Cuando Mons. Carlo Viganò, cuando otros importantes personajes y cuando yo mismo afirmamos que el Papa Francisco debe renunciar, estamos seguros -al menos yo-, que nunca renunciará. Bergoglio es un jesuita y los jesuitas están programados para alcanzar el poder sin importar los medios porque siempre encuentran un vericueto moral que les calma la conciencia. Bergoglio, como quintaesencia del jesuitismo, jamás soltará el poder. No entra en el horizonte de sus posibilidades. Por eso, nuestro reclamo a que renuncie no deja de ser retórico y, en todo caso, es un modo más de señalar la incapacidad de este personaje para dirigir los destinos de la Iglesia.
Sin embargo, conviene preguntarse si una eventual renuncia del Papa Francisco al ministerio petrino sería una buena medida. Y creo que no, que de ninguna manera debe renunciar. Y van aquí algunas razones:
- El “deber” de renunciar debido a que se cometió un grave error en el gobierno o en razón de problemas morales es propio de las democracias liberales contemporáneas, en las que el poder pertenece al pueblo y, cuando el gobernante no cumple con las condiciones exigidas por el soberano, debe devolverle a éste el poder que le dio. En el pensamiento católico, el poder es de Dios y el poder, si fue legítimamente recibido, no se entrega. Al gobernante que lo detenta le corresponderá luego dar cuenta ante Dios de lo que hizo con lo que le fue entregado, pero el poder no se entrega. Por tanto, si exigimos seriamente y no como recurso retórico que el Papa renuncie porque encubrió una red de homosexuales activos dentro de la Iglesia, estamos apropiándonos de un argumento liberal y moderno, lo cual no solamente es absurdo sino que es peligrosísimo: con toda seguridad, antes o después, será usado en nuestra contra. Es, aunque no nos demos cuenta, pactar con el enemigo, y no el de Bergoglio, sino el de la Iglesia.
- Es verdad que la teoría política considera que hay casos en los que el poder puede haberse recibido legítimamente pero su ejercicio se torna ilegítimo y, por tanto, los súbditos quedan liberados de obediencia a tal soberano porque, de alguna manera, ese poder ha vuelto a Dios. Y en la Edad Media se dio el caso de varios emperadores que “perdieron” de ese modo su poder. Pero quien lo decretaba era el Papa. El caso más conocido es el de Gregorio VII que “despojó” del poder al emperador Enrique IV quien tuvo que sufrir la “humillación de Canossa” para reconciliarse. El problema nuestro es el siguiente: ¿quién tiene la capacidad de “quitarle” al Papa Francisco el poder que recibió legítimamente? ¿Mons. Carlos Viganò? ¿El cardenal Burke? ¿Los obispos americanos? ¿Los fieles? No. Ninguno de ellos. Y desconozco si el derecho canónico prevé alguna suerte de impeachment del Papa por parte del Colegio Cardenalicio o del Concilio Ecuménico. Y aunque lo previera, resulta obvio que el actual Colegio jamás lo utilizaría.
- ¿Podría un Papa perder su cargo por inhabilidad moral? Si como parece del todo verosímil, Francisco efectivamente encubrió la mafia lavanda y elevó a puestos importantísimos de la Iglesia a varios de sus miembros, ¿lo hace este gravísimo pecado inhábil para ocupar la sede petrina? Un neocon consecuente diría inmediatamente que así es: para ellos, como al Papa lo elige el Espíritu Santo, necesariamente debe ser un hombre santo -y canonizable-, y si resulta evidente que no es santo, por lo tanto no es Papa porque el Espíritu Santo nunca lo habría elegido. Todos sabemos que esto es una idiotez, y la historia nos lo muestra en muchas ocasiones. Parece apropiado recordar el caso del cardenal Giovanni Ciocchi del Monte que preparó el concilio de Trento, presidió hábilmente su primera sesión y el 7 de febrero de 1550 fue elegido papa con el nombre de Julio III. Una de sus primeras iniciativas como pontífice fue su ciego empeño por conceder el cardenalato a un sospechoso adolescente de baja extracción social y dudosa moral, que había “adoptado” y llevado consigo a Trento cuando era legado y que se convertiría en el gran escándalo de su pontificado. El evidente afecto que Del Monte sentía por el joven provocó, como era de esperar, escabrosos rumores sobre la relación existente entre ambos. Tras la muerte del papa, las correrías y crímenes de ese cardenal continuaron siendo motivo de graves escándalos. Sin embargo, a nadie se le ocurrió pedir la renuncia de Julio III a pesar de su escandalosa vida (Puede verse sobre el tema: von Pastor, Papas vol. XIII, pp. 84-87 y 163-165; entrada «Del Monte, Innocenzo», en DBI; y Francis A. Burkle-Young and Michael Leopoldo Doerrer, The Life of Cardinal Innocenzo Del Monte: A Scandal in Scarlet, E. Mellen, Lewiston, NY 1997. Massarelli ofrece una animada descripción del afecto de Del Monte por el joven en Concilium tridentinum:… vol. 2, pp. 174-175). Y si el pedido de impeachment fuera motivado por la escandalosa Curia que rodea al Santo Padre y que él mismo cobija, recordemos también que la negativa de los papas de Trento a reformar la Curia fue el motivo principal que estuvo a un tris de hacer fracasar al Concilio, pero ni a los Padre de ese concilio ni al emperador Carlos V se les ocurrió pedir la renuncia del Papa.
