevistas y la factura tengan que pagarla los que vengan después.

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  2. Excelente artículo. Lo único en que difiero, es que se usen técnicas antiguas de deposición de obispos para tiempos modernos. Es un atajo, cierto. Pero un atajo realista. Lo otro sería un poco tonto. Imagínense un pequeño sínodo para destituir a Monseñor García Cueva: los porteños no solo no lo sacan sino que le dan el premio al catequista del año. Son peores que Hugo Moyano estos muchachos. Para bien o para mal, la mano dura por lo menos acciona. A veces bien y a veces mal. Así es la vida.

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  3. En relación al anterior post:

    https://www.youtube.com/watch?v=-FuBqyuS7J4&ab_channel=CanalOrbe21

    (Cuerva resume en los primeros 5 min el argumento de Wanderer y Eck)

    ¿Será que leen al caminante?

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    1. Tengo un sueño, un sueño en que los diáconos, sacerdotes y obispos los sean del Evangelio, el de Cristo, no el del Evangelii gaudium, o de cualquier parida pontificia...y lo sean según el Corazón de Jesucristo, no el del Papa de turno o sus ideales o sueños. Tengo un sueño, nada más...

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  4. Lo primero que me parece oportuno aclarar es la dificultad que se nos presenta al juzgar un hecho histórico cien años después, por la sencilla razón de que para saber si una cosa estuvo bien o mal hecha antes tendríamos que haber estado ahí y ponernos en los zapatos del otro a ver qué hubiéramos hecho nosotros cuando las papas queman.
    Aclarado ese punto, me parece que hay dos cosas importantes aportadas por el anónimo interlocutor de Don Wander. La primera es cuando pide que le den el nombre de un solo obispo al que San Pío X haya echado por su ortodoxia, porque parece que no hubo ninguno. La segunda, es que si no hubiera sido por la severa purga que el Papa Sarto administró para acabar con el flagelo del modernismo, no cabe ninguna duda que Francisco no hubiera llegado cien años después, ¡lo hubiéramos tenido antes de la Segunda Guerra Mundial!
    Por lo tanto, más allá de los errores que pudo haber cometido como cualquier cristiano mortal, ¡viva el Papa San Pío X!

    Fuenteovejuna

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    1. Coincido, pero además 'sueño' que en futuro pase lo mismo con los nombrados por Francisco, a menos que se conviertan.
      De dos Papas así opuestos no pensaba podría surgir algo en común, pero las intenciones y finalidad con la cual se ejerce el poder son contrarias, quien para el bien y quien para destruir.
      Sara

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    2. Estimada Sara
      Hay otra coincidencia además de la que usted señala, pues en el cónclave de 1903 que eligió a Pío X antes se había elegido al Cardenal Rampolla -Secretario de Estado de León XIII- quien fue vetado por el emperador de Austria, Francisco José, quien entonces tenía esa prerrogativa. Se dice que el emperador lo vetó porque Rampolla tenía fama de masón.
      A su vez, en el cónclave que eligió a Francisco se dice que si bien antes se había elegido al Cardenal Scola, esa votación fue anulada porque algún cardenal pícaro votó dos veces y al abrir la urna apareció ese voto de más.
      La coincidencia cruzada fue que si bien gracias a Pío X se acabó con el modernismo que Rampolla tal vez hubiera impuesto vaya uno a saber hasta cuando, esa suerte que tuvimos en 1903 desgraciadamente no la tuvimos en 2013 cuando Scola quedó en el camino, porque desde entonces venimos sufriendo a Francisco como una piedra en el zapato.

      Fuenteovejuna

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    3. Don Ovejuna, es muy peligroso repetir cosas "que se dicen" sin saber quién las dice y con qué fundamento las dice.
      ¿Quién dice que el cardenal Rampolla era masón? La afirmación apareció en dos revistas antimasónicas bastante delirante: La Libre parole y Le bloc antirévolutionnaire, ambas en 1929, es decir, 25 años después del cónclave y 16 años después de la muerte del mismo Rampolla. No es serio; imposible de probar.
      Lo más probable, y a ello conducen las investigaciones recientes, es que el veto del emperador Francisco José se haya debido a que Rampolla, como Secretario de Estado de León XIII, se mostró favorable a Rusia, lo cual el Imperio Austro-húngaro lo veía como un peligro, sobre todo por sus territorios que actualmente forman parte de Polonia. Es significativo que el uso del veto, que poseían varios soberanos católicos, siempre se ejerció por cuestiones estrictamente políticas.

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    4. Estimado Don Wander
      Es cierto que el veto a Rampolla pudo ser porque simpatizaba con la Rusia zarista enemiga del Imperio Austro-húngaro, como usted bien señala. Pero así como usted lo menciona sin poderlo asegurar, yo también dije en modo potencial que pudo ser porque el Cardenal tenía fama de masón, sospecha que por otra parte no era la única porque también se rumoreaba que desde los tiempos de León XIII Rampolla era simpatizante de la III República Francesa donde los masones le sacaban canas verdes a la Iglesia. En fin, lo único cierto es que nunca se pudo probar el verdadero motivo del veto del emperador de Austria. No pasó de ahí la cosa.

