El blog Infocaótica
dedicó algunos de sus últimos post a la persona y a la obra del P. Leonardo
Castellani. Esto provocó la enfurecida reacción de varios lectores, particularmente
españoles, que acumularon varios denuestos sobre el teólogo argentino, los que
podrían ser resumidos diciendo que Castellani fue un desobediente modernista.
Los peninsulares aportan pruebas que pueden leerse en el
blog, aunque yo me detendré en una. Según el Anónimo, el P. Janssens fue unos
de los mejores generales de la Compañía de Jesús, lo cual se prueba porque
durante su mandato se llegó al record histórico de 36.000 miembros. Ergo, el
General tenía razón en castigar a Castellani.
El argumento, análogamente, podría traducirse del siguiente
modo: Bill Gates es el que alcanzó el record histórico en la venta de software.
Ergo, Bill Gates tiene razón en apoyar las causas que apoya. Porque, según el
Anónimo Español, la cantidad es signo de éxito, y éste es signo de sabiduría y
justicia. Voilà!
Y podrán leer ustedes argumentos similares surgidos de la
pluma de Eusebio de Lugo, Ricotín y Pikachu.
No voy a ponerme yo a defender a Castellani. No es necesario.
“Como si los hechos no brindaran por sí solos una refutación evidente”, escribe
Orígenes en su prólogo al Contra Celso.
Allí está la obra del cura; quien tenga seso que la lea y la complete con el
ladrillo verde de Tollers.
Escribía un comentador en Infocaótica que alguien, para criticar a Castellani, debía ser
capaz de “pensar más allá del código binario”. Yo no iría tan lejos pero sí me
gustaría recordar que el pueblo español no se caracterizó precisamente por la
sutiliza de pensamiento, y mucho menos el pueblo catolicista español. El eminente psiquiatra oficial franquista y
catedrático de la Complutense, Antonio Vallejo-Nájera, el mismo que dirigió un
estudio científico destinado a probar la inferioridad mental de las personas de
ideología marxista, hacía referencia en 1937 a “la pandilla de intelectuales”
que debían ser eliminados por sospechosos, entre los que se encontraban Descartes,
Ortega, Russel y Thomas Mann (Domingo,
15 de agosto de 1937). Y, un año antes, el general ídolo del Régimen, Millán
Astray, había gritado en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca, en
presencia de Miguel de Unamuno, “¡Muera la inteligencia!”. Y el diario Arriba nos relata que un año después, en
1939, los falangistas del SEU habían celebrado el día del libro con una gran
quema: “Con esta quema de libros contribuimos al edificio de la España Una,
Grande y Libre. Condenamos al fuego a los libros separatistas, liberales,
marxistas, a los pesimistas, a los de modernismo extravagante, a los cursis, a
los cobardes, a los pseudocientíficos, a los textos malos, a los periódicos
chabacanos”. (Arriba, 2 de mayo de
1939). Signos todos estos de sutiliza intelectual y del más puro catolicismo. Mientras
tanto, Castellani comenzaba a escribir sus libros.
En 1964, cuando Castellani ya había redactado el Evangelio de Jesucristo y sus comentarios
al Apocalipsis, el pasionista español Jeremías de las Sagradas Espinas
confesaba su gran logro intelectual: había pasado veintitrés largo años
estudiando el baile en Santo Tomás, San Buenaventura, San Alfonso María de
Ligorio y un sinfín de escritores más, a partir de lo cual concluía que “el
contacto prolongado de sexo en la cara, pecho, cintura y vientre son actos que
encierran enorme capacidad de las más graves excitaciones sexuales” y, por eso
mismo, el baile es “la última degradación de la diversión, la escuela de
corrupción al alcance de todos, el mayor triunfo de Satanás, ruina de las
mujeres, tristeza de los ángeles y fiesta del diablo” (en Juventud en llamas, Redención, Bilbao, 1964, p. 15). En
consecuencia, el cardenal Segura decretó que los sacerdotes no podían absolver
a los que se confesaban de haber bailado (en Ecclesia, 13 de diciembre de 1952).
Otros eminentes teólogos españoles coetáneos de Castellani
se interesaban, en cambio, por las vestimentas femeninas. Mons. Gúrpide, obispo
de Bilbao, indicaba que “El traje de baños debe tener falda, tirantes anchos y
debe cubrir la espalda” y ordenaba que “las jóvenes no se bañarán en compañía de
muchachos ni estarán con ellos en la playa, ni pasearán en bote, estando unas y
otros en traje de baño”. Se sumaba el arzobispo de Burgos que ordenaba que “el
uso de las medias debe ser imprescindible pues ir sin ellas es signo de
desnudez”. El padre Ángel Ayala, jesuita y fundador de los Propagandistas, enseñaba
a las señoritas: “No permitáis escotes, que ni os harán más bellas ni más
estimables. No toleréis el ir sin medias, aunque vayan otras. No uséis
pantalones. No asistáis a las piscinas mixtas, aunque vayan vuestras amigas. No
améis el cine ni lo frecuentéis. Jamás vayáis en auto solas ni con un chico,
aunque sea correcto y formal. No tuteéis a ningún joven si no es familiar
vuestro. No intereséis vuestro corazón sin antes consultar con vuestra madre y
vuestro confesor”. (A. Ayala, Recuerdos y
criterios de un viejo, Studium, Madrid, 1956. P. 176).
Los laicos, por su parte, no se quedaban atrás. En diciembre
de 1952 organizaban en Valencia el I Congreso de Moralización de las Playas, el
cual logró que, en julio del año siguiente, la Dirección General de Seguridad
estableciera que: “1) Queda prohibido el uso de prendas indecorosas, exigiendo
que cubran el pecho y la espalda debidamente, además de que lleven faldas para
las mujeres y pantalón de deporte para los hombres. 2) Queda prohibido la
permanencia en playas, clubs, bares, etc. bailes y excursiones y, en general fuera
del agua, en traje de baño”, y siguen otras prohibiciones por el estilo.
Y así, en la época en la que el “criptomodernista” y “medio
ignorante que escribía mucho y sabía poco” de Castellani se empeñaba en
cuestionar a sus superiores jesuitas y escribía sus obras, los obispos
españoles desparramaban pastorales sobre la indumentaria femenina, sobre la
pintura de los labios, sobre el patinaje artístico -“absolutamente escandaloso
y rechazable” para el obispo de Vich-, sobre el peligro de que las chicas montaran
en bicicleta y que los curas anduvieran en moto.
En conclusión, ¿qué prueban todos estos datos?
1) Qué los españoles no pueden acusar a Castellani de
ignorante y modernista alardeando de su inveterada catolicidad porque en modo
alguno las enseñanzas y prácticas de los prelados, clérigos y laicos ibéricos
durante el periodo más católico de su historia reciente son índice de
catolicidad.
2) Que la España católica nunca existió, o existió tanto
como la Francia católica, la Italia católica o la Alemania católica. No se
explica de otro modo el hecho histórico irrefutable de que en la Guerra Civil
haya habido dos bandos, los dos poblados de españoles, y unos eran católicos y
otros no lo eran. Y ambos eran malos. Y para prueba basta leer Los grandes cementerios bajo la luna, de
Georges Bernanos, escritor católico francés a quien nadie puede acusar de
liberal o de marxista, que relata sus experiencias en plena guerra civil,
cuando fue a luchar en el bando de los buenos. Una sola muestra: “Conozco a un joven
francés que, en los comienzos de la cruzada episcopal española, luego de tomar
parte de una expedición punitiva, volvió fuera de sí, desgarró su camisa azul
de falangista, mientras repetía con una voz entrecortada por sollozos
contenidos: ‘¡Cochinos! Mataron a dos pobres hombres, a dos viejos campesinos,
viejísimos’… por el crimen de sostener ideas prohibidas por el Estado”. (Siglo Veinte,
Buenos Aires, 1964, p. 207). [Dirán, claro, que los franceses son afrancesados
y por eso lloran; los españoles, que son machos, se la bancan].
3) El único católico que sostuvo a la ficción de la España
católica fue Franco que, clarividentemente afirmaba que no se iba del poder
porque, si lo hacía, todo se derrumbaba. Y así fue. Si alguna vez hubiese
existido la España católica, la misma debería haber tardado décadas en
desintegrarse. Tardó meses. Y ahora es lo que es.
El (supuesto) catolicismo sin espíritu evangélico es una forma de paganismo, que al pasar al culto es además idolatría.
ResponderEliminarUna idolatría con formas exteriores católicas, pero que en realidad interiormente se alimenta de su propia concepción religiosa ajena a la del Espíritu (como son el modernismo y el ultramontanismo).
El franquismo fue ultramontano y allí está el nudo del asunto.
Cuando aparece un católico (Castellani) es comprensible que no les guste, pues hablaba conforme al Espíritu auténticamente religioso.