- ¿Es todo esto signo de que el retorno en gloria y majestad de Nuestro Señor se está acercando? Yo, y seguramente la mayoría de nosotros, tenemos la secreta esperanza de que así sea. Pero no hay que estar tan seguros. En 1522 el piadoso Papa Adriano VI escribía: “Dirás también que confesamos sinceramente que Dios permite esta persecución de su Iglesia por los pecados de los hombres, especialmente de los sacerdotes y prelados... La sagrada Escritura dice en alta voz que los pecados del pueblo tienen su origen en los pecados del clero... Sabemos muy bien que también en esta Santa Sede han, acaecido desde muchos años atrás muchas cosas abominables: abusos en las cosas espirituales, transgresiones de los mandamientos, y hasta que todo esto se ha empeorado. Así, no es de maravillar que la enfermedad se haya propagado de la cabeza a los miembros, de los papas a los prelados. Todos nosotros, prelados y eclesiásticos, nos hemos desviado del camino del derecho, y tiempo ha ya que no hay uno solo que obra el bien (Sal 13 [14], 3). Por eso todos debemos dar gloria a Dios y humillarnos ante su acatamiento; cada uno de nosotros debe considerar por qué ha caído y ha de preferir juzgarse a sí mismo que no ser juzgado por Dios el día de la ira. Por eso prometerás en nuestro nombre que pondremos todo empeño porque se corrija ante todo esta corte romana, de la que tal vez han tornado principio todas estas calamidades; luego, como de aquí salió la enfermedad, por aquí comenzará también la curación y renovación. Sentímonos tanto más obligados a realizar estos propósitos, cuanto el mundo entero desea esa reforma... Sin embargo, nadie se maraville de que no arranquemos de golpe todos los abusos, pues la enfermedad está profundamente arraigada y tiene múltiples capas. Hay que proceder, por tanto, paso a paso y curar primero con buenas medicinas los males más graves y peligrosos, a fin de no embrollar más las cosas por una reforma precipitada. Porque con razón dice Aristóteles que todo súbito cambio de una comunidad es peligroso”. Por lo que dejan ver estas palabras, la situación de buena parte del clero católico y de la Curia romana en el siglo XVI era similar a la actual. Y luego de Adriano, las cosas empeoraron: menos de treinta años después de su muerte, subía al trono Julio III secundado por su mancebo. Y el mundo no se acabó.
- Un comentario reciente en el blog hacía una observación interesante: frente a este estado de situación, la única solución es el cisma. Y la verdad es que la idea parece atrayente. No tendríamos ni siquiera necesidad de elegir a un antipapa porque tenemos a uno emérito: un grupo seguramente pequeño de fieles y obispos prestando fidelidad a Benedicto XVI y la mayoría siguiendo a Francisco, el Papa réprobo. Pero la historia vuelve a ser magistra vitae: en 1033 fue elegido sumo pontífice Benedicto IX, poseedor de una ambición de poder sólo comparable a la de Bergoglio y con casi ninguna virtud… como Bergoglio. Tan catastrófico fue su pontificado, que periódicamente se sucedían protestas públicas del pueblo por su conducta. Hubo escarceos y bravatas y finalmente Benedicto IX abdicó y ocupó el trono Gregorio VI. Pero poco después, Benedicto se arrepintió de su abdicación y decidió ocupar nuevamente el solio, a lo que el sínodo de Sutri (1046) le dijo nones: si usted abdicó, dejó de ser Papa; el que se fue a Sevilla perdió su silla.
¿Qué hacer entonces? Ahora, la pelota está de lado de Dios. Sabrá Él qué hacer con su Iglesia. En épocas tumultuosas como el siglo XI, hizo surgir a un Gregorio VII, y en otras similares como las del siglo XVI, a San Pío V. No que queda más que esperar y rezar.
Bueno, hay dos matices diferentes con respecto a épocas anteriores:
ResponderEliminar1.- La apostasía generalizada.
2.- La restauración del Estado de Israel, después de casi 2000 años. Hecho insólito y de gran
significado como signo de los tiempos.
Aparte de la dimisión del Papa o del cisma, hay otra salida a esta situación: que el dueño de la viña lo aparte del cargo, bien por repentina e incapacitante enfermedad, bien porque decida llevárselo de una vez.
Un cordial saludo desde el otro lado del océano.
"Ahora, la pelota está de lado de Dios". Pensaba que siempre la pelota estaba de lado de Dios...