      Fuenteovejuna

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    5. El padre Gregorious Hesse en una conferencia ( que debe ser de hace casi 35 años), menciona que la emperatriz Zota le contó a su tío (un Obispo austríaco si no recuerdo mal) el asunto del veto y su relación con la pertenencia/cercanía de Rampolla a la masonería.

      Dicho esto, ignoro si es una fuente creíble o no, pero vale la pena conocer otra referencia del asunto.

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    6. No conocía el conclave del 1903 y no sé si Rampolla fue masón o fue vetado por el imperador de Austria porque favorable a Rusia, pero en la comparación de los dos conclaves se puede decir que el poder de San Pio X vino de Dios por medio del Espirito Santo por el bien de la Iglesia. Del desorden del conclave del 2013 (elección de Scola, mafia S. Galo, Benedetto XI en vida...) no se puede decir lo mismo, almenos se puede dudar y donde el espírito era el del CVII.
      A mi modo de ver se puede aceptar el modo de ejercer el poder de uno y discutir el otro.
      Yo me pregunto, el poder recibido en la persona de San Pio X es el mismo de Francisco? Viene directamente de Dios? Y si el poder viene de Dios, podemos justificar el "modo"? Si es para un bien mejor? Jesús no pensaba a los modos cuando veía el mal.

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    7. Olvidé de firmar
      Sara

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  5. Está bueno tener esos datos históricos que aporta Wanderer, por otro lado san Pío X hubiera podido convocar concilios locales para remover malos obispos con los resultados que él esperaba? Los abusos ya estaban en su época...

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  6. ¿Entonces, para separar la cizaña del trigo, y quemar la cizaña, como se hace? ¿Cómo se elimina de un cuerpo un miembro gangrenoso sin cortarlo?
    Obviamente una purga acarrea responsabilidad, desprolijidades, incluso abusos, pero es cierto que se hacen necesarias cuando la enfermedad (el modernismo en este caso) ya está siendo demasiado toxico para el cuerpo.
    Además, una cosa es utilizar métodos extraordinarios para fines buenos y prudentes, y otra muy distinta es hacer un uso abusivo de dichos métodos para fines malos e imprudentes.

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    1. Creo que los fieles deben ser libres de acudir a ceremonias tradicionalistas o montanistas, y a recibir sana doctrina o doctrina arrupista.

      Por lo menos de la misma manera que hoy un católico puede participar en una ceremonia luterana, calvinista o anglicana ("ecumenismo") sin que le pase nada (recuerdo que antes eso mismo era un pecado.

      El bergollismo es cada vez más despreciado y rechazado por los fieles de Cristo. No tiene futuro y mucha gente no quiere morir con él.

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    2. Lo que piensa Bergolio no es cada vez más rechazado, ni mucho menos, millones de "católicos" aceptarán las herejías
      vestidas de ambigüedades del Sínodo.

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    3. La pregunta "¿Entonces, para separar la cizaña del trigo, y quemar la cizaña, como se hace? ¿Cómo se elimina de un cuerpo un miembro gangrenoso sin cortarlo?" demuestra que no leyó completo Mateo 13: 24-48, dónde además de la parábola Nuestro Señor da la explicación a sus discípulos. Le recomiendo que preste atención allí donde dice que los trabajadores o segadores no son los hombres, sino los ángeles. Usted ocúpese de ser trigo y dar el fruto respectivo, que la Historia de la Iglesia está llena de aquellos que intentaron ocupar un lugar que no les correspondía y terminaron en cualquiera.

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  7. Tal vez ayude pensar en que lo que diferencia a San Pío X de Francisco es lo mismo que para los antiguos diferenciaba al Dictador del Tirano.

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  8. Tomarse atajos se cobra su factura. No tomarlos, puede que también. Y quién sabe qué factura será más elevada, la primera o la segunda. A mi entender, se trata de un problema insoluble, quiero decir, que no hay una solución o atajo que no se cobre su factura, y no precisamente barata. Quizá era demasiado tarde para esperar que un concilio provincial "juzgara" a los malos obispos (y coincido con el comentarista que cree que eso, hoy, es completamente inviable).
    Para la situación actual me temo que sólo quedará esperar que las ramas podridas del árbol se mueran y se caigan por su propio peso (aunque eso, desde luego, también conlleva su propia factura), y que florezcan las sanas.

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  9. Entiendo que el problema que señala Wanderer es que Pio X removió obispos sin un debido proceso en el que el damnificado pudiera defenderse.

    Vamos, que San Pio X juzgara que un obispo fuera modernista, no significa que lo fuera.