Pero hay que distinguir: el ultramontanismo no se trata de una exterioridad farisaica. El fariseismo se alimenta de un orgullo personal que el ultramontano muchas veces no tiene. El ultramontanismo es más bien una ideología que se quiere católica sin serlo, en rigor.
El ultramontano adhiere convencido a una construcción intelectual (ideología). Es voluntarista. Si no lo fuera refrendaría su ideología con la teología y tradición (teología seria y tradición seria) y saldría de su par de consignas, de su reducción pueril de la religión en una arenga sin espiritualidad.
El tema es complejo. Cuando uno acierta en ciertos puntos puede llegar a creer que acierta en todos. Ellos aciertan en su opción por la misa tradicional, pero no en el resto. No es sencillo hacérselos entender. Salirse requiere de un espíritu crítico y sutil. Lo mejor es nunca haber entrado (aquí se entra en general en la juventud para ya no lograr salir) hasta determinada edad, pues luego no se entrará por lo poco atractivo que es para el hombre normal.
No toda crítica a Trento es exacta, pero es verdad que allí, con una respuesta al protestantismo a macha martillo se comenzó a gestar algo ajeno al Espríritu y por ello ideológico. Castellani lo vio.
Ana María Píquio.
Que desde un lugar que está a más de 30.000 kmts. de Roma se ataque al último bastión de la Cristiandad es de traca.
ResponderEliminarLas afirmaciones de los detractores de Castellani y -peor aún- sus motivos son penosos. Como es obvio el criterio de que Jansesns fue un gran general porque los jesuitas nunca fueron tantos en número descalifca abiertamente a Nuestro Señor.
ResponderEliminarLa analogía con Bill Gates según Ud. la plantea no es aplicable porque el número de jesuitas no le daría a Jansens licencia para matar sino signo de buen general jesuita, así que a Gates tampoco le daría más autoridad que en software y no en todo como Ud. pretende ridiculizar.
El que haya habido curas ridículos en España mientras Castellani escribía obras maestras tampoco aporta nada al respecto, porque también hubo en España grandes teólogos en ese mismo tiempo.
La historieta melíflua del voluntario francés me recuerda a el cliché argentino: "los milicos mataron a jóvenes idealistas que sólo repartían panfletos". Es desconocer la guerra revolucionaria.
Sobre la España católica la cuestión es más complicada para comentarla aquí. Digamos que la guerra civil no dio grandes muestras de ella.
Amigo Wanderer: da gusto que haya vuelto, pero se ve que las vacaciones le hicieron mal. Retome sus virtudes y déle una repasadita al manual de lógica.
Anónimo: La distancia entre Buenos Aires y Roma es de poco más de 11.000 kms.
ResponderEliminarCapitán: No se trata de algunos curas ridículos sino de muchos obispos burros.
Nombreme uno de esos "grandes teólogos" que Ud. menciona.
Si no le gusta la historia del melifluo francés, tome el libro de Bernanos y lea. Tendrá para elegir.
A) Poner estos ejemplos como representativos del catolicismo español o de los españoles, es como basar en las expresiones de Evagrio Póntico sobre el trato de las mujeres el pensamiento de la patrística al respecto.
ResponderEliminarB) Si al final de lo que se trata es de resaltar la burremia de los españoles comparándolos con Castellani -cosa que ignoro si le agradaría demasiado-o con vuecencia es más bien cosa de problema identitario. En España se es más lacónico: se resume con la expresión "soplapollez". Que también es post-barroco.
Fr. J.
W:
ResponderEliminaraprecio sus comentarios, pero esta vez creo ha cruzado la raya.
Creo que la falacia de absurdización anda presente en este post.
Creo que el de generalización apresurada también.
Pareciera que la saludable alergia al voluntarismo suareziano le hace identificar Inglaterra con Oxford; denostando todo lo hispánico, condenando lo que hay de bueno, maravilloso y rescatable de su Historia así como también lapidando a sus pensadores.
Y Castellani citaba y mucho a los gallegos, bah! para serle honesto que recuerde ahora a Menéndez y Pelayo y a Ortega.
Pero sólo es mi respetuosa impresión.
Nuevamente, gracias por su retorno.
Dumm y Gasset.
Fr. J., excelente y representativo comentario.
ResponderEliminar¿Me podría recordar la opinión de Evagrio Póntico sobre las mujeres? Claro, recuérdemelo citando la obra y el contexto en el cual lo dice, tal como yo hice en el post.
Por mi parte, le recuerdo que los ejemplos no fueron tomados de un obispo, sino de muchos obispos (casi la totalidad de los prelados españoles de la época) y, si usted necesitara, puedo abrumarlo con infinidad de ejemplos más.
Estimado amigo Dummy, ¿Considera Ud. que yo "denuesto todo lo hispánico, condenando lo que hay de bueno, maravilloso y rescatable de su Historia así como también lapidando a sus pensadores"? ¿Dónde? ¿Cuándo?
ResponderEliminarDenuesto sí a los obispos españoles de los '40 y '50 pero, que yo sepa, no son ellos "lo hispánico". Condeno sí el mito de la España franquista como abanderada de la catolicidad y ofrezco pruebas de mi afirmación. Ofrezca usted prueba de la suya.
Y, definitivamente, no lapido a sus pensadores, porque en los personajes que lapido no encuentro yo a ningún pensador.
Marín Sola, Salaverri, Sauras, Bandera, Ramírez, Muñiz, Orlandis ...
ResponderEliminarNombré jesuitas y dominicos, pero los hay pasionsitas, del clero, etc.
Dejo de lado a Royo Marín a propósito.
Los libros supongo que los conoce, le aseguro que no son reguladores de trajes de baño, bailes o cosas de sexto.
Bernanos: gran escritor, a veces un poco plomo. No niego las historias relatadas, le cito una historia paralela para que compruebe el error: desconocer la guerra revolucionaria. No se juzga una guerra porque algo me cayó mal.
Claro,sobre los ocho vicios capitales, "Evita la intimidad con las mujeres si deseas ser sabio y no les des la libertad de hablarte ni confianza". Lo del contexto se lo dejo a vuecencia.
ResponderEliminarPuede hacer un monográfico sobre "Wanderer y los españoles". Quizá le terminen haciendo lord del imperio británico.
Fr. J.
Wanderer:
ResponderEliminarMuy bien el comentario. Durante algunos años fui del Opus Dei y tenia que vermelas con las "eminencias" que traian de la Universidad de Navarra. Bastaban que vieneran de ahi, o que fueran de España para que en el Opus se los considerara inteligencias superiores.
Una vez me canse y le dije: los padres -ni siquiera los abuelos- de la mayoria de estos "catedraticos" eran analfabetos hechos y derechos, cuyos hijos aprendieron a leer con el socilismo de Felipillo y pasaron directo a las catedras.
En Argentina hace tres generaciones que ya tenemos universitarios y gente alfabeta en un 80 o 90 % de la poblacion. Es mas, la decadencia es reciente. Antes estabamos mejor. Y en algunas familias pueden contarse por muchas mas las generaciones de letrados. España no tiene ni por donde empezar a hablar en "cultura" frente a Argentina.
Lo que dice el post de la aristocracia episcopal es indicativo del nivel de idiotez y atraso de ese pueblo.
Sds.
Wanderer volvió con todo: ahora se enfrenta a la furia española. Choque de planetas. Y que lo pillen confesado.
ResponderEliminarEl Pelado Locke
Excelente artículo wanderer. Felicidades. Estaría muy bien que dedicaras un post completo al origen del ultramontanismo español que luego dió paso a la moralina franquista...
ResponderEliminarAmigos, ¡qué decepción esta entrada! Yo sugerí en un comentario de Infocaótica que, aun pareciéndome bien todo lo que sostenía Castellani, creía percibir en sus partidarios de Internet --no en él-- cierta animadversión hacia España, al atribuirle constantemente los males del catolicismo moderno, cosa que me parecía injusta.
ResponderEliminarAhora compruebo con desagrado que mis sospechas eran acertadas, y que incluso se quedaron cortas, puesto que este artículo es un golpe bajo a España a base de lugares comunes, falsos en su mayor parte. Y todo porque, al parecer, algunos anónimos que criticaron a Castellani en aquel blog eran españoles. (En cuanto a la Guerra Civil y el franquismo su desconocimiento no puede ser mayor, aunque supongo que a nosotros nos pasará algo parecido con Perón.)
Los católicos españoles somos los primeros críticos de España, del catolicismo español y del franquismo. Precisamente nuestro problema quizá radique en que somos demasiado críticos con todo; con lo que apenas existe conciencia patriótica en España y pasamos todo el tiempo pidiendo perdón por nuestro pasado. Pero en este artículo se advierte una inquina que por fuerza ha de entristecer profundamente a todo español que hasta ahora hubiese compartido la línea de Wanderer. Además el ataque tiene lugar en un día especial, el 12 de Octubre. Parece como si hubieran escogido adrede la fecha para infligir mayor daño. Y lo han conseguido. Sin embargo, no creo que los aludidos dirijamos críticas similares a Argentina o a los católicos argentinos, pues, además de que serían injustas y dictadas por las bajas pasiones, sentimos un afecto por aquellas tierras que nos lo impide.