ResponderEliminarNo sea tan literal amigo..El wanderer se valió de una expreSión popular como diciendo mucho no podemos hacer cl escapa a nuestras posibilidades...ponga un poquito de esfuerzo en la interpretación. .No es dificil
Eliminar...¿Es todo esto signo de que el retorno en gloria y majestad de Nuestro Señor se está acercando? Yo, y seguramente la mayoría de nosotros, tenemos la secreta esperanza de que así sea. Pero no hay que estar tan seguros..... por supuesto que estamos más cerca!!!! la historia es lineal. Además hay otros signos, no se olvide.
ResponderEliminarNo siempre he estado de acuerdo con sus artículos, pero ahora si que lo estoy.
ResponderEliminarDios sabe por qué permite las cosas y saca bienes hasta de los males.
Salir a perseguir a Francisco con horquillas y antorchas, sería una locura, declararse en cisma, también.
Ya que la Verdad se defiende sola, no veo para qué azuzarla.
¡Aplausos don Wanderer!
ResponderEliminarAdemás, se me ocurren otras dificultades. Digamos que Francisco renuncia, ¿a quién elegiría un colegio cardenalicio dominado por progres y homo-mafiosos? En el mejor de los casos, a un cardenal curialesco de bajo perfil, canonista o diplomático de carrera (un Parolin, por ej.), que haga un poco de maquillaje y limpieza externa, y equilibrio entre conservas y progres para intentar desactivar la "guerra civil" que ya estamos viendo, es decir, alguien que sólo patee la pelota para adelante.
Algunas particularidades históricas del momento:
ResponderEliminarComo el último gobierno peronista de nuestro país, la mafia homosexual de la jerarquía se pensó que había conseguido el poder para siempre y se dejaron pruebas por todos lados de su existencia. Para peor hirieron a muchos que saben, Viganó por ejemplo, y van a ir apareciendo. Aquí Fr. Z encontró a otro que debe tener mucha documentación:
http://wdtprs.com/blog/2018/08/francis-dismissed-card-muller-who-disagreed-about-abuse-cases/
El poder de Bergoglio está apoyado en esta mafia y en la prensa. Pero esta última al ver que es imposible ocultar la protección se va a dar vuelta.
Si Bergoglio no quiere renunciar, que estoy seguro que así es, va a tener que hacer limpieza. Para un peronista no es problema sostener exactamente lo contrario de lo que dijo recién.
Wanderer: no comparto su razonamiento inicial pero si su conclusión.
ResponderEliminarNo me parece efectivo que la renuncia al poder sea algo propio de la democracia liberal. En la Cristiandad el poder secular tuvo un sentido sacral (en menor grado que la autoridad eclesiatica) y la abdicación de un rey era algo más que una teoría, para que hablar de su deposición o la sustracción de obediencia por los estamentos.
Comparto si la conclusión, no es conveniente que Francisco renuncie. Los que lo elevaron siguen ahí, y se ha creado un Colegio Cardenalicio a medida, por lo que el sucesor puede ser peor. Los que lo han criticado no han sido capaces de lanzarse totalmente a la piscina (partiendo por Burke) para liderar un movimiento de resistencia como lo hizo Monseñor Lefebvre, y si lo hicieran tendrían tal vez mucha más fuera que éste. Además, seguir centrando el fuego en Bergoglio no hará sino envalentonar a los pogres devenidos en fanáticos suicidas, y hay que dejarlos sin armas.
Parolin is made such stuff as PF is made of, from bad to worse.....
ResponderEliminarEn esto estoy de acuerdo con el Lefe Estepario.
ResponderEliminarLo del cisma es una solemne tontería: ¿por qué tendríamos nosotros que declararnos en cisma formal, si son ellos, los modernistas y progres de toda calaña, con Bergoglio a la cabeza, quienes están en cisma (al menos material) a causa de sus herejías, blasfemias y apostasías?
Es cierto que pensar en una abdicación de Bergoglio no soluciona nada. Tener dos "Papas eméritos" (sea lo que sea que esos signifique)...
Hay que pedir a Nuestro Señor que lo convierta o que lo quite de en medio, por el bien de su amada Iglesia. Y no sólo a Bergoglio, sino a todos los demás.
Este tipo acorralado se torna mucho mas peligroso...igual que Trump en la geopolitica...y que Macrigato en la política
ResponderEliminarA propósito de lo que dice Andreas, quizá es tiempo de abandonar Babilonia.
ResponderEliminarFugite de medio Babylonis,
et salvet unusquisque animam suam;
nolite perire in poena eius,
quoniam tempus ultionis est Domino:
vicissitudinem ipse retribuet ei.
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EliminarQue estamos en Tiempos Finales creo que es dificil no aceptarlo. Y no por esto solo, por todos los signos que se ven y en todos los ambitos: religiosos, geopoliticos, naturales, etc.