    Por otro lado. ¿Qué es eso de remover "malos" obispos trasladándolos a otras diócesis o cargos? ¿No es barrer el probema debajo de la alfombra? Digo, dejarán de causar problemas en Italia, ¿pero en sus nuevos destinos, qué? No parece una solución para los cristianos, más bien sólo para los italianos.

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  10. Yo no entiendo el por qué pierden tanto tiempo y tinta en la cuestión ecuménica, si precisamente este tipo de concepción del papado romano hace inviable cualquier diálogo posible con otras iglesias apostólicas..

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    1. ¿Acaso los israelitas dialogaban con los samaritanos o con los adoradores de Baal? ¿Por ventura la Esposa Mística de Cristo debería pecar con las falsas religiones del mundo, por mucho que éstas se parezcan exteriormente a la católica? La única Iglesia Apostólica es la Católica Romana.

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  11. Toda la razón. La situación actual solo tendrá solución por medio de la intervención divina, sea está más o menos evidente.

    Lógicamente, si estamos en los últimos tiempos y Él llega pronto, sería totalmente evidente este actuar.

    Por el contrario, puede simplemente dejarnos ir al destierro en Babilonia, para que allí la Iglesia sea purificada de todo tipo de idolatrías. Los malos pastores son los primeros en huir en estas situaciones, y las doctrinas que en épocas acomodadas suenan duras, son mejor aceptadas en tiempo de persecución. Dios nos conceda a nosotros perseverar.

    También es cierto, que de los tiempos finales no se nos ha informado su duración, solo que se abreviarán (¿pero cuánto es un tiempo breve para el Señor?). Así que bien podría ser destierro, humanamente largo, y venida.

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  12. Me da la impresión que no he sido suficientemente claro y se está perdiendo el eje de la discusión. La cuestión no si la sede romana puede deponer un obispo hereje; la cuestión son los modos, y hasta qué punto los modos más fáciles pueden terminar siendo perjudiciales.
    San Pío X no depuso a ningún obispo hereje porque no lo había en su tiempo; había obispos más o menos modernistas, a los cuales dejó en sus sedes. San Pío X depuso obispos que se quedaban con algún vuelto cuando vendían un inmueble de la Iglesia, que eran tiranos con con su clero, que tenían de vez un cuando un resbalón con alguna feligresa o que tenían ochenta años y chocheaban. La pregunta es si era conveniente inaugurar un método autoritario para despojarlos de sus diócesis; si se podía cortar la cizaña de un modo tan brusco. Ya se nos advirtió que usar la hoz con demasiada frecuencia y demasiado ahínco puede ser perjudicial.
    Y, secundariamente, era una reflexión acerca de no culpar excesivamente a Francisco por lo que hace porque otros ya lo hicieron antes.

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    1. En realidad, desde estos espacios se culpa a Francisco por los motivos más que por los modos por los que "echa" a los obispos, motivos que anclan en su pésima doctrina, que a esta altura es doctrina no católica. Creo que este es el problema realmente importante, el que ya no se tenga en cuenta la doctrina de N. Señor en la sede petrina.

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    2. Al Sr. Wanderer lo he siempre leído con gusto por los siguientes motivos: fe, cultura, espíritu crítico, seriedad, objetividad. Esta vez estoy en total desacuerdo con la exposición de su tesis y en la relación que habría, con respecto al método, entre San Pío X y Francisco. Por el contrario comparto las opiniones de quienes han escritos los comentarios, en primer lugar en el cuerpo del artículo, y, en segundo lugar, en las respuestas adjuntas.
      El autor del artículo y de este comentario dice: "Y, secundariamente, era una reflexión acerca de no culpar excesivamente a Francisco por lo que hace porque otros ya lo hicieron antes" (21/9/2023, 16.29 hs). Me pregunto: ¿no culpar excesivamente? ¡Excesivo es lo que el Papa actual está obrando! ¿La responsabilidad moral del actual Pontífice se minimiza por la acción puesta en obra por San Pío X? ¡No hay punto de comparación!
      Sr. Wanderer, gracias por todos sus otros artículos y comentarios, en éste me deja perplejo y con una sensación de amargura.
      ¡Viva San Pío X!

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    3. Jesús debería haber depuesto a Judas Iscariote y haberle confiado la bolsa a Mateo del Alfeo. Se habría ahorrado la crucifixión.

      Sin duda, para el Papa San Pio X, resultaba más fácil hacer dimitir a un obispo incapaz, que mirarlos con amor para confeccionar otras alternativas posibles.

      Todo es para nuestro bien. La inquisición no fue algo necesario en su tiempo, aunque sí es necesario que no vuelva jamás.

      Lo mismo ocurre con el autoritarismo de los Papas. No fue ni es necesario, pero algún día, sí será necesario, que no vuelva jamás.