En fin, si fuera posible, espero que rectifiquen y recuperemos todos la cordura. Yo les pido perdón si alguno de mis comentarios les ofendió.
Pobre wanderer, en la que te metiste. Tocarle la niña de los ojos, al nacionalismo católico argentino. Pueden llegar a olvidarse de la guasada de los críticos de Castellani, con tal de defender a la madre patria.
ResponderEliminarEstá bien, los entiendo. Pero en lo que has dicho, no has mentido Wanderer chamigo.
Qué le vamo' a hacer! o alguien está dispuesto a defender a los obispos y laicos españoles de los que puntualmente habla W?
No vale traer a la discusión a Santo Domingo Guzmán. Por santazo y gallegazo que sea.. no se discute sobre él.
A mí, el cuento de la España Católica de Franco me duró media adolescencia y me la sacó "La Boda del Señor Cura" de Vizcaíno Casas (libro católico si los hay) mucho más que cualquier otra lectura más académica.
Yo creo que hubo una España católica. Pero está mucho más cerca de Isabel de Castilla que de Primo de Rivera.. dicho con toda la simpatía que le tengo a José Antonio.
Pobre wanderer. Lo peor es que Yo, gallego entre los gallegos, en esta, te banco.
Puede ser que el post haya sido un poco crudo. Dá la impresión de que no te duele en el alma lanzarle críticas a España y su gente, y a los hijos siepre les duelen las críticas a la madre(sobretodo si son ciertas)y si la crítica parece dicha con acritud duele más.
Dos cosas para el final:
1) Castellani hablaba de "nosotros que somos españoles" y llegó a afirmar que la España de Franco era posiblemente el país con el mejor gobierno (lo dijo en un periscopio de jauja y me acuerdo hasta hoy, por lo impresionante de la pifiada. Si W me lo pide, busco la cita)
2)Los gallegos son brutos y están presos de sus errores religiosos. Pero el resto de Europa no está libre de esos males (hablando de moralina, un buen ejemplo lo dá Irlanda).
Pero pareciera que solamente los españoles tienen olor a ajo y para colmo los argentinos nos venimos matando de risa de los gallegos desde que empezaron a bajar de los barcos.
El mejor ejemplo es el que les digamos CUADRADOS y los acusemos de creer que la tierra no era redonda, justo a los españoles, que de todos los europeos fueron los únicos que le dieron oído y apoyo al tipo que planteaba lo contrario.
Si los ingleses hubiesen sido tanto menos CUADRADOS que los gallegos, hoy hablaríamos inglés y el episcopado local estaría imbuido de OTRA herejía.
El artículo de W no sería menos cierto, aunque tal vez no necesitaría explicarse tanto y no despertaría grandes pasiones.
Fin.
Uno que quiere ser de Xto.
La serie de sitios comunes, tan usados por la propaganda del "exilio" al otro lado del charco y coreados por los hispanistas sajones amigos de las logias como el famoso hecho de Millan Astray son muestra de la burda concepción de lo español en que viven allende los mares de modo acrítico. Mucho más del periodo de la II República y Guerra Civil.
ResponderEliminarCuando quiera pueden observar la foto que nadie comenta de la salida de Unamuno de Salamanca http://nomesjoana.files.wordpress.com/2011/04/unamun_4.jpg?w=530&h=338
No hay nada parecido a lo que cuentan las "crónicas" sino algo muy distinto que en Argentina son incapaces de entender. La rivalidad de las familias en liza en el bando nacional. Un detalle obvio: no gritan a Unamuno.
Millan Astray, aparte de múltiple mutilado de guerra, es un militar intelectual de primer orden capaz de traducir el bushido del japonés al español y verterlo en un código de conducta que configurará un cuerpo militar de élite que hará historia. Otra cosa es su concepto militar de la unidad patria manu militari, que nada tiene que ver con la concepción del Estado tenida por falangistas y tradicionalistas y que bien conoce Unamuno.
(sigue)
Citar a Najera es igualmente improcedente. Lo que debe citar es la línea seguida por los liberales en esos momento en todo el mundo. Da igual que se revistan de fascistas en España o se pongan la cruz gamada en Alemania. Los estudios raciales genéticos son la moda y estudios similares a los de Najera aparecerán en todos lados en las décadas de 1930 a 1950. En Argentina también. Y de hecho en su propio blog cuando hace este juicio sobre la inteligencia de los españoles (que ya apareció en Infocaótica), sólo que ya no estamos en 1950, sino algo más adelante. Si en España se intentaron introducir elementos racistas, es por importación y de la mano de los mismos de siempre. Jamás existió eso en la Falange joseantoniana que sigue el genuino caracter del pueblo español.
ResponderEliminarY calificar al SEU falangista de quema libros es como calificar a una biblioteca de infantil porque el primer libro que se encuentre en un estante es un tebeo. Para esa fecha que da usted del diario Arriba, (1939) la Falange del momento unamuniano, la que estima a Unamuno como una de sus grandes señeras intelectuales, ya no existe por obra de Franco y de las intrigas monárquicas (fundamentalmente de orden liberal) en el cuartel general de Franco.
Precisamente se deberá al SEU falangista el impulso renovador de la intelectualidad española dentro de la patética vida de los acomodados del régimen. Precisamente los únicos que asistirán al entierro de Unamuno serán los falangistas del SEU. José Antonio es el único político que ha llevado a Santo Tomás a los principios ideológicos sin necesidad de citarlo y que ha resultado en una síntesis política, la más nueva hasta el momento, y que nunca ha podido ser desarrollada ni aplicada por la oposición característica de los que no la comprenden y de los que la odian.
De hecho su crítica ya está afectada cuando dice "particularmente españoles". Lo siento, pero no. Precisamente en España se ha dado un rebrote y revalorización de la obra de Castellani en los últimos años, que lo entiendan o lo lean al completo es otra cosa que obedece más a política y otros intereses. Como por ejemplo, los que abundan en lo que llaman neocones.
En definitiva, sufre usted de una gran confusión típica, que confunde a España con la clase inútil y liberalconservadora que la maneja desde la invasión napoleónica a pesar del pueblo al que abotarga en lo que usted llama "masa catolicista", pero que a poco que se revise por dentro la sociedad española, verá que lejana es esa concepción aún en lo más duro del llamado nacionalcatolicismo (térmno inventado por los curas marxistas, por cierto).
Un detalle propio de poner los pies en el suelo en la política:
Cuando el principal problema son los impuestos, el político está contento ¿Por qué? Porque sabe que no hay otros problemas que preocupen especialmente al pueblo y que el gobierno está bien llevado. Algo similar pasa en la vida moral de los pueblos. Cuando el principal problema que preocupa a los obispos es el mero detalle casuístico de la moral pública en cosas del sexto, es porque no hay apenas problemas en otro campo de dicha moral. Y eso es distinto de decir que el modelo de la España franquista fuera sostenible, que eso no lo dice nadie.
De la alta inteligencia de los teólogos españoles podemos hablar largo y tendido. Un detalle más: La segunda escolástica es un fenómeno propiamente hispano. Y es tan alta y libre, que es la única instancia en que tras Trento, se somete a discusión y denuncia a la Inquisición el catecismo de San Pio V en detalles que no suenan bien. De hecho, los teólogos españoles conocían bien ese catecismo por haber sido en su origen el catecismo de un obispo español. Esa libertad e independencia intelectiva del pueblo español, sigue tal cual hoy día a través de los siglos, sólo que acallada por el poder mediático y las ruedas de molino, como esas con las que usted comulga en este artículo, Wanderer.
Bájese del Whisky y tome Vodka. Le hará ver mejor la realidad española.
La España Franquista, guste o no guste (que a la inmensa mayoría no nos gusta) es ni más ni menos lo mejor que pudo ocurrir tras cien años de guerras civiles e intervenciones extranjeras oscuras en el gobierno de España. Y tampoco estuvo exenta la España de Franco, de estas injerencias oscuras, como es fácilmente comprobable.
ResponderEliminarLo eventual de su génesis, sobre un general monárquico y liberal conservador, como en principio fue Franco, lo complicado de su desarrollo a pie de una guerra civil (con muchas más de dos facciones en liza) y una guerra mundial y la posición de aislamiento en la que quedó para poder ser neutral no deja de pesar sobre todo lo negativo que podamos decir de ella y nos hace entenderlo como algo necesario y preferible a cualquier otra cosa que pudiera haber ocurrido. En el aspecto religioso es más de lo mismo.
Las grandes obras de este periodo están ahí cantando por debajo de lo meramente mediático y percibible desde un sillón leyendo a algún hispanista del momento.
