Servais-Théodore Pinckaers, O.P., La vida espiritual. Ensayo de teología espiritual según San Pablo y Santo Tomás de Aquino.
Un gran libro. De lo mejor que he leído sobre espiritualidad. Y no es para menos viniendo de un eximio conocedor de la materia y también de la teología moral: el padre Pinckaers, autoridad indiscutible en el ámbito de la ética de las virtudes.
Hay un hecho curioso que hace poco señalaba un sabio amigo: cuando se lee la Suma de Santo Tomás de Aquino, habitualmente se pasan sin prestarle demasiada atención las cuestiones 106 a 108 de la Prima Secundae, que son las que tratan sobre la Ley Nueva. Para Pinckaers, en cambio, estas cuestiones son centrales para comprender la espiritualidad cristiana, pues en ellas el Aquinate explica como toda nuestra vida espiritual está sostenida sobre la Ley Nueva que trajo Nuestro Señor y que consiste en la gracia del Espíritu Santo. A diferencia de la Ley Antigua, no es una ley escrita sino que es vida en el corazón de los fieles. En otras palabras, se trata de pasar de una moral de la obligación a una moral de las virtudes.
La espiritualidad católica, luego del Concilio de Trento y por influencia del nominalismo, dejó poco a poco de lado la dimensión interior que debe reglarla y que consiste en la práctica de las virtudes, para concentrarse en una dimensión externa: la obligación de la obediencia a ciertos mandatos. Ya no es el amor el que rige sino el deber.
Lo que explica Pinckaers, basado en San Pablo y en Santo Tomás, es la moral tradicional que puede parecer una moral novedosa y que cambia la perspectiva no solamente de nuestra conducta sino de todo el entramado de la vida espiritual. Y, además, Santo Tomás deja de ser visto solamente como un gran teólogo para convertirse en un maestro espiritual.
El libro está disponible en Amazon en versión Kindle y papel.
Rodrigo Menéndez Piñar, El obsequio religioso. El asentimiento al Magisterio no definitivo.
Don Rodrigo Menéndez es un sacerdote de la arquidiócesis primada de España y ha publicado un interesante estudio sobre el últimamente remozado tema del “magisterio”. Hace pocos días hemos visto como el prefecto del dicasterio de Doctrina de la Fe ha querido meter a empellones su propia interpretación de Amoris letiatiae en la categoría de “magisterio ordinario”, obligando a todos lo católicos a aceptarla. Afortunadamente, el cardenal Müller le puso los puntos sobre las íes a nuestro compatriota de Alcira.
Pero el tema es complejo. ¿Qué es el “magisterio ordinario”? La cuestión podría no haber despertado confusiones si los papas se dedicaran, como antes, a hacer cosas muchos más productivas que escribir encíclicas o exhortaciones apostólicas. León XIII, por ejemplo, escribía poesías latinas y aspiraba rapé. Esos sí que eran papas… Pero la gran multiplicación de expresiones magisteriales por parte de los papas en los últimos tiempos, así como la inseguridad cada vez mayor de muchos fieles ante la confusión doctrinal en la que vivimos, provoca la necesidad de indagar sobre la cuestión. En efecto, algunas recientes intervenciones pontificias (especialmente desde el Concilio Vaticano II) afirman cosas contrarias a lo que el mismo Magisterio venía presentando anteriormente como garante de la Tradición. Algunos ven en estos cambios la liberación de la Iglesia de las deudas oscurantistas del pasado. Si amamos a la Iglesia y poseemos el deseo de conocer la verdad, debemos saber cuáles de sus enseñanzas —sobre todos las producidas a toneladas en los últimos cincuenta años— pertenecen efectivamente al Magisterio, y cuáles no son parte de él.
El libro del P. Menéndez Piñar, prologado por Mons. Athanasius Schneider, es un instrumentos privilegiado, por la seriedad con la que fue escrito, para resolver esas dudas.
El libro fue editado en España por el Instituto San Ildefonso de Toledo y en Argentina por ediciones Del Alcázar. Aquí puede conseguir mayor información sobre el libro.
José María Pemán, Doce cualidades de la mujer.
Creo que no es necesario presentar a Pemán, una de las mejores plumas de la lengua española del siglo XX y, como corresponde, convenientemente silenciado por el progresismo. Porque Pemán era católico y tradicionalista, y aún teniendo estos graves defectos, era un hombre talentoso, capaz de incursionar en todos los géneros literarios y hacerlo bien, con genio, de modo tal que muy pocos pueden aburrirse cuando lo leen.
En este caso, Doce cualidades de la mujer, es un libro integrado por doce capítulos, escrito a comienzos de los ’50, y que contó con una sola edición. Se comprende que es un libro que en la actualidad no podría escribirse porque el feminerío se levantaría horrorizada al leer que Pemán dice nada más que la verdad sobre la mujer. No la denigra ni se burla de ella; la describe, con sus aspectos positivos y sus aspectos negativos. Y lo hace con su genio y su gracejo de modo tal que aún cuando no se esté del todo de acuerdo con él, al menos arranca varias sonrisas.
Ciertamente, se podrán discutir algunas de sus afirmaciones; otras podrán ser consideradas como meros prejuicios culturales. Sin embargo, la cuidada descripción de la psicología femenina está allí, patente e innegable para todos… y todas. Un libro interesante y divertido, para aprender y para pensar, recomendable para varones y mujeres; para los maridos y también para sus cónyuges, y para aquellos que se aprestan a entrar en el grupo de conyugados.
Disponible en Amazon en versión Kindle y papel.
Sensatez, un canal de Youtube: Curso sobre “El nacimiento de la cultura cristiana”.
Siguiendo el libro homónimo, publicado por Homo Legens, el autor desarrolla en varios videos las diversas etapas, personajes y factores que contribuyeron al nacimiento de la cultura cristiana. Ya están subidos los dos primeros videos y los restantes se irán habilitando semanalmente.
En el canal hay también varios videos sobre temas relacionadas con la espiritualidad de los Padres de la Iglesia.