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    4. Creo que los "modos" no es lo fundamental, sino los motivos, es decir la doctrina no católica de este papa

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    5. si dejamos de lado los modos y nos centramos en los motivos solamente, nos acercamos bastante al "fin justifica los medios"

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    6. Anónimo21 de septiembre de 2023, 18:57

      Señor mío, yo no sé quien se cree usted que es ni si sabe de lo que habla respecto a si Jesucristo debía de haber hecho esto o lo otro.

      Y, por cierto, que la crucifixión, era totalmente evitable pero necesaria para redimir a gente como usted y los demás.

      Y ahora se permite usted dar lecciones al Salvador...

      Nosotros no podemos entender con la razón humana, siempre limitada, lo que Dios, que no necesita ningún porqué, hace o deja hacer.

      Respecto a la Inquisición, fue totalmente necesaria en su tiempo, porque las sociedades occidentales están basadas en la religión y un ataque a la religión es un ataque a toda la sociedad y tiene efectos disgregadores y de confrontación.

      La Inquisición, en aquellos paises donde NO funcionó o NO funcionó bien, como Francia, Paises Bajos, Alemania...trajo sangrientas guerras civiles.

      La Inquisición además aseguraba un juicio justo dado por peritos y estaba inclinada a perdonar o a condenas simbólicas a cambio de admitir el error y retractarse.

      ¿Sabe la de gente que asesinó el "tolerante" Enrique VIII con su reforma para hacerse con el control de la Iglesia Católica en Inglaterra? 70.000 personas.

      ¿Sabe la de miles de mujeres que fueron quemadas vivas por los protestantes en Europa simplemente al ser acusadas de "brujas"?

      ¿Sabe que Francia estuvo a punto de ser dividida en 2 paises diferentes, en plenas guerras de religión, que eran guerras civiles, gracias a los "tolerantes" hugonotes, que querían tener un Estado propio ?

      Gracias a la Inquisición eso no pasó ni en España ni en América (sólo 40 casos durante todo el virreinato)

      Lo que pasa es que la Inquisición, como la Bastilla y las lettres de cachet eran una amenaza al poder económico, de ahí el odio de las clases altas

      (ni usted ni yo hubiéramos sido candidatos a la Bastilla, porque eso sólo era para nobles y ricos; ni nunca hubiéramos sufrido una lettre de cachet, salvo ser los criados de una duquesa caprichosa, altanera y vengativa, porque nosotros somos de otra clase (la clase "invisible") ).

      Pero no se preocupe, porque la "Inquisición" ha sido suplantada por la dictadura de los "políticamente correcto" y el movimiento Woke; sólo que esto no es católico ni defiende las sociedades católicas, sino que lo maneja gente como Soros, que odia las sociedades cristianas, blancas y europeas.

      El poder no deja vacíos nunca; si se va o desaparece uno, automáticamente ocupa su lugar otro.

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    7. Anónimo de las 1857.
      Por lo que escribe, su conocimiento acerca del Santo Oficio de la Inquisición es, a lo sumo, Hollywoodense o de History Channel.

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  13. Estoy completamente de acuerdo con el Wanderer. Los obispos, sea por sus pecados personales o por sus olores modernistas, no dejan de ser obispos. Sucesores de los Apóstoles. En tiempos de Pío X se veían fantasmas de modernismo donde no los había, y teniendo en cuenta los resultados pocas décadas después, posiblemente no se los veía donde sí los había. La Iglesia es variada, y amplia, incluso en cuestiones teológicas. No hay que andar revoleando acusaciones de modernismo así como así. Como sea, el exceso en el uso del poder papal (impensado en Italia hasta un par de siglos antes, y en casi todo el mundo hasta fines del XIX) supone la instauración de una monarquía absoluta en la Iglesia. Ya se han mencionado en este blog las similitudes entre el desarrollo de la corona francesa hacia fines del XVIII y del papado 100 años después. El interlocutor del Wanderer compara la acción con el de un padre y sus hijos. Pero el Papa no es el padre de los obispos ("mi obispo es el Papa"), es obispo como sus hermanos obispos, pero de la sede primada. Derrumbar esa idea multisecular es destruir un equilibrio delicado entre las sedes, incluso entre las apostólicas (como dijeron aquí arriba, hoy es inviable una unión con las sedes el este). El argumento del Wanderer es simple: cuando ese poder excesivo es usado para liquidar un enemigo (de nuevo, en mi opinión de una manera sumamente ineficaz) el error queda tapado con los resultados (aparentemente) buenos. Pero una vez que abriste la caja de Pandora, estás complicado. Dejaste la mesa puesta para que venga un Papa que te haga ver con claridad prístina lo necesario que esa moderación en el poder romano. El Papa empieza siendo "la Tradición", "obispo de los obispos", y termina siendo el foco de una religión africana (al decir de Castellani) que le celebra liturgias desagraviantes.
    Nadie va a negar que S. Pío X es un Papa muy distinto que el actual. Sus méritos son incomparables. El tema no es ese. No es un juicio sobre la interioridad o la virtud de San Pío. Sobre eso la Iglesia ha dicho, y sus biógrafos también. El tema es si ese aspecto de su papado no supuso abrir una puerta que iba a terminar (digo terminar, vaya a saber uno qué vendrá luego...) en lo que hoy nos toca. Y en ese sentido, si ese aspecto no fue un error. Eso supone tener el diario del lunes, por supuesto. Pero eso hace la historia. Juzga con el diario del lunes, no las intenciones o los méritos, sino las causas.