Luego tenga usted en cuenta algo, Wanderer. La intelectualidad católica en traje talar (y también sin él), lo mejor y más generoso y dispuesto de ella, se fue al cielo con palmas de martirio en la guerra civil. Eso explica la mediocridad teológica católica española en algo desde un punto de vista humano. Aparte de la media España sin Dios que no fue aniquilada, sino asimilada en la España de Franco.
ResponderEliminarUn ejemplo:
No sabemos que habría sido del Padre Huidobro SJ formado en Bélgica y Alemania y discípulo en Friburgo de Heiddeger que dejando su prometedora carrera intelectual europea volvió a España a servir a los soldados, siguiendo en primera línea a sus almas legionarias a las que había dedicado su vida como capellán castrense (las del viva la muerte de Millan Astray) murió mientras atendía el hospital de campaña en la Cuesta de las Perdices a causa de un proyectil de artillería. Quizás hoy día no se hablaría tanto del Padre Rahner o del Padre Llanos y sí del Padre Huidobro. Actualmente en proceso de beatificación.
Son detalles que los hispanistas no cuentan.
Fue un obispo español Don Leopoldo Eijo y Garay, último Patriarca de las Indias Occidentales, el que puso el dedo en la llaga de la teología que se consagró en el concilio: "pelagianismus redivivus" a causa de un naturalismo que lo envuelve todo. Su sucesor en la diócesis, Casimiro Morcillo, será parte del Coetus Patrum.
Y cuando quiera, Wanderer, hablamos de Bernanos. Es un autor que habla de impresiones genéricas sobre los asesinatos (no da un solo testimonio concreto) y que mezcla "exageracionea y afirmaciones contradictorias en esa obra" (Angel David Martín Rubio) Y para el valor de sus impresiones podemos tomar de la misma obra cuando dice que Hitler no habría jamás tolerado la organización de masacres en su casa.
ResponderEliminarTengamos en cuenta que el hijo de Bernanos era teniente de las milicias falangista en Mallorca y él personalmente era amigo del jefe regional Alfonso de Zayas y él mismo fue el jefe del aparato de propagande de la Falange de Mallorca en plena preguerra.
El descontento antirepresión era similar al de todo falangista de la vieja guardia y expresado por el Jefe de la Falange hasta 1937, Manuel Hedilla (defenestrado y condenado a muerte tras ser disuelta la Falange en 1937). Esta falange joseantoniana es poco conocida y mucho menos estudiada y mostrada, quedándose en una serie de tópicos de lo que luego fue el partido único franquista que usurpó el patrimonio ideológico y simbólico de la Falange amalgamándolo con cosas incompatibles al mismo. Puede leer los discursos de Hedilla radiados de la Navidad de 1936 pidiendo que se acabe la represión contra las masas engañadas y que se castigue sólo a los cabecillas. Es la derechona de siempre, la liberalconservadora y la ultramontana, vestida muchas veces con el yugo y las flechas en aluvión de última hora cuando ya ese modelo de falange cipaya y sangrienta había sido expresamente reprobado en los años anteriores a la guerra por el mismo José Antonio, la que, sedienta de saldar cuentas (y las cuentas son inmensas y de todo tipo), causará la derrama de sangre en represiones, pero eso es algo que no ocurrirá en Mallorca de modo especial como Bernanos pretende hacer creer.
Según los estudios de Sala y confirmados por Angel David Martín Rubio y basados en la cifras del INE, las víctimas de la represión nacional para todas las islas Baleares durante los cuatro años de guerra son de 755. Dentro de los parámetros medios del resto de las zonas.
Sólo en Ibiza (una de las islas), por aquello de comparar, las víctimas de la represión republicana fueron 210 en tres años.
En Bernanos hay que comprender que su odio por Franco es el típico odio de los falangistas de primera hora que ven su obra destruída en 1937. El en lugar de callar y seguir por lo que más convenía a España se fue al extranjero y volcó ese descontento típicamente falangista en un panfleto de propaganda siguiendo lo que hasta entonces había sido su función. Pero el bien de la guerra interesaba otras cosas, como comprendieron los que se quedaron.
Esta es otra parte de la historia que no puede aprender leyendo a hispanistas y contándola desde un sillón. Ha de hablar con los que la han vivido.
Estimado W.:
ResponderEliminar¡Iconoclasmo 2.0! :)
El tema de la "esterilidad intelectual" del franquismo ha sido muy discutido por los españoles. No me atrevo más que a aportar una referencia: Gustavo Bueno, insospechable de franquismo, filósofo materialista, que ha escrito bastante, y de manera bien documentada, probando que la esterilidad filosófica durante el régimen de Franco no fue tal, o no tuvo la extensión que desde el prejuicio se le asigna, incluso en el campo católico, al que aplica su distinción entre "verdadera filosofía" y "filosofía verdadera".
En cuanto a los jesuitas españoles, he leído algunas anécdotas reveladoras de un voluntarismo y un rigorismo que, en buena medida, explica la explosión posterior.
Saludos.
Entrando al trapo y tras haber dejado tópicos aclarados. El caracter católico del pueblo español se mide por una sencilla cuestión histórica: España se altera cuando la voluntad de sus gobernantes deja de ser católica. En otros pueblos no pasa eso. Incluso prosperan y crecen en lo material y (aparentemente) siguen inalterados en lo espiritual cuando se alejan de lo católico, pueden pasar revoluciones y seguir tal cuales. España no. O se sobrepone o deja de serlo en el proceso.
ResponderEliminarEso es la España católica, que no significa una España pura (de todos buenos católicos) sino otra cosa muy distinta y que ha dado lugar a amplios debates irresolubles hasta el día de hoy por defecto de la metafísica, incapaz de atisbar sin la teología lo que implica la vocación de una nación entera para el mundo. Eso es lo que conocemos como Hispanidad, hoy desaparecida, como mantengo.
Interesante reflexión la de la Píquio: sin incurrir en cisma, ni herejía, ni fariseismo, se puede hacer mucho mal a la Iglesia y sus fieles con la ideología católica.
ResponderEliminarSe ve claro en los ejemplos que pone Wanderer: el obispo que reglamenta con casuística para trajes de baño (o cualquier otro motivo) olvida que lo único que debe preocuparle en ese caso es la modestia. No lo olvidó por cismático, ni por hereje, ni necesariamente por fariseo. Lo hizo de puro ideologizado que estaba. Por tener su propia idea y querer imponerla más allá de la regla prudencial y por ende virtuosa.
También acierta en no aceptar toda crítica al C. de Trento, que no es los mismo que el pos-Trento la Compañía, Francisco Suárez y el virus que repartió, etc.
Trento desde el texto fue una solución perfectamente ortodoxa (y dogmática) a una realidad dada. Luego los hombres hacen la historia.
Ludovicus dijo,
ResponderEliminarAl catolicismo hispano lo perjudica mucho el voluntarismo y el énfasis, que en definitiva son lo mismo.
Es penoso constatarlo, porque el muerto se ríe del degollado, pero en gran medida mucho de la religiosidad española se moldeo en la lucha enfática contra dos grandes enemigos, el Islam y la Protesta. Y ya se sabe, con Nietzche, el peligro que se corre cuando odias a alguien.
Muy a pesar que “es de traca” es una expresión que no conocía y tengo pensado adoptarla y fomentarla a troche y moche por lo simpática que resulta, debo decir que este muchacho no para de meter la gamba.
ResponderEliminarEsta vez nos triplicó las distancias; días atrás se ofuscaba porque no podía ser que un carlista sea anti barroco por el solo hecho que Rafael Gambra no habría estado de acuerdo. Lo gracioso es que en un libro de mediados del 60’ Boixadós entrevista a varios españoles, entre ellos a su amigo Gambra. Este esgrime su postura, la que luego Boixadós critica wanderianamente. A pesar de esto siguieron guardándose gran respeto y afecto, como se puede ver en el prólogo que escribe Gambra al último libro de Boixadós, creo que por mediados de los 80’. Esto no era motivo para enconos, ni el pensar era tabú, ni suponía la creación de nuevos dogmas. Hoy parecería que sí.
Si Wanderer invita con whisky tengan a bien relajarse, que estamos charlando.
¡Es de traca!
El Carlista.
Wanderer, usted no es honesto en su defensa de la catolicidad del P. Castellani. ¿Olvida el afecto del mismo por el esoterismo de Hermes? ¿Quién borra sus inmortales palabras dedicadas al escritor de tablas esmeralda en el "Apocalipsis de Juan"?
ResponderEliminarLes gustan ese tipo de autores, a los que se suman Evola y Guenon, porque por ambiguos les permiten autojustificarse cualquier cosa.
Moises de Torquemada
De los españoles que incluye Castellani, también Donoso y J. Verdaguer; los demás ya se acordarán de muchos otros. Que los españoles no se acuerden de nadie, o no lo lo mencionen, es un problema de ellos, apenitas templado a veces. Es difícil entrarles.