ResponderEliminarY no hay ninguna temeridad en aceptarlo, ya que se nos anunciaron los signos para estar atentos...."Y de la higuera aprended la parábola: cuando su rama ya se pone tierna y echa las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, sabed que El está cerca, a las puertas.…
Respecto a los otros puntos, adhiero a un comentarista que sugirió leer "El Papa de Laodicea" de Mihura Seeber...creo que allí hay dos tesis interesantes: la del relevo de las llaves de Pedro por parte de Cristo y la de la posibilidad de que Francisco no haya asumido formalmente el Papado (ojo, no discute la validez de la elección)....yyyyy...BXVI sigue ahi, no?
La descripción que hace de Bergoglio, es certera, no hacen falta más análisis y, respecto al Cisma de la Iglesia provocado por el argentino, no solo es la solución, sino que es la única vía ante el desastre que vivimos. Pensar que de alguna forma podría renunciar, es no conocer la compleja personalidad de este hombre; jamás renunciará.
ResponderEliminarEntendí como retórica su petición de renuncia papal.
ResponderEliminarEstos días estoy siguiendo la estrategia del maligno a través de sus voceros, hoy en día los grandes medios de comunicación, que son, casi en exclusiva, hijos de la progredumbre. A la de cal y a la de arena, antes de Viganó y después de su misiva, aparecen artículos de opinión y primeras planas que en apariencia son contradictorios, sin embargo tienen un denominador común, esto es, la búsqueda incesante de la guerra civil dentro de la Iglesia. Su secularización. Para ello, nada mejor que una renuncia papal y el posterior gallinero que se montaría antes del cánclave para la elección del nuevo Papa. Y el nuevo, si sale de la curia rosa que domina la cúpula de la Iglesia, llevaría la secularización un paso más allá: el ministerio femenino, el fin del celibato, la reforma del Catecismo para convalidar oficialmente al homosexismo como forma válida de vivir la 'afectividad sexual' ante los ojos de Dios, el aborto puesto como un problema político o humano y no como una violación de la ley de Dios. En suma, y dada la descomposición actual de la curia y aledaños inferiores, la conversión efectiva de la ICAR en una ONG.
Sólo nos queda, y estoy de acuerdo con usted, la oración. Y que la Santísima Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra, se apiade de nosotros.
Parece que el pequeño rebaño es cada vez más reducido. Y que los lobos son muchos más que las ovejas. Y no o hablemos del supuesto Pastor.
ResponderEliminarBien se dijo que del laberinto se sale por arriba. Acá parece que sólo lo resuelve es que se vaya para abajo.
Pero el laberinto seguirá intacto.
También creo que el que se bajó del bote es Francisco (y los suyos). Es caridad cristiana hacérselo saber, y si tiene mala memoria, recordárselo cada vez que lo olvide.
ResponderEliminarTal vez él no tenga intenciones de convertirse, pero estoy segura de que algunos de los que le apoyan tarde o temprano lo harán.
Veamos:
ResponderEliminarBenedicto renunció por incapacidad, no mental, sino física. Así lo manifestó y así lo entendimos.
En el caso de francisco es al revés. Su incapacidad no es física, sino mental.
Recuerdo cuando Juan Pablo II se acercaba a su final. Todos veíamos razonable que se apartara a un lado y dejara a otro el timón. No lo hizo. No le condenamos por ello. Nos sorprendía, al menos a mi, que no diera ese paso, pero eso queda en su conciencia.
En el caso de Benedicto, a mi al menos me sorprendió, porque le veia todavia con fuerzas. Eso también queda en su conciencia.
Pero en el caso que nos ocupa va a ser difícil que de ese paso, precisamente por la naturaleza de su incapacidad, repito, mental y no fisica, pues la incapacidad mental que tiene le incapacita también para darse cuenta de ella y admitirla.
Esto no obstante:
¡Dimisionario ya!
Así es. Oremos.
ResponderEliminarEn estos tiempos aciagos más que nunca debemos pedir asistencia a Santa Yiya Aponte de Murano, patrona de las masas finas.
ResponderEliminarNo se irá, pero alguien cree que este hombre va a presentar renuncia. Es un jesuita autojustificativo, ya lo ha demostrado en temas de moral como no lo va a demostrar en todos los actos de su vida. O sea que si uno es adúltero y convive con otra que no es su mujer y viven como hermanos pero no pueden y caen una y otra vez, aunque estén acompañados como dice en la Amoris Laeticia, y se confiesan y son absueltos porque hay que ser muy misericordioso, además de una ridiculez y ahondar en el pecado por mucho acompañante que exista y demás es un fraude de Ley. Pues esta mentalidad tiene la del fraude de ley y como tal tramposo.
ResponderEliminarIrse no se irá ahora bien, el daño infringido a la Iglesia es enorme porque saldrán más cosas de quien las sabe. Lo que pondrá de manifiesto que quien ha puesto al Papa en donde está y le hizo salir de su Buenos Aires querido,es la mafia rosa que no quiere que se la juzgfue por sus indecentes delitos y que tiene mucho poder, y detrás de esta hay mucho claro y jerarquía llamada progresista. Estos hicieron renunciar a Benedicto XVI y fueron hacedores del actual Papa, poco formado teológicamente ni en nada ni disciplina alguna para poder hacer y deshacer a su antojo más fácilmente, pero el chiringuito se les cayó. Menuda caterva de hipócritas y sinvergüenzas queriendo justificarse y son todos hijos espirituales del Mac Karrick, y que casualidad han llegado al cardenalato.