    Saludos cordiales,

    G.

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  14. Don Wanderer, el espíritu caudillista argento español es insuperable. Son todos muy maquiavélicos justificando desde a Milei hasta Pio X. El malo malo malo será siempre Bergoglio, encarnación de todas las maldades salidas desde unos pocos manipuladores del VAT II, rompiendo así con la gloria de la tradición a fuerza de bulas. El que no se amolde a la suprema autoridad inmediata y universal del "vicario de Cristo" es un hereje y un cismático, sea que el papa crea en la Trinidad consustancial e indivisible o en la pachamama. Aunque no, si cree en lo primero, entonces sí, mano dura, bulas, uniformaciones y policía pontificia. Pero si cree en lo segundo, depende, o sufrimos en las catacumbas de nuestra web y leemos cuanta profecía nos termine de convencer de que vamos por el camino justo, que este es el fin de los tiempos, que tal vez no sea el verdadero papa y Dios lo tenga escondido al auténtico en alguna cueva por ahí. Porque sin papa la Iglesia no podría existir, y como eso no puede ser, habrá que rezar por ese papa NN que debe andar por ahí escondido. Personalmente, aún no termino de saber a dónde hemos de ir con mi familia, lo que sí sé es a donde no ir. Por la salud del alma, y de la mente, que lo psiquiátrico está patente tanto en los de casulla de leopardo sintético como en los de la eterna discusión que empieza por si Cafrune era zurdo o no, hasta terminar en un análisis morfosintáctico de la renuncia del papa alemán. Las panderetas son un horror en el ofertorio, no tanto Vivaldi, entonces vamos para allá... pfff, vió? ya veo los síntomas de la psicosis asomando... mejor la dejamos ahí.

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  15. Para juzgar habría que saber qué es mas importante, los métodos o los fines. Si aceptamos que en métodos están igualados podemos decir que Pio X es superior porque buscaba el bien de las almas mientras que Bergoglio busca complacer al Mundo. Sin embargo, sabemos que Dios es muy quisquilloso con los métodos, no solo hay que hacer lo que Dios quiere sino como lo quiere.

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    1. ¿Bergoglio busca complacer al Mundo?

      Ese señor sólo busca complacerse a si mismo.

      Es un onanista espiritual con una opinión muy baja de sus súbditos y demasiado alta de si mismo.

      Me pregunto por qué no se casó con su novia, por qué no abandonó el seminario, como hicieron todos sus compañeros, cuando se "aplico" el desastre del Concilio, y por qué tuvo que tomar sesiones de terapia psicoanalista con esa psicóloga judía.

      Este señor no cree y tiene problemas.

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  16. Creo que era lógico que se diera una hipertrofia de la figura del Papa en tiempos de San Pío X porque los modernistas pretendían la disolución del papado en una suerte de conciliarismo. Lo mismo que ocurre ahora con la sinodalidad. No sé de qué otra forma se podría haber actuado.

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  17. Yo creo que se entiende bien. No se puede "desmodernizar" la Iglesia con métodos modernistas. Al final, los métodos se quedan y el espíritu que los propició se desvanece.
    Sólo dos cuestiones sin importancia:
    a) siempre había leído y dado por supuesto que Rampolla era masón. Lo tenía como un dato probado. ¿No es así?
    b) Sobre el cardenal Mistrangelo, tenía entendido todo lo contrario. Leí sobre él en alguna ocasión y recuerdo que tenía fama de antimodernista y furibundo papista. El dato sobre su hipotético modernismo dónde lo puedo encontrar.
    Gracias una vez más, Wanderer.

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    1. Estimado Cesareo, también yo había supuesto la pertenencia de Rampolla a la masonería porque todos lo decían. Hasta que hace tres años leí una investigación irrefutable de Francesco Ricossa. Aquí le dejo el link por si le interesa leerla: https://www.mediafire.com/file/sv8ae3nk8msk887/Rampolla.pdf/file
      En cuanto a Mistrangelo, si busca en la web, encontrará varios artículos sobre su figura.

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    2. ¿Ricossa el sedevacantista, el que desde que se fue (o lo echaron) de Ecône no hace otra cosa que difamar y calumniar a la Fraternidad y a Mons. Lefebvre con cuentos de vieja desde su revista (luego web) Sodalitium?