ResponderEliminarConfieso que también me irritó la primera lectura de este ritornello de W, pero recordé varios comentarios leídos al pasar en aquellos blogs... ¡Ay de nosotros, los comentaristas! Nuevo oficio ocioso.
Ana María se atreve a caminar por la franja propuesta. Más o menos como si dijéramos que la Argentina del Cong. Eucarístico del 34 o la Argentina de Malvinas prevaleció: lo que prevaleció es la misma Argentina liberal producida por... ni en eso nos ponemos de acuerdo, y en tal desmesura procedemos con una vanidad implacable. Ideología historicista, ultramontanismo, así es.
Lupus
Acá y en España, todo Perón se vuelve peronista y todo Carlitos se proclama carlista, como si el acto de autodefinirse tal o cual cosa tuviera el efecto de una acción moral acertada y completa. Ni que decir de nuestro catolicismo, al que automáticamente consideramos religioso, pero apenas redondeamos un leve registro ético, cuando no un mero esteticismo. Hacemos flamear las virtudes de nuestros choznos, si es que las tuvieron.
ResponderEliminarNo veo que W sea ofensivo contra lo bueno vital de nuestra herencia. Si eso dijera, lo diría.
Lupus
Dicho lo cual, afirmo que sí existieron la España, la Francia, la Italia, la Alemania y la Inglaterra católicas. Que sí existió la Europa católica. Que sí existió la Catolicidad, en el punto más elevado de la historia. O para decirlo debidamente: que sí existió la Cristiandad. No hacen falta citas para afirmar esto. Lo que no creo, y creo que nadie cree, es que en algún punto de la historia, ni siquiera el más elevado, haya existido una congregación universal de hombres puros a cargo de la refacción del paraíso.
ResponderEliminarLupus
Wanderer:
ResponderEliminarAdemás de "Castellani y los Españoles", está el tema de "Castellani y el Luteranismo" / "Castellani y la Contrarreforma".
Por ejemplo, estos textos:
El punto de disensión entre el Catolicismo y el Protestantismo en su nacimiento fue la "exterioridad".
Los protestantes protestaron contra una Iglesia que se volvía un imperialismo, contra una fe que se
volvía ceremonias y obras de filantropía, contra una religión que se volvía exterioridad: y apelaron a la religión interior."
Pero el Protestantismo se llevó consigo una gran verdad cautiva. No era un puro error. ¿Cómo iba a
permitir Dios que la mitad mejor de la Cristiandad cayera en un puro extravío, y eso por culpa de un
monarca sifilítico y un monje burdo y bestial— como pintan a Henry Tudor y a Luther las "Historias de la
Contrarreforma"? Poco honor hacen a Dios los que conciben esa enormidad.
Si media Europa acabó por seguir y acoger la rebelión religiosa es porque toda Europa estaba sumida en
la mayor crisis religiosa de la historia del mundo —en la penúltima: El fariseísmo estaba por ahogar la religión. La exterioridad devoraba la fe.
Están en el Cap. I de Cristo y los Fariseos.
Sin hacer alabanzas de Lutero, hay que tener perspectiva en el juicio histórico.
Juancho.-
- Capitán Willard, qué generoso es usted para otorgar el título de teólogo. Estimo que la obviedad a la que se refiera en relación a Royo Marín es que este dominico no fue un teólogo sino un escritor de buenos manuales de teología. Una diferencia notable.
ResponderEliminarEn cuanto al resto de los escritores religiosos que menciona, haré referencia solamente a uno porque, como decimos en Argentina, “para muestra basta un botón”. El p. Joaquín Salaverri, jesuita, fue la quintaesencia del ultramontanismo que aquí estamos criticando. La temática que desarrolló principalmente fue la eclesiología, desde una perspectiva apologética, y enrolada en la escuela del Vaticano I y de la neoescolástica decadente. En su De Ecclesia Christi, su tratado más conocido, se remonta para explicar la naturaleza de la Iglesia hasta fuentes antiquísimas… es decir, hasta San Roberto Bellarmino porque, para algunos españoles, la iglesia nació en Trento. Afirma una desigualdad de derechos entre los miembros de la iglesia por la cual, entre otras cosas, los laicos están privados de enseñar. Luego, pretende demostrar la sujeción absoluta de los obispos al Papa, justificando denodadamente la infalibilidad pontificia. En fin, un manual de propaganda de la peor especie. Si a Salaverri le tomaban un examen San Atanasio y Newman, seguro que era reprobado (sugiero leer Los fieles y la tradición, escrito por el cardenal inglés y traducido por un argentino). Así que, Capitán, “a confesión de parte, relevo de pruebas”. Si estos son los teólogos españoles del último siglo, queda confirmado mi post sin necesidad de más palabras.
- Fr. J., su comentario es para “mojar el pancito”, como decimos en Argentina. No he podido resistir la tentación y lo responderé con un post.
- Don Fernando, dígame cuáles son las apreciaciones falsas. A todas ellas he agregado la referencia exacta, para que pueda comprobarse, y si son lugares comunes, por algo son comunes. Y si su intención es hacer críticas a la Argentina o a los católicos argentinos, le ofrezco material para hacerlo: lea los 427 post anteriores de este mismo blog. Más le digo, entre la iglesia española y la iglesia argentina, me quedo sin dudarlo un segundo con la española. Ustedes cuentan a los santos y mártires por miles; nosotros no tenemos ni uno solito. Y le digo aún, la persecución religiosa del siglo pasado les mató a ustedes trece obispos. En nuestra más que módica persecución religiosa sólo tenemos la fotografía de un cardenal gordito, arzobispo de Buenos Aires, escapando por las tapias traseras de su palacio mientras las hordas lo incendiaban.
- Moisés de Torquemada: No olvido las afecciones de Castellani por Hermes Trismegisto; las comparto. Le recuerdo que Clemente de Alejandría, Padre de la Iglesia, consideraba a los escritos herméticos como indispensables.
- Lupus: También yo afirmo que existieron la España, la Francia, la Italia, la Alemania y la Inglaterra católicas. Niego que existió la España abanderada de la Iglesia católica identificada con la España de Franco.
- Miles Dei: Usted escribe mucho y aburrido. Se trata de comentar, no de escribir un nuevo post. Si esa es su intención, ¡Bienvenido!, pero abra su propio blog.
Comento solamente su final: “España se altera cuando la voluntad de sus gobernantes deja de ser católica. En otros pueblos no pasa eso”. Eso es un mito y de los más absurdos y chauvinistas. España hace décadas que dejó de ser católica, y el pueblo no se alteró. Sólo produjo indignados.
Ya sé que no piensa eso, Wanderer (aunque ni yo sé que dije porque no apareció, o aparecerá después, cosas de la web.) Quizás fue un poco confuso ("que nunca existió... o que existió tanto como...") en un medio donde todo es aprovechable para aumentar la confusión, como acabamos de comprobar. En paz.
ResponderEliminarLupus
A ver Wanderer. Citarle teólogos como ha hecho un comentarista es pérdida de tiempo: para usted nadie es teólogo, nadie tiene una espiritualidad católica correcta, y nadie enjuicia bien lo que ha de ser el catolicismo, si quitamos dos o tres coristas con los que vuecencia se contenta.
ResponderEliminarAlguien ha comentado el estupor que le producía el tener que soportar a unos iletrados miembros del Opus venidos de la Universidad de Navarra. Parece Jensen atribuyendo cualidades morales o intelectuales en base a identidades étnicas o nacionales.
La percepción habitual que se tiene en Argentina y otros países como Méjico (así con "j")es muy inadecuada, teniendo en cuenta la cantidad de exiliados antifranquistas que allí se refugiaron. Asimismo, hacer cábalas sobre la capacidad intelectual de los españoles basándose en la emigración aparte de mezquino es una falta total de rigor. Lo mismo podría hacerse a la inversa, y quizás con peores resultados. Lo curioso es como coinciden los tópicos. Y eso de la estupidez y atraso tiene gracia. Lo mismo dice Hugo Chávez y Evo Morales. Lo gracioso es que España no tiene nada que demostrar a nadie.
A Castellani se le conoce ahora un poco en España por parte de algunos divulgadores españoles. Antes de eso, déjeme pensar: evita, los tupamaros, la plaza de mayo, y el cegato Borges. Y Maradona, por supuesto.
Wanderer, no es usted presa de la leyenda negra? Considera con demasiada facilidad que los problemas eclesiásticos actuales vienen de la "deriva tridentina-hispánica-barroca" que no se advierte en naciones idolatradas por usted como Inglaterra. No se observa porque es el país más secularizado del mundo (fuera de los ambientes oxonienses al menos). Le parece que si Argentina fuese una colonia británica estarían libres de esa postura?. Esto suena a leyenda negra -muy británica por cierto- la de los españoles intransigentes, fanáticos, ignorantes y responsables del retraso mundial. Quizás hasta piense que la saña contra los católicos en Inglaterra venga de identificarlos con los españoles, donde los responsables no serían los promotores de la leyenda negra sino los mismos españoles.