"¿Podría un Papa perder su cargo por inhabilidad moral?"
ResponderEliminarSi Alejandro VI no perdió su cargo por ese motivo, no creo que otro lo pueda perder.
Ok, rezar y esperar. Ahora digo, hacia aquellos que seguirán perdiendo la Fe por culpa de esta mafia sodomita que maneja la Iglesia, ¿no tenemos ninguna obligación?.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo en todo con Wanderer, Francisco no debe renunciar pero si tiene un poco de inteligencia política debería cambiar de rumbo totalmente: Nunca es buena política segarte la hierba bajo tus propios pies y él con sus acciones, silencios y palabras lo ha hecho.Es una antitesis de Inocencio III.
ResponderEliminarPor otra parte, este pontificado ha tenido una virtud muy necesaria y providencial: Se han quitado la careta todos y se ha revelado toda la mierda debajo de la alfombra desde hace dos siglos por lo menos. Ecce Homo!, ecce Ecclesia! Podrá ir peor pero, por lo menos, veremos la mugre y la porquería de frente y no bajo un revoco primaveral, neoevagelizador juapablista o neotradicional ratzingeriano de tantos chupamedias y curitas beatones. Hemos tenido suerte, con el Anticristo no se verá tan fácilmente hasta que se siente en el trono de Dios en la Iglesia.
Por último, veo en el Testimonio Viganó otra faceta. Como buen italiano (la sombra de Maquiavelo es alargada...) y diplomático, creo que esta bombita termonuclear no sólo va contra el corazón del pontificado de Paco I, que lo ha hundido para siempre a menos que se convierta de verdad, sino también a futuro como una bomba de relojería contra el grupo de electores y candidatos de la mafia de San Galo. La lista de manchados es muy alargada y por contaminación afecta a muchos más. Prácticamente ha alterado todos los planes de futuro y , se puede predecir, el futuro de los proximos pontificados. Es una obra de arte política sublime y no vista desde hace muchas décadas. Estoy espectante por sus desarrollos. La Providencia ha actuado con un grano de sésamo otra vez. Un pontificado y unos planes satánicos perdidos por unas habitaciones...
El gobierno de la Iglesia (en su aspecto humano) hace mucho tiempo que está en manos o bien de inútiles o bien de débiles mentales o bien de nefastos personajes. Por lo visto Dios se vale igualmente en su providencia de las más pobres causas segundas para, o bien permitir los males, o bien procurarnos los bienes. Me parece un poco raro, apoyar, publicar y dar aire a la denuncia de Viganó y no sacar de ella todas sus consecuencias. Que se vayan todos debería ser nuestro grito. Del primero al último. Todo aquél que no quiera juntar sino desparramar, que funden su propia iglesia, a ver cómo les va, y sobre todo, cómo terminan. Descontado el CVII y sus dos papas, el daño que ya hizo Bergoglio que se suma al hecho por la ecumanía de JPII nunca reformada por BXVI, y a sus o bien encubrimientos o mano blanda con la red homosexual enquistada en la Iglesia, ameritaría que los bajáramos del pedestal. No creo que nos cambie mucho que Bergoglio renuncie ahora o dentro de tres años deje su puesto de ejecutivo del NOM a otro. Ese otro puede ser de su calaña o, por la gracia de Dios, puede ser un poco menos malo. Me da igual, lo que tengas que hacer hazlo pronto.
ResponderEliminarAdemás de la apostasía y de los acontecimientos en Jerusalén (donde está todo preparado para la construcción del tercer templo), en el libro de Daniel tenemos dos señales que como nunca antes se dan en este tiempo: el aumento del conocimiento y las personas viajando de un lado al otro.
ResponderEliminarLeamos: "Tú, Daniel, encierra estas palabras, y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará". (Daniel 12, 4).
Lo primero que advierte Jesucristo en el discurso escatológico es que muchos vendrían falsamente en su nombre y engañarian a muchas personas. Y nos manda tener cuidado. (Mateo 24, 4-5). Notemos en el libro del Apocalipsis que la descripción del primer jinete (Ap. 6, 1-2), es similar al de Ap. 19 1-16, quien es Jesucristo mismo. El primero representa esa falsa doctrina mediante la cual el demonio ha seducido al mundo entero. Y lo estamos viendo.
Sin querer llegaron a la misma conclusión que el Papa: Oración y ayuno.
ResponderEliminarInteresante artículo.
ResponderEliminarCoincido bastante, pero creo que ya hay un cisma, que no sea público es otra cosa. Bergoglio y sus seguidores, sean obispos, curas o laicos, creen otra cosa.
Creo que lo mejor es que renuncie, no por "democracia", sino porque él llevó a este cisma silencioso.