      Igual, lo voy a leer, aunque porque me interesa mucho la cuestión histórica. Pero dudo de calificar como "irrefutable" algo escrito por este hombre.

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    3. Anónimo, ¿usted es consciente de lo que dice? Parece que la opinión, la vida y costumbres de una persona son determinantes para evaluar su calidad profesional. Don Ricossa es todo lo que usted dice pero, lo que he leído de él en materia histórica, es muy serio y documentado.
      En cuestión de ciencia, en este caso la historia, hay que evaluar la calidad de su investigación, no nuestro acuerdo o desacuerdo con sus opiniones sobre otros temas.

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    4. No es una falacia ad hominem si lo que se pone en duda es la calidad del que transmite la información. Una persona como don Ricossa que acostumbra abusar del "cherry picking" (*) de argumentos en sus investigaciones/denuncias no me da mucha confianza que digamos, especialmente si se le agrega el adjetivo "irrefutable" a su producción. Igualmente, lo voy a leer cum grano salis.

      [*acción de elegir y tomar sólo los elementos más beneficiosos de entre todo lo que está disponible]

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  18. Una pregunta sobre el poder del Papa
    Qué piensan sobre el giro de 180 grados, previo a Francisco, de la Iglesia con respecto a la pena de muerte? A mi siempre me hizo ruido que pasara a ser considerado inaceptable lo que por casi 2 milenios estuvo bien

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  19. Me parece algunos creen Wanderer discute la santidad de San Pio X y no es así.

    Amen de que los santos también cometen errores (no son infalibles ni mucho menos), el foco del post está puesto sobre la estrategia de remoción de obispos, ni más ni menos.

    Pareciera ya no existen matices y si la persona es santa nunca conoció el error.

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  20. Dice, don Wanderer, que «al final quedó el instrumento vuelto loco y se evaporó la buena doctrina».

    Creo que la última afirmación es clave.
    Cuando se evapora la doctrina de la fe y se diluye la vida mística, todas las estructuras de gobierno –aún si algunas son preferibles a otras, evidentemente– se vuelven un "mono con navaja".
    Imaginemos, en medio de la crisis teológico-mística en la que nos hallamos, cuál sería el funcionamiento de los sínodos provinciales o el ejercicio tradicional del rol de los Metropolitanos, etc. ¿Otro instrumento «vuelto loco»?

    Sin dejar de deplorar el autoritarismo estrictamente antitradicional del infelizmente reinante, me parece que hay que apuntar a lo que hace que todo instrumento en la Iglesia finalmente «se vuelva loco» inevitablemente.

    No se puede ignorar que una reforma en el sentido místico-teológico exigirá actuar en el orden del gobierno de la Iglesia, de la selección de los prelados al frente de sus iglesias particulares, de las reformas de los seminarios, y un largo etcétera que exigirá actos prudentes y firmes de gobierno en diferentes niveles. Porque, al fin y al cabo, la Iglesia tiene una dimensión invisible y una visible.
    Pero el núcleo entiendo que es el que creo Ud. señala al final.

    Salvando la licitud del medio imperado para desplegar los actos de gobierno, la elección aquí y ahora, dependerá de un conjunto de circunstancias particulares propias del juicio prudencial, que siempre ha de ser sobrenatural y bajo la égida del don de consejo.

    In Domino.

    - malleus

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  21. El modo absolutista de ambos papas tiene relación con la iglesia renacentista, en la que hemos sido formados todos. La idea del monarca rey con una corte de principios de la iglesia o cardenales es lo que se ha impuesto. Pero también son renacentista s muchas instituciones, usos y costumbres. Volvemos a la austera simplicidad de la fe medieval y de los templos en roca viva?

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    1. La Iglesia renacentista no era absolutista de ninguna manera.

      El Papa sólo tenía poder soberano en los Estados Pontificios.

      Y no sólo porque para poder aplicar sus decretos era necesaria la autorización expresa del soberano en cada pais (exequatur).

      Es que sus disposiciones no podían ser contrarias a la teología ni a los cánones, y para eso ya estaban las Universidades para recordarlo.

      Luego, las órdenes religiosas no podían ser cambiadas así como así, porque el que ingresa en una lo hace con unas condiciones que no se pueden cambiar unilateralmente.

      Las sociedades europeas eran sociedades sometidas a la costumbre y divididas por el privilegio, privilegio a individuos, territorios e instituciones, que no se podía violar.

      En las catedrales de los Paises Bajos, los canónigos tenían el derecho a elegir obispo. En España, desde Isabel y Fernando, los reyes tuvieron el derecho de presentación de obispos (una ternera para que el Papa eligiera uno); respecto a América, las autoridades reales tenían derecho de presentación de cualquier dignidad, incluida la de párroco. La Inquisición dependía de la Corona, de modo que
      el Arsobispo de Toledo, Primado de España, Canciller de Castilla y Adelantado de Cazorla, Bartolomé de Carranza fue acusado de luterano y preso en España y Roma durante 17 años.