Sería más interesante que vuecencia citase textos de Castellani en los que se habla de los españoles en lugar de expresar sus propios prejuicios, filias y fobias. El que lea el título de su post acabará pensando que Castellani era, como vd., un antiespañol. Lo cual es mentira.
Fr. J.
Querido Guánderer:
ResponderEliminar¿Por qué cortó sus vacaciones, que tanto necesitaba ...? ¿No vé lo mal que le ha hecho?
No se responde una grosería con una huarangada, y es lo que el cansancio le ha hecho hacer a Ud. El gallego que inventó la crítica a Castellani me hace acordar a otro quife que dijo que León Bloy era "socialista, campeón del modernismo cultural y precursor del progresismo católico". Desde luego, no sabía quién era León Bloy, así que uno tenía que limitarse a decirle que era un bruto. Y punto.
Ídem id. este caso, como comprenderá.
Arrojar mechas encendidas contra la casa de un incendiario sólo logra propagar la mala acción del canalla, sin sofocar el incendio por cierto.
Y me parece que es lo que Ud. ha hecho.
Le podría haber respondido a Infoloquesea como ... Castellani.
Por ejemplo: "¿Jánssens tiene 36.000 jesuitas? ¡Qué bien! ¿Cuántos son santos? Porque si no tiene ninguno, tiene 36.000 y le sobran 36.001, contándolo a él. San Ignacio tenía 150 y más de 50 mártires y santos...".
En éstas reacciones de algunos españoles (poco que ver, perdóneme, con la Guerra civil, Franco, los católicos verdaderos, que ni Ud. ni yo podemos juzgar) hay cierto verdosismo envidioso que se huele nomás abrir la página... Déjelo como está, después de todo, es difícil digerir que un importante éxito editorial en la España de hoy, sea Leonardo Castellani.
Un gomía que lo quiere bien.
Wanderer, quedo a la espera de su post sobre Hermes Padre de la Iglesia.
ResponderEliminar¿Será que se unió al gremio de los obreros libres ingleses? Tan anglófilo...
Moises de Torquemada
Gomía, para escribir a los Castellani hay que ser Castellani o inteligente. Ciertamente no soy el cura, e inteligente, tengo mis dudas. En todo caso, apenas lo mínimo necesario.
ResponderEliminarTiene usted razón acerca de la conveniencia de respuestas sutiles, elegantes, castellanianas como las que sugiere, pero creo que también son necesarias a veces las respuestas fácticas. A fuer de realistas, debemos mostrar hechos, frente a los cuales no hay discusión posible.
Ambas dos; se complementan.
Eso es un mito y de los más absurdos y chauvinistas. España hace décadas que dejó de ser católica, y el pueblo no se alteró. Sólo produjo indignados.
ResponderEliminar------------------------------------
Deje que le corrija: España hace dos siglos que dejó de ser católica en la voluntad de sus gobernantes y vive en plena alteración desde entonces, salvo un pequeño receso de cuarenta años.
Pero eso de pensar que es desde 1975 cuando dejó de ser católica es un error típico y tópico que lleva a conclusiones erradas.
Para escribir a lo Castellani, me parece, primero más que inteligente no hay que ser sonso y segundo, hay que ser algo niño, o bastante niño, escribir seriamente "...como jugando...", como se hace todo lo que en este mundo valga alguna pena. Y los niños, como se sabe, son veraces y algo crueles, es decir, crudos, pero no maletas.
ResponderEliminarBueno, Usted preguntó...
El Gomía de las 18,18
¡Empezamos entrando con los tapones de punta y removiendo el avispero...! Tirando contra ciertos íconos imaginarios que solemos comprar sin beneficio de inventario entre los del palo... Está bien. Por eso está bueno este blog.
ResponderEliminarPor supuesto que se podrían traer a colación decenas de otros textos "hispanófilos" (y hasta pro-franquistas, ¡hasta en Jauja cuando el régimen estaba ya bastante alejado de lo que prometió en un comienzo!) de Castellani que, aparentemente, contradicen a estos otros que publicó Infocaótica. Es que, en cierta forma, lo que Castellani denuncia es la España de la propaganda franquista *en* la Argentina, frente a la España (culturalmente) católica que alaba en otros oportunidades.
Claro que el dato que dice Miles no es depreciable: España perdió una buena parte de su clero ya desde antes de la Guerra Civil, quizá la mejor parte de ese clero. Canals Vidal siempre citaba el ejemplo del sobrino del P. Orlandis (también castigado por la SJ como Castellani, en los mismos años aproximadamente), el P. Rovira, a quien se le había prohibido enseñar por milenarista (que no era), que murió mártir de los rojos.
Cuando Castellani se refiere al estado calamitoso del catolicismo español ("oficialista"), está teniendo en cuenta, por ej., a Verdaguer o a Arintero o a tantos otros curas hispanos que se atrevieron a pensar fuera de las muy rígidas estructuras barrocas (vale decir que Castellani no era tan crítico del barroco como un Disandro, por ej.) y suarecianas decadentes. También Castellani está pensando en cierto clero aburguesado y acomodaticio del período alfonsino (no olvidemos que Castellani, mientras sus compañeros de la Inmaculada jugaban al fútbol, leía revistas y libros de autores integristas y carlistas).
Curiosamente, por ej., Castellani coincide con la crítica que hizo F. Elías de Tejada al "menendezpelayismo" (y eso que C. tenía en alta estima a Menéndez Pelayo). Y del mismo modo, criticaba al "unamunismo", al "orteguismo", etc. ...especialmente en lo que tenían de boutades para consumo de argentinos tilingos, lo mismo que criticará años más tarde cierto "franquismo" para consumo de nacionalistas brutos locales.
En fin, dice Wanderer que él no iría tan lejos como para pedir "pensar más allá del código binario". Pero creo que es la única manera de comenzar a entender a Castellani, cuando estamos dispuestos a ver los claroscuros.
Qué vuelta prolífica! Tantos comentarios. Le va a dar trabajo, pero está bueno.
ResponderEliminarUd. tomó al teólogo (al que llama escritor religioso) que le parece más débil para denostarlo: Salaverri. Lo que Ud. de él cita es un manual, no un tratado, que como tal cumple con su función. Que sea su obra más conocida no hace que sea su obra más profunda.
Sus ponencias en la Semana de Teología española y sus comentarios incluso al Vaticano II también lo muestran. Sin embargo su descripción del manual, eliminando los adjetivos calificativos, es exacta.
Si cree que ese "botón de muestra" engloba también a Marín Sola, Orlandis o Ramírez, realmente me parece exagerado.
Porque al final de cuentas el único "autor religioso" que conoce es del manual.
Salaverri sí que cita fuentes anteriores -y muy anteriores- a San Roberto Belarmino. Ya le dí las citas pertinentes del De Ecclesia Christi. No las reitero porque no me apetece fundamentalmente.
ResponderEliminarCapitán, Conozco a algunos más: a Orlandis, perseguido y fundador de la Escuela Tomista de Barcelona, que dio interesantes profesores de filosofía tomista; a Marín Solá y su enjundioso estudio sobre la evolución homogénea del dogma católico desde la postura tomista; a Ramírez, escritor, entre otras obras, de la kilométrica "De analogía" y claro representante del neotomismo español. Todos ellos buenos escritores religiosos, expositores brillantes del pensamiento de Santo Tomás, y sólo de Santo Tomás. ¿Estos innegables méritos los convierten en teólogos? Si es así, le sugiero escribir un tratado sobre la analogía del concepto "teólogo".
ResponderEliminar¿Hambre de comments?
ResponderEliminarEl post es una provocación bastante burda.
Tratar a los teólogos españoles citados como meros "escritores religiosos" es de una pedantería comprensible en un borreguín recién salido del cascarón, pero en semejantes huevones como Ustedes, da pena.
No era más fácil admitir que, aunque era válida la defensa de Castellani, aplicando un nacionalismo un poco exagerado se le había ido la mano?