Y me permito una sujerencia, cuando Usted habla al inicio de los jesuítas, creo que debería distinguir, porque quien lee la vida de los misioneros jesuitas de la Patagonia Argentina, del Canadá, de Alaska, etc, se da cuenta de el nivel humano y sobrenatural, heroico y desinteresado de esas almas, que son los verdaderos jesuitas y no la lacra nueva.
Y como decía el P. José Guillelmo S.J, mártir, "dejémoselo a Dios".
Graicas por el blog.
Mientras Francisco tenga las espaldas cubiertas por los grandes medios judío-liberales de occidente no va a renunciar.
ResponderEliminarEl NYTimes et al preferirian que no haya ni Papa no Iglesia, pero mientras no puedan abolirla directamente, van a preferir a un Francisco y no a un Benedicto XVI.
En situación semejante, en el siglo XVI, de sodomía rampante en el clero y papa de dudosa moral en el tema, cierto es que no sobrevino el final de los tiempos inmediatamente. Pero un significativo obstáculo para ello era que todo un continente aún estaba por descubrir y evangelizar, luego no podía darse el final de los tiempos entonces. "Y será predicado este Evangelio del Reino en todo el mundo y entonces vendrá el fin". Ahora no hay lugar del mundo que no tenga al menos noticia del Evangelio y de Cristo.
ResponderEliminarPor otra parte, está el hecho de que "Jerusalén será hollada por los gentiles hasta que se cumplan los tiempos de las naciones"...
Un artículo muy lógico, razonable y sesudo, un artículo que además nos permite guardar cierto optimismo. MUCHISIMAS GRACIAS
ResponderEliminarExcelente artículo. Muchísimas gracias por contribuir aclarando los tantos en estos momentos tan difíciles que estamos sobrellevando dentro de nuestra amada Iglesia.
ResponderEliminarBueno, después de haber leído el libro que publicó el P Olivera Ravasi, con 4 sermones sobre el apocalipsis de San Vicente Ferrer, si el caso que profetiza se refiere a la actualidad, Francisco no sería Papa, Benedicto sí lo sería. Y Francisco moriría, y a su muerte se descubría al mundo toda su podredumbre (lo que nosotros ya sabemos/sospechamos). Pero en ningún lado dice que lo vayan a hacer renunciar.
ResponderEliminarEs un libro interesante, no tanto por del falso papa, sino por los medios que va a utilizar el anticristo para llevar a todos al error, y cuáles son los remedios para aquellos males.
Alfonso Jesús Vivar
Que pena que se use la investidura y el papel del guía de la Iglesia como algo político, especulativo.. no solo debería irse en su caso el Papa sino todos los que no sean humildes servidores , pastores y guardianes de la verdadera doctrina católica. Eso debe ser la Iglesia, lo demás es todo ornamento innecesario para su verdadera misión
ResponderEliminarla foto de la entrada de la chica oriental aturdida y con la ropa desgarrada en medio de unos escombros humeantes causados por una explosión, representa de forma analogica el estado en el que se encuentra actualmente la iglesia catolica, destrozada, desorientada, en una palabra irreconocible.
ResponderEliminarMuy de acuerdo con Eck, pero no del todo con Wnaderer.
ResponderEliminarLo que haya pasado en el pasado no es prueba que vaya a repetirse en el futuro, eso va por el punto 3 en cuanto a en lo que respecta a lo sucedido siglos atrás.
Siempre desee su renuncia o que , de alguna manera lo saquen o se vea impedido, por ejemplo con una total demencia senil o impedimento físico brutal , que haga imposible que continúe .
Téngase en cuenta que por su modo de ejercer el poder si le pasara algo así no podría seguir de hecho.
Pero esperemos que no suceda aún, lo que los creyentes esperamos es ver su DERRUMBE PERSONAL , COLECTIVO Y PATENTE.
Podemos si, tambien esperar y desear con ello el fin de los tiempos,
Lo que no me parece es esperar y rezar y nada más, si con esperar se entiende pasividad.
Hay bastante que hacer también para ver mejor, que otros vean, y para contribuir al derrumbe.
Hay muchos que lo vienen haciendo , algunos mejor que otros, ya sea desde aquí. u otros blogs, (Specola por dar un ejemplo entre muchos), algunos laicos, algunos prelados, el último y más trascendental es Viganò que es más que una bomba atómica.
Es un MISIL ATÓMICO CON CABEZAS MÚLTIPLES, muchas de acción retardada.
Por si faltaba algo, los obispos argentinos lo apoyan en su complicidad
ResponderEliminarhttps://www.infobae.com/sociedad/2018/08/31/los-obispos-argentinos-respaldaron-al-papa-francisco-sufre-un-ataque-despiadado/
Mientras tanto Argentina se hunde en el abismo, y Macri ,con su genial nonchalance, quería arreglar todo con la ley del aborto.
ResponderEliminar1) La renuncia del Papa no tiene nada de liberal ni de moderno. Es perfectamente legítima a la luz del Derecho Divino. Lo enseñó Bonifacio VIII: Romanum Pontificem posse libere resignare.