      No era raro que algún peregrino recibiese de Roma una canonjía y tampoco era raro que el cabildo se negase a acatarla (le pasó al poeta Juan del Enzina con la catedral de Málaga)

      Eso de los Papas tiranos es algo muy reciente, y no por falta de vocación, sino de poder efectivo.

      Seguramente todo empieza con la Revolución Francesa, por los enormes cambios sociales y políticos que sufren los europeos (y uno de ellos es el enorme aumento del poder de los políticos, que es absoluto, por mucho que se digan de liberales y de que tengan el Congreso, y el de los lobbies de presión), junto con la aconfesionalidad del Estado (que deja de controlar a la Santa Sede), porque los Papas se quedan sin otros poderes que les hagan de contrapeso.

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    2. Cuando el Papa renacentista Gregorio XIII quiso cambiar el Gradual Romano y encarga a Palestrina su reforma, Fernando de las Infantas, entonces en Roma, advierte a Felipe II del acto nefando, el cual ordena inmediatamente a su embajador que lo pare en el acto, cosa que pasa.

      ¿Usted cree que Felipe II hubiera tolerado a una persona tan malvada y tan sospechosa de herejía como Bergoglio hacerse con la suya?

      Porque Felipe II tenía TEMOR DE DIOS y sabía muy bien que en el postrero juicio tendría que dar cuenta de los talentos recibidos.

      Cosa que ese justicialista social o no sabe o no quiere saber.

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  22. Es mi parecer que se han confundido las cosas. Complicar a San Pío X con Bergoglio es una locura, aunque algunos métodos fueran compartidos por ambos. También comparten la sotana, el cargo, el anillo del Pescador, la Mitra ... Pero ahí se acaba toda semejanza, que proviene de una especie de analogía de atribución, antes que de una semejanza real en forma. San Pío X quiso y demostró que le interesaba el bien de la Iglesia, y limitó el uso de sus facultades excepcionales a la península italiana. Bergoglio no tiene sana doctrina, y ha expulsado obispos buenos y leales, y enfermos, como monseñor Livieres, en un acto caracterizado por la maldad y el engaño, lejos de "promover", "trasladar" o lo que fuera al interfecto.
    No se puede comparar las batallas de Simón de Montfort o Juan de Austria con la guerra de Irak, o mejor dicho,contra Irak, o elasalto a Panamá o la toma de Berlín por los rusos, pese a que todas ellos son hechos de guerra, ni se puede responsabilizar a los caudillos militares de lasmismas faltas en todos los casos, por que no corresponde. Lo que para unos está mal, para otros podría estar bien, según las circunstancias, porque el acto moral está conformado por : fin, objeto y circunstancias. El cirujano y el asesino, ambos clavan un cuchillo en el cuerpo de un hombre inocente; mas uno lo hace para curar, y el otro para matar, por cuanto no es lícito compararlos.
    Así pues, me declaro disconforme con esta "comparancia". Salud

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    1. Estimado, me parece que el confunde las cosas es usted. No puede poner en el mismo plano el uso una vestidura determinada con los actos. Las vestiduras, anillos y demás pueden ser de buen o mal gusto; los actos pueden ser buenos o malos.
      Es verdad que San Pío X limitó sus actos a Italia, pero su intención era hacerlo en todo el mundo. Eso queda claro en el libro que mencioné en el post. No lo hizo porque las circunstancias políticas no se lo permitieron y, en el fondo, porque no le dio tiempo.

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    2. Totalmente de acuerdo con Anónimo: el asesino y el cirujano clavan un cuchillo, pero no se puede acusar al cuchillo.

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  23. Soy un visitante de ojito, pasaba por aquí y compré la última nota, por lo general sesudas y ésta es intensa razonable pero distopica. Leemos amanuenses en los comentarios muy apasionados que nos relatan hechos con sus resultados y echan a vuelo los cerebros atizando el brasero de la discordia, luego de leerlos quedo con menos fe de la que tengo, sigan así que cada día serán menos elegidos ...perdón los elegidos. Finalmente estoy en un todo de acuerdo con la postura del bloguero, hay que leerla varias veces y así camina.. gracias!!!

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  24. Benedicto XVI fué el papa de los buenos modales, de la suma paciencia y ternura aún con los lobos rapaces. Así estamos. Dar de latigazos a alguien, ¿está mal? Y si el pastor se ha convertido en mercader y lobo, ¿No es medida de prudencia echarlo a zurriagazos si fuera necesario? En cambio, sacar por violencia, presión, extorsión, y demás vilezas a un pastor bueno sólo por el hecho de que lo es, eso clama al cielo por sus inconfesables fines. No hay punto de comparación entre San Pío X y el mamarracho infelizmente reinante. Lo de los métodos es un vueltito. Los latigazos de Cristo a los mercaderes del Templo lo confirman.
    Hilbert

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  25. Wanderer está en lo cierto. Él no ha afirmado q el sujeto q hoy se viste blanco se parezca san Pío X. Sólo ha señalado q cierto modo de proceder, q nos parece bien cuando lo aplica un hombre virtuoso, resulta ser un arma de doble filo; pues en manos de un vicioso, es catastrófico. Pero, así es la vida, al fin de cuentas.

