El cardenal George Pell fue declarado inocente por la Corte Suprema de Australia. Aquí pueden bajar la sentencia completa.
El cardenal incomodó al Vaticano cuando se tomó en serio su función de limpieza de toda la corrupción contenida en los Sacros Palacios.
No podemos decir que sus acusaciones y juicios haya sido alentadas desde Roma, pero lo cierto es que ninguno de los prelados de la Curia, comenzando por el Papa Francisco, hizo nada para defenderlo: lo dejaron solo.
Esta noticia apenas si tendrá un lugar insignificante en los medios de prensa. Los católicos, en cambio, deberíamos festejarla y agradecer a Dios puesto que está nuevamente entre nosotros uno de los mejores y más lúcidos cardenales del Sacro Colegio.
Le restituiran su antiguo cargo? O bien la Iglesia de manos del Sto. Padre reivindicará su figura? O bien lo mandarán a algún asilo sacerdotal?
ResponderEliminarLa sentencia absolutoria nos reconcilia con la justicia civil. La canónica está en cuarentena de evaluación, por ahí el Papa ha dado algunas señales de querer enmendar el errado rumbo que le dio Benedicto, pero no se ven todavía efectos reales de seriedad jurídica. H. Lo Giudice
ResponderEliminarAnonimo de las 19:12, ¿podría ampliar su comentario, por favor?
ResponderEliminarPell me parece un buen tipo. Tiene más de una medalla en su historial. Con Amoris Laetitia, por ejemplo, estuvo muy bien. Pero lo de ser uno de los "más lúcidos cardenales del Sacro Colegio" me parece medio exagerado. Hay un debate suyo con Richard Dawkins que da pena.
ResponderEliminarMuchos medios que tratan sobre temas de la iglesia, publicaban cada día y machaconamente en negativo, todo lo concerniente al historial supuestamente delictivo de esta persona. Ahora, después de esta sentencia: silencio casi sepulcral sobre el caso. Estas son las terribles "maneras" de actuar de los servicios informativos de nuestro mundo... me parece todo esto muy terrible.
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