ResponderEliminar“…la causa de la renuncia del Papa debe ser proporcionada a la importancia del oficio, y por eso –en el caso del Obispo de Roma– gravísima, aunque queda a la libre valoración y a la conciencia del Sumo Pontífice.
Para la validez de la dimisión no se requiere ninguna causa concreta, pero en la doctrina se indican genéricamente: la necesidad o utilidad de la Iglesia universal y la salvación del alma del Papa mismo.
En la historia se enumeraban también algunas circunstancias concretas:
• irregularidad canónica,
• pública conciencia de un delito cometido,
• el odium plebis que no se podía corregir o tolerar,
• el deseo de evitar el escándalo,
• la falta de discreción de juicio,
• enfermedad, vejez, inhabilidad para ejercer su misión,
• deseo de llevar la vida religiosa o eremítica”
https://www.unav.edu/documents/10174/503217/RENUNCIA+DEL+ROMANO+PONTIFICE.pdf
En el caso de Francisco se dan varias circunstancias concretas tradicionales, a saber: pública conciencia de un delito cometido, el odium plebis que no se podía corregir o tolerar, el deseo de evitar el escándalo y la falta de discreción de juicio
2) Pedirla tampoco tiene nada que ver con el liberalismo ni con la modernidad.
Usté permita, maestro. En cuanto a "conservar el poder", el peronista B. redobla la dosis.
ResponderEliminarAlfonso Jesus Vivar: terminela con sus conspiranoia....es el Papa y de eso no hay nada mas que hablar, no me venga con profecias que nosotros somos gente madura y sencilla....no hay por que pensar tanto, que haya dos Papas en el Vaticano no tiene nada de raro....
ResponderEliminarY que el mundo este al borde de una Guerra Mundial tampoco tiene mayor importancia. Siempre hubo guerras y rumores de guerra. Y no me venga con Fatima y el Apocalipsis que para eso falta mucho.
Orestes Crobatta: Macri es un agente del NOM (perdon por mi inmadurez) y no pretende arreglar nada. Solo cumple ordenes. Buscan desestabilizar Latinoamerica. Es la geopolitica estupido!!
"Toda persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario". Quien determina lo contrario es el juez. Si no hay juez, ¿quien delinque es inocente? No, pero tengo que tratarlo como si lo fuera. Aquí pasa similar. No existe autoridad competente (algunos dicen que sí) para determinar si Francisco es o no Papa (por las razones que sea, herejía, invalidez de renuncia de Benedicto, nulidad en el cónclave (Socci), excomunión por hacer lobby (Mafia de San Galo)).
EliminarSi Ud me hubiese dicho que no perdiera el tiempo porque no hay autoridad, y que considerara a Francisco como Papa, no contestaría a su respuesta, porque tal vez tenga razón. Pero no, Ud (que tampoco es juez) determina que "es el Papa y de eso no hay nada mas que hablar".
No solo eso, sino que encima "sabe" que para Fátima y el Apocalipsis "falta mucho". ¿Cómo está tan seguro? Ud se queja de mis sospechas, pero Ud "sabe" como son las cosas.
Sobre no mencionar profecías, entiendo que no es obligatorio creerlas (salvo las bíblicas, claro). Pero, aunque tiendo a escaparles, tampoco puedo descartarlas. No creo que ser "maduro" implique rechazar toda profecía, porque está probado que los santos las han recibido y transmitido (pienso por ejemplo, en San Juan Bosco, o si quiere, en Fátima). Si Dios revela, no es para que las descartemos.
Y si quiere, para resumir lo del libro que publicó el P Olivera Ravasi, (sin afirmar que dichas profecías se estén cumpliendo ahora, porque no lo sé), le sintetizo: San Vicente Ferrer (Siglo XV) afirma que el mal vendrá de Alemania mediante seis hombres; que en medio de esos seis vendrá uno vestido de blanco; que el vestido de blanco será el verdadero Papa; que estará vestido de blanco porque va a ser muy anciano y virgen; que luego de él sería elegido un falso papa; que sería el anticristo oculto; que vendría bajo especie de santidad; cristiano por fuera, y en su corazón arraigado el maligno; que hará muchas maldades en la Iglesia bajo capa de bien.
Insisto, no puedo afirmar que se refiera a esta época. Pero lo sospecho.
Alfonso Jesús Vivar
Si, si, renuncia. Y despues viene Kasper o el chobornnn o algo asi de Vienna. Se arregla todo. No pasa nada. Ta todo bien.