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  26. Por cierto, siempre he leído que Giacomo della Chiesa era sospechoso de modernismo; sin embargo, su sumo pontificado como Benedicto XV fue plenamente ortodoxo.

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  27. Creo que vale la pena recordar que la actuación de los sínodos provinciales en casos de remoción de obispos desapareció a comienzos del segundo milenio. Hay una decretal de Inocencion III en el Liber Extra (X, I, 7, 2) que claramente señala que el traslado, deposición y cesación en el oficio episcopal correponde al Romano Pontífice: "Sicut ergo episcoporum translatio, vel etiam depositio et cessio, sic et electorum post confirmationem spiritualis ratione coniugii soli est Romano Pontifici reservata". Los sínodos provinciales conservaron competencia para causas menores de los obispos. Quizás el problema sea la teología sobre el vínculo entre iglesia particular y obispo que fue dejada de lado a partir de la Modernidad.

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    1. Que casualidad, justo cuando el papado romano comienza a cortarse solo, dejando atrás la pentarquía.

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  28. Creo que tampoco hay que exagerar demasiado el "poder" de San Pío X. Ni siquiera pudo imponer su candidato a general de la Compañía de Jesús (Mattiussi), ni reformar el seminario modernista de Bérgamo (en el que mucho tuvo que ver Roncalli, futuro Juan XXIII), etc., etc. De hecho apenas muerto Benedicto XV y su mano derecha Gasparri se dedicaron a desarmar rápidamente todo lo hecho por su antecesor.

    Hablando de BXV, si buscamos comparaciones con la situación actual, mejor explorar mejor su pontificado. Como muestra, el botón: La destitución de monseñor Volpi, el confesor de Santa Gemma Galgani, considerado santo por León XIII y mano derecha de Pío X --que lo designó obispo de Arezzo--, llamado a Roma por Della Chiesa --acusado de "luchar contra el modernismo y el liberalismo"--, quien nunca jamás se digno a recibirlo en audiencia.

    ¿A quién nos recuerda este despiadado sino a Francesco Bergoglio?

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    1. Así es Kurtz. Y una cosa muy curiosa: hay muy pocas biografías de Benedicto XV. Pude leer sólo una, en inglés. Hay otra en francés, imposible de conseguir. Quisiera leer algo más para tener un mejor juicio.

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    2. Desconozco un libro de conjunto, pero en las polémicas históricas entre don Curzio Nitoglia y don Francesco Ricossa, que en cuanto a este período tienen una mirada opuesta, yo aprendí bastante.

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    3. Me pasaron:
      Benedetto XV. Papa Giacomo Della Chiesa nel mondo dell'inutile strage, direzione di Alberto Melloni, a cura di Giovanni Cavagnini e Giulia Grossi (Ed. Il Mulino, 2017, 2 vol.).

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  29. Don Wanderer: Su respuesta es caballeresca ante una disensión un tanto fuerte de mi parte, que creí necesaria para salvaguardar la figura santa de Pio X. Traté de hacerla con respeto, pero era consciente que podía causar alguna molestia. Que usted no se haya molestado y que conteste con altura, y que se puede disputar así, a mi me alegra. Esto lo primero, que me causa gratitud. Lo segundo, es que me conformo con que en este post queda salvaguardada la buena intención de San Pio X, porque mas explícitamente deja claro que la critica es hacia un modo de proceder, aunque en Francisco y Pio X haya fines contrapuestos. Pienso que es legítimo actuar con mano fuerte para reformar por razón de Fe y moral, aunque sin duda es legítimo también para un obispo no ser depuesto arbitrariamente, y tener derecho a ser escuchado, sin duda. Que esto fuera así en el caso de San Pio X no me consta, aunque no conozco, admito, el libro que usted menciona. Sigo sosteniendo de todas formas que la biografía de Dal Gal es excelente y que refleja con verdad ese carácter paterno del Papa. Trae historias y testimonios de muchos, es muy documentada, y no hay pie creo yo para pensar en testimonios falsos, porque era voz común la mansedumbre a la vez que firmeza en San Pio X, que si mansedumbre para con el enemigo no tuvo, propiamente entonces no podríamos hablar de santidad, pero nos consta que fue santo, luego...
    Gracias nuevamente por su cordial respuesta, a pesar de no coincidir. Muchas de sus entradas han sido edificantes para mi, es un blog que sigo y aprecio. Dios le bendiga y María le proteja.

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