ResponderEliminarFr. J., acá en ningún momento se afirmó o deslizó que Castellani sea antiespañol ni antiargentino, ni antinada, ni siquiera anticlerical, salvo en esa medida saludable y obligada del sabio que se enfrenta a quien es contrario a la verdad, caigan quienes caigan, españoles, argentinos, curas e incluso santos. Esa parada es muy difícil, es para pocos. No debe molestar que surja un hombre superior de la Argentina, lo bien que nos hace y nos hará, a todos. Además, recientísimo y muy poco conocido aún. En mucho somos como ustedes, por lo bueno y por lo malo, pero hay quienes tratan de sacarse las lacras, propias o heredadas, aprendiendo de los que saben. De Castellani, por ejemplo, que también aprendió de los mejores españoles, y nos enseñó a enfrentar eso que le digo: el error y la mentira, y sobre todo el fingimiento de virtud y veracidad. Correspondan, es para bien. Le menciono además, por si gusta: Castañeda, Anzoátegui, Marechal, Lugones, Ibarguren, Irazusta, si de poetas y pensadores se trata, y me planto ahí por ahora, porque va a creer que hablo de puro inflado, cuando lo que pretendo es sacarle de la boca a esos que ud. menciona, pues no representan nada importante, ni local ni universal. Que ud. no los conozca ya no es defecto nuestro, sino una ancestral dureza de reconocimiento por parte vuestra.
ResponderEliminarLupus
Condinome Wenceslao, sutiliza española en estado puro.
ResponderEliminarMientras más hablan, más confirmada queda la tesis de Wanderer.
Lupus,
ResponderEliminarNo me reconozco en lo que vd. me achaca. Nunca leí a Castellani, ni tengo nada contra él. Ha sido el motivo de Wanderer para descargar sus furias contra lo español, en el día de la Hispanidad.
Tampoco conozco ningún teólogo uruguayo ni boliviano, y ni niego que existan ni me molesta que los haya. Pensar que los españoles tienen esa actitud es dos veces centenaria e inexistente.
Fr. J.
A los que son obesos, no les conviene ir a "Cuestión de peso" porque todo el país se burla de ellos.
ResponderEliminarja ja, muy gracioso el post. Los gallegos de infocaotica no lo tomaron a bien. Me refiero a los comentadores, no al blog en sí.
ResponderEliminarQue se la aguanten
Miss Marple: 1 Cor. 14:34
ResponderEliminarWander, por que te pones así? No has leido a Prada y sus elogios sobre Castellani?
ResponderEliminarNo todos los españoles son iguales.
Muy buen post, grazie.
ResponderEliminarTodo un Castellani hasta se queda pequeño ante originalidades profundísimas como la de Ignacio Olague, jonsista de paso firme capaz de enfrentar a toda la historiografía oficial dándole todo un vuelco o cualquiera de los escritos del malogrado Angel María Pascual, poeta de la prosa y camisa vieja capaz de describir la realidad política como nadie en un sencillo cuento así como poner en su Catilina toda la necesidad de justicia social que hacía falta en España. Solo la ceguera del que no entiende lo que es la luz y se queda mirando una bombilla luminosa que le atrae puede ignorar el resto de luces del entorno.
ResponderEliminarFelicidades desde España. Gracias a Dios, también había muchos católicos en el bando republicano.
ResponderEliminarSoy vasco y aquí había muy buenos católicos en los dos bandos. Aparte de eso, no le van a usted a perdonar nunca el hecho de haberse independizado del glorioso imperio.
Usted, Castellani y los de allá no son buenos católicos porque en su momento se separaron de España (que tanto ayudó a Roma), y como dicen Rouco y Cañizares la Unidad de España es un "bien moral"
Dicho esto, ustedes se sitúan lejos de ese "bien moral", lejos de Dios por no querer ser administrados por
los castellanos.
En fin, también a nosotros, catalanes y vascos nos mandan infinitas condenas al infierno por querer seguir rompiendo lo que queda del imperio castellano (lea infocatolica por ejemplo), pero nunca se llegan a preguntar si ellos habrán planteado algo mal, siempre son los hijos traidores los que se van.
Si uno se mueve en España entre los ambientes tradionalistas no tardarán mucho en asomar estos imperialismos, antisemitismos y demás istmos que hacen que, como cuenta Bernanos, maten o torturen igual que los del otro bando, eso sí con Dios en la boca para limpiar así sus concicencias.
Enhorabuena por el blog.
Mariano
No sé si los lectores del blog o el propio Wanderer caen en la cuenta de las burradas que se dicen. Miles Dei, por ejemplo, dice que los españoles del franquismo eran tan pero tan santos, que los obispos no tenían nada que hacer y se entretenían en detalles, advirtiendo a alguna picarona que se pusiera las medias, y a algún vivillo que no subiera señoritas en su auto.
ResponderEliminarMuchachos de la otra orilla, no sigan hablando porque confirman el mito.
El anónimo de 23:52 dice "que se la aguanten". Parece que habla de fútbol. ¿Pero que se la aguanten por qué? ¿Porque wanderer ha pontificado acerca del ínfimo nivel intelectual de los españoles?
ResponderEliminarAquí hay un pequeño error; si Wanderer hace un post en el que insulta a los españoles, lo obvio es que los que son españoles se molesten con ello. Ese revanchismo es grave. Cosa de psicología colectiva.
Fr. J.
No confunda las palabras. No significa que sean santos, sino que el pueblo se siente bien gobernado y no muestra otras preocupaciones. Detalle histórico que se le escapa es que cuando a finales de los 50 una nueva familia toma el poder en el gobierno franquista y poco a poco la situación decae, esa preocupación desaparece y da paso a preocupaciones políticas en el clero.
ResponderEliminarNo obstante veo que no publica el Wanderer mi réplica dando la vuelta a la cosa y tocando el corazón de su teoría barroca.
TRISTE ESPAÑA DE CAÍN
ResponderEliminar("Un trozo de planeta por el que cruza errante la sombra de Caín". Antonio Machado)
¡Ay, triste España de Caín, la roja
de sangre hermana y por la bilis gualda,
muerdes porque no comes, y en la espalda
llevas carga de siglos de congoja!
Medra machorra envidia en mente floja
--te enseñó a no pensar Padre Ripalda--
rezagada y vacía está tu falda
e insulto el bien ajeno se te antoja
Democracia frailuna con regüeldo
de refectorio y ojo al chafarote,
¡viva la Virgen!, no hace falta bieldo.
Gobierno de alpargata y de capote,
timba, charada, a fin de mes el sueldo,
y apedrear al loco Don Quijote.
Miguel de Unamuno
Wanderer, entre algunas cosas ciertas y otras que no tanto, o al menos planteadas de un modo un tanto duro y generalizador, no podía menos que formar 2 bandos.
ResponderEliminarSi la idea era levantar el avispero con motivo del regreso, ta' bien, vaya y pase; si era enojo y devolución del agravio por el antes vertido contra Castellani, también, pero...
Pero... si bien fundamenta usted y pone como ejemplos las burradas episcopales de up supra, sigue habiendo, me parece, un aire generalizador como contraque por la anterior ofensa.
Esto se lo digo a pesar de compartir con usted la cuestión fontal: las causas de aquella crisis, que son las mismas a las del modernismo, ambas hijas del ultramontanismo voluntarista, casuista, et ... Todo está explicado, como usted bien dijo, en la traducción del P. Baliña al texto de Newman.
No sé, mi gratitud con España es tal que, a pesar del párrafo anterior, no podría borrar los 3 primeros.
Suyo,
Ps. Fíjese en que termina esto que le acaba de dar la razón un separatista vasco o catalán...
Wanderer: Me parece que Uds. al decir "me gustaría recordar que el pueblo español no se caracterizó precisamente por la sutiliza de pensamiento" se mete en el mismo pensamiento binario que alguien pedía no tener con Castellani. Y si algunos españoles lo hicieron con uno solo. Uds. lo hizo con todo un pueblo lo cual es infinitamente más absurdo.
ResponderEliminarA mi me parece más sutil el peor contrarreformista español que Stuart Mill para decir alguien.
SP5, "le acabo de dar la razón a un separatista vasco o catalán"..., ¿y si la tienen?
ResponderEliminarEspaña
ResponderEliminarMás allá de los símbolos,
más allá de la pompa y la ceniza de los aniversarios,
más allá de la aberración del gramático
que ve en la historia del hidalgo
que soñaba ser don Quijote y al fin lo fue,
no una amistad y una alegría
sino un herbario de arcaísmos y un refranero,
estás, España silenciosa, en nosotros.
España del bisonte, que moriría
por el hierro o el rifle,
en las praderas del ocaso, en Montana,
España donde Ulises descendió a la Casa de Hades,
España del íbero, del celta, del cartaginés, y de Roma,
España de los duros visigodos,
de estirpe escandinava,
que deletrearon y olvidaron la escritura de Ulfilas,
pastor de pueblos,
España del Islam, de la cábala
y de la Noche Oscura del Alma,
España de los inquisidores,
que padecieron el destino de ser verdugos
y hubieran podido ser mártires,
España de la larga aventura
que descifró los mares y redujo crueles imperios
y que prosigue aquí, en Buenos Aires,
en este atardecer del mes de julio de 1964,
España de la otra guitarra, la desgarrada,
no la humilde, la nuestra,
España de los patios,
España de la piedra piadosa de catedrales y santuarios,
España de la hombría de bien y de la caudalosa amistad,
España del inútil coraje,
podemos profesar otros amores,
podemos olvidarte
como olvidamos nuestro propio pasado,
porque inseparablemente estás en nosotros,
en los íntimos hábitos de la sangre,
en los Acevedo y los Suárez de mi linaje,
España,
madre de ríos y de espadas y de multiplicadas generaciones,
incesante y fatal.