ResponderEliminarNo debe dimitir el Santo Padre por una razón fundamental: porque ha de ser él y todos sus secuaces los que se han de comer y pagar el problema que han creado. Uno de los principales errores de los Aliados tras la 1º Guerra Mundial fue no exigir que firmaran Ludendorff y el Estado Mayor Alemán (que traicionaron a Alemania, al Kaiser y a su pueblo) las Capitulaciones de Compiegne. Se comieron el marrón la Republica de Weimar, que quedó desprestigiada sin nisiquiera nacer, pagó el pato el país con el pseudo Reich y ellos se salieron de rositas para echar la culpa a otros de sus fracasos y montar la que montaron. Abdica Francisco y su sucesor, que puede ser un papa decente y catolico tiene que asumir las culpas mientras que progresistas y modernistas se lavan las manos, enredan, se conjuran y echan la culpa a que la Iglesia no se ha modernizado como ellos querían, a que es inhumano sus medidas, etc. Esto ya lo vimos con el pobre Benedicto XVI.
ResponderEliminar"la Curia romana en el siglo XVI era similar a la actual"
ResponderEliminarPero en el siglo XVI no había internet ni medios de comunicación de masas, por lo que muy poca gente se enteraba de los pecados de los curiales. Hoy día, en cambio, la información se ha globalizado y dudo que la Iglesia pueda estar mucho tiempo con un papa desacreditado mundialmente por acusaciones tan graves.
Los obispos argentinos apoyan incondicionalmente a Francisco. Sin embargo otro obispo norteamericano dice que hay que escuchar a Viganò.
ResponderEliminarhttps://www.aciprensa.com/noticias/arzobispo-de-san-francisco-confirma-parte-del-testimonio-de-ex-nuncio-vigano-47465
Jaime
Beatriz, excelente el libro del RP Dominique Bourmaud, Cien años de modernismo.
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ResponderEliminarVivi:
Esjatológico: ¿por qué "esjatológico" con jota? Porque así debe ser. Hay dos palabras morfológicamente parecidas en español: “escatológico”, que significa pornográfico —de skatós, término griego que significa ‘excremento’— y “esjatológico”, que significa ‘noticia de lo último’ —de éskhaton, 'lo último'— las cuales son confundidas hoy día, por error o por descuido o ignorancia o periodismo, incluso en los diccionarios (Espasa, Julio Casares); de modo que, risueñamente, el apóstol San Juan resulta un escritor ¡pornográfico o excremental! Yo hago buen uso; si el buen uso se restaura, mejor, si no, paciencia. Poco cuidado con nuestra lengua se tiene hoy día.
Leonardo Castellani, El Apokalypsis de san Juan (pág. 313). Buenos Aires: Dictio, 1977
https://www.lanacion.com.ar/2167751-tras-denuncia-exnuncio-iglesia-eeuu-le-suma
ResponderEliminarNi Elizabestia puede tapar el sol con el diario.
Hilbert.
senador Organa dijo...
ResponderEliminarEn situación semejante, en el siglo XVI, de sodomía rampante en el clero y papa de dudosa moral en el tema, cierto es que no sobrevino el final de los tiempos inmediatamente. Pero un significativo obstáculo para ello era que todo un continente aún estaba por descubrir y evangelizar, luego no podía darse el final de los tiempos entonces. "Y será predicado este Evangelio del Reino en todo el mundo y entonces vendrá el fin". Ahora no hay lugar del mundo que no tenga al menos noticia del Evangelio y de Cristo.
Por otra parte, está el hecho de que "Jerusalén será hollada por los gentiles hasta que se cumplan los tiempos de las naciones"...
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¡Exacto! Hace años que pienso eso mismo.
Estimado, Ud. afirma "Y desconozco si el derecho canónico prevé alguna suerte de impeachment del Papa por parte del Colegio Cardenalicio o del Concilio Ecuménico."
ResponderEliminarNo, no existe, y hay pena de excomunión canónico para quien acuda a un Concilio u otra autoridad intentando apelar contra la autoridad del Papa. La soberanía del Papa es inmediata, universal y perpetua, porque es Vicario de Cristo. Sólo Dios lo juzga.
Yo simplemente me haría otras preguntas.
La Primera, si es realmente papa.
La Segunda, si debe ser obedecido en todo aquello que contraríe la Fe, el Dogma, la Escritura o la Tradición. Mientras, obraría tranquilamente como un sedevacantista. Me refiero a quien vive una época real de sedevacantismo, es decir el "interregno" entre dos papas.
La tercera, la oración confiada: la Iglesia es de Dios, a diferencia de nuestra pobre Patria que nos fue confiada a nosotros; Él no permitirá que sucumba Su Iglesia. Así que yo, por mi parte, estaría tranquilo. Como decía el Padre Castellani: "El plan de Dios no puede fracasar".
Yo no me alarmaría tanto; simplemente, intentaría leer los "signos de los tiempos".
Cordialmente
In dómina
Estimado Alfonso, era una ironía...estoy de acuerdo con ud.
ResponderEliminarAh, jajajajaja. Disculpe Ud, entonces. En algún momento me pareció. Acusaba de conspiranoia, y luego decía que Macri pertencía al NOM. Pero hoy en día uno nunca sabe muy bien con quien está hablando. Del otro lado de la computadora puede haber alguien medianamente pasable, o un idiota o un genio. Entonces uno termina por entender textualmente la letra. Un abrazo.
ResponderEliminarAlfonso Jesús Vivar