Quijote , Teresa de Avila , Juan de la Cruz , Royo Marin , Donoso Cortes y muchos mas .....eran Argentinos y no sabían ........que bol....que eran !!
ResponderEliminarSancha Panzo
Es que no la tienen. Con las excusas al estilo de las vertidas entendieron los foralismos locales para el lado de los tomates, olvidando que la diversidad es en la unidad, pero no entremos en ello ahora, que nada tiene que ver con esto.
ResponderEliminarEn relación a este tema me acabo de acordar de Gabriel Marcel: "ese cristianismo de derecha me ha parecido siempre muy sospechoso, jamás dejé de pensar que corre el riesgo de comprometer de la manera más funesta el auténtico mensaje de Cristo".
Nótese que escribe lo anterior previo a criticar a la democracia y al igualitarismo en un libro (Los hombres contra lo humano) dedicado a combatir "el espíritu de abstracción" de las masas. Lo que quiero decir es que no era lo que concemos como un "progre".
Y sigue: "Es necesario reconocer que en ciertos países de Europa y América, el clericalismo tiende a ejercer un carácter cada vez más ofensivo para una conciencia auténticamente cristiana".
"Las religiones pueden degenerar en idolatrías, allí donde la voluntad de poder viene a corromperlas".
Y a cuento de todo esto, si los españoles son los campeones de la Iglesia Católica, ¿por qué cuajó tan poco -casi nada- el tradicionalismo en España? Con el CVII se pasaron todos a la peor progresía, y -por lo que puede leerse en internet- después del Motu Proprio liberando la Misa gregoriana, casi nadie la pide, a pocos les importa, al menos comparativamente con muchos otros países europeos, y ni que hablar con Estados Unidos. En Italia pasa algo parecido, la corrupción es casi total. Y en Argentina también, pero nosotros nunca alardeamos de ser la esencia de la Cristiandad.
ResponderEliminar¿Por qué nuestros anglófonos y anglofílicos amigos del Wanderer se dedican a analizar y combatir esto?
ResponderEliminarPor otra parte, si creen que con el lo del P. Bouyer y lo del P. Baliña se cierra el análisis del ultramontanismo, vamos mal. Son buenos aportes, puntos de partida, pero no más que eso.
VFC
Pues no piden la misa tradicional, porque ese afán se ha convertido en coto exclusivo de ultraderechistas y claro, nadie quiere tener que ver con el tardo-franquismo más rancio. Es lo dicho al haber unido en una ecuación fatal España e Iglesia, se produjeron desvios importantes, como tradición y falngismo... Y claro todo el mundo quiere huir de los resabios totalitarios que tan mala fama tienen. Si alguien pide esa misa, se le tachará de franquista, y seamos honestos lo más probable es que acierten.
ResponderEliminarPues pasa que la jerarquía en generl no quiere, y en España como bien dices, al haber unido en un lazo fatal lo preconciliar con el frnquismo, se acusara a quien pida est misa de franquista o falangista, y seamos honestos lo más probable es que acierten.de quién es la culpa de los progres? no, de que la Iglesia apoyara un regimen totalitario y su represiñon por 40 años.Slvando todo lo bueno que se hizo.
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ResponderEliminarNo criticamos al Instituto Lord Acton porque no es criticable. Es lo más sano que se ha hecho en este país desde la conquista ultramontana hace ya cinco siglos.
ResponderEliminarAclaro que el Anónimo de las 16:15 hs. no es argentino. Queda claro por su forma de escribir y las expresiones que usa.
ResponderEliminarPor las dudas, no sea que Zapatero quiera plantear una hipótesis de conflicto como Tabaré Vázquez.
Quiero creer que algunos comentarios solamente son provocaciones.
ResponderEliminarSi no fuese así... mamita querida!
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ResponderEliminarSea de donde sea, no comparto lo que dice el anónimo de las 16:15 y 18:10, ni siquiera lo que puede ser cierto, dada la mezcolanza de datos y el ánimo de denostación de lo español. Y encima trayendo por barlovento a "ese" Ratzinger. No era el espíritu ni del post ni de muchos de los comentaristas, entre los que me cuento. Y de nada me desdigo.
ResponderEliminarLupus
Si vamos a ser justos, recordemos que el barroco es de cuna italiana y que si lo propagó España fue por que aquella era la potencia con posibilidades para hacerlo. Coincide la época de la Contrarreforma, la fundación de la Compañía, el descubrimiento del Nuevo Mundo y la gran injerencia en Europa, todo en manos de España; pero la "idea" es de los muchachos del spaguetti.
ResponderEliminarSiendo admirador de Castellani y muy poco devoto del franquismo, confieso que quisiera vivir con los obispos que dicen las cosas que se han puesto en este post como prueba de que “los españoles no pueden acusar a Castellani de ignorante y modernista alardeando de su inveterada catolicidad”.
ResponderEliminarO sea, me parece pastoralmente bueno y oportuno celebrar “el día del libro con una gran quema” (hoy abunda más el material que clama a Dios que lo quemen que del otro), poner cautela en “los bailes” (hoy mejor ubicable en los boliches que son causa de condenaciones por impureza), que “el traje de baños debe tener falda, tirantes anchos y debe cubrir la espalda” (muy oportuno, no somos de hierro, sino de carne caída), o que “las jóvenes no se bañarán en compañía de muchachos ni estarán con ellos en la playa” o lo de “no permitáis escotes”, “no asistáis a las piscinas mixtas”, prohibir “el uso de prendas indecorosas”.
Et reliqua
Recuerdo haber leído en alguna ocasión este consejo atribuido a Franco:
ResponderEliminar"No ir contra la Iglesia ni contra la moda femenina"
Bien por la aclaración de Enrico.
ResponderEliminarQuien no hace porque no puede o quiere no se equivoca y quien hace, y más si hace mucho, como fue el caso de España, se equivoca, tal vez mucho.
No es que los ingleses tuvieron más claro nada. Lo que sucedió es que no emprendieron grandes (en realidad ninguna) empresas católicas. Emprendieron algunas (religiosas, colonizadoras y mercantiles; estas últimas las que más les han importado siempre), pero de católicas tenían lo mismo que yo de africano.
Lo más grande que hizo Inglaterra por el catolicismo de los últimos 5 siglos fue el genial Movimiento de Oxford. ¿Cómo no esperar que se hayan contaminado menos por las contingencias de toda gran empresa? Mientras España, mal o bien, evangelizó medio orbe y es a quien le debemos nuestra fe.
No digo que esto aquí se haya negado. Lo que sí digo es que no atender a esto es escaparle al contexto, y sin éste no hay reflexión válida posible.
Digamos la "verdad completa", como dicen los militaristas enojados porque no le dan la cana a los del lado montonero, que si no es mulería.
Dicho esto, me parece de valor lo que aquí se emprende.
Pero solo dicho lo naterior, así se entiende mejor: primero las causas ya comentadas, luego su hijo el modernismo, como consecuencia al pos Concilio una reacción muchas veces por la opuesta que se pareció al ultramontanismo pre conciliar, mientras otros terminaron neocones. Y ahora toca (la restauración no la vamos a ver en vida) que las cosas vuelvan a su quicio. Esto no es soplar y hacer botellas, macho.
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ResponderEliminarSP5,
ResponderEliminarNo entiendo dónde entran los ingleses en mi post. Ni siquiera los menciono.
En cuanto al resto, indíqueme dónde, cuándo y cómo niego yo la gesta conquistadora de España, su darse a América durante siglos y, más aún, la heroicidad de miles de españoles que entregaron su vida por Cristo en la Guerra Civil.
Ahora, si usted pretende que cada vez que se escribe sobra el periodo franquista hay que comenzar la historia en 1492, no sería el caso de escribir un post, sino un libro.
No lo digo por el post, sino por comentarios al estilo los del señor Smart, quienes o hablan en joda o conocen la historia de la Iglesia como yo de aviones, cuando es sabido que lo mío son los coches.
ResponderEliminarEstimado Wanderer: Es realmente una alegría reencontrarlo en este nuevo ambiente... se hacia sentir su ausencia. Este post es mas que bueno. Cuesta despojarse del barroquismo... (a los que pasamos por el), pero hace muy bien al alma, que demasiado tiene de que sufrir como para andar sumandole cosas. El "Cura" trae mucha luz (para variar) y diría que es un "pecado" no escucharlo! Amo lo hispano... pero como el mismo Lupus dice, "la verdadera hispanidad". Creo que el legado que recibimos de España no tiene por que disecarse y limitarse con lo barroco. Nuevamente gracias por sus publicaciones!
ResponderEliminarPangur Ban