Jean Georges Vibert (1840-1902), El pavo real se acicala, Colección privada. |
[Aclaración previa: Seguramente resultará ya cargante y aburrido para los pacientes lectores del blog, como lo resulta para mi, seguir hablando del malhadado documento promulgado por el Vaticano y de los desaguisados del pornocardenal Víctor Fernández. ¡Qué más quisiéramos discutir en esta página, como hacíamos en los buenos tiempos del Papa Benedicto, temas más profundos y apasionantes! Sin embargo, la situación de la Iglesia es de extrema gravedad, y los manifiestos culpables de ella, en los últimos meses, son el Papa Francisco y el prefecto de Doctrina de la Fe. Y un cónclave se acerca. Nosotros, como laicos, podemos hablar libremente de estos temas -¿no es que el Concilio Vaticano II nos consideró ya maduros hijos de la iglesia con plenos derechos?- cosa que no pueden hacer los muchos sacerdotes y los muchos obispos que de buena gana lo harían por el razonable temor a una tormenta de misericordia que, por ahora, no puede cernirse sobre los seglares.]
El cardenal Mauro Gambetti, arcipreste de la basílica de San Pedro en el Vaticano, hizo saber en una entrevista, que las parejas de personas del mismo sexo que lo soliciten, podrán recibir la bendición de su unión en el templo mayor de la cristiandad. Se trata del mismo purpurado que ha prohibido terminantemente en la basílica la celebración de la misa tradicional, aquella que la Iglesia celebró durante dos mil años, e incluso de la celebración privada de la misa novus ordo, la que solamente puede ser concelebrada. Estamos frente a una catástrofe que, con razón, algunos le adjudican connotaciones apocalípticas: en San Pedro se pueden casar dos homosexuales pero no se puede celebrar la santa misa.
El pontificado de Francisco, que comenzó siendo una farsa, se ha convertido en una catástrofe. En este blog lo previmos desde el fatídico 13 de marzo de 2013: el problema de Bergoglio no es que fuera progresista; el problema es que era un compadrito porteño que había alcanzado las ambiciones de poder que albergaba desde su juventud (el nuncio Bernardini lo definió como “un hombre enfermo de poder”) y que llevaría a la Iglesia a una inédita situación de ruina. Lamentablemente, no nos equivocamos.
Y es importante dejar en claro que el culpable es Jorge Mario Bergoglio, devenido en Francisco por una imperdonable imprudencia de los cardenales, aunque ha sido su favorito, el cardenal Víctor Fernández, quien ha llevado al extremo la situación de crisis. Como él mismo lo dijo hace pocos días, Francisco sabía de la existencia del pornolibro antes de que fuera nombrado en Doctrina de la Fe. Y como bien señaló Scrosati, el affaire Tucho no es una casualidad; es un método. Estamos bajo un régimen pontificio que bien puede ser señalado como pornocracia. Basta recordar nombres como Battista Ricca, Arthur McCarrick, Gustavo Zanchetta, Francesco Coccopalmiero, Godfred Daneels o Víctor Fernández para convencernos que, quienes manejan a la Iglesia, en buen número son personas capaces de las peores perversiones. Y todos ellos fueron elegidos personalmente por el Papa felizmente reinante.
Hay una pregunta sin embargo, que sobrevuela en todos los ámbitos católicos: ¿cómo fue posible que se cometiera error tan garrafal como la publicación de Fiducia supplicans? El cardenal Fernández, como siempre, trasladó su responsabilidad el Papa. Lo acaba de decir en una entrevista a la agencia EFE. Los conocedores de la Curia sostienen en cambio, que el único culpable es Tucho quien, convencido de su inteligencia y capacidad, entró a su cargo de prefecto creyendo que se llevaría el mundo por delante. Comenzó a escribir, a emanar documentos y a otorgar entrevistas sin los debidos controles de la Secretaría de Estado cuyos habitantes probablemente no tengan fe, pero son los burócratas del país más antiguo del mundo. Y el Tucho, de Alcira Gigena, pensó que los iba a manejar. Como se dice en los ambientes de la terza loggia, "No estamos formados para ganar, sino para hacer perder a los demás", y hacer perder al Tucho fue la cosa más fácil del mundo: sólo era cuestión de animarlo a que siguiera haciendo lo que hacía.
Nadie esperaba, por cierto, que con la develación de sus aficiones por la redacción de relatos pornográficos, el Papa fuera a apartar a Fernández de su cargo. Jamás se permitiría tal muestra de debilidad. Sin embargo, Tucho ha quedado gravemente herido. Y no sólo por la aparición del libro, sino también por el rechazo a sus maniobras pro-gay del episcopado de un continente entero y de muchos obispos más de todo el mundo. Ha sido desautorizado, entre otros, por el cardenal Fridolin Ambongo, presidente de todos los obispos africanos, y por el mismo Secretario de Estado, el cardenal Parolin. Tucho ya no tiene autoridad propia para imponer nada a los obispos del mundo. Se trata de una situación nunca vista con anterioridad en la historia de la Iglesia.
Pero volvamos a la pregunta, ¿cómo es posible que Tucho haya cometido error tan brutal como FS? En su favor hay que decir que él siempre dijo, y escribió, lo pensaba acerca de los amores homosexuales: aparece en el libro La pasión mística, apareció en artículos periodísticos publicados hace décadas en periódicos argentinos, lo decía abiertamente en sus clases en la Facultad de Teología de Buenos Aires y lo escribió largamente hace tan solo seis años nada menos que en la revista de la Conferencia de Obispos Latinoamericanos: "Es lícito preguntarse si los actos de una convivencia more uxorio deban caer siempre, en su sentido íntegro, dentro del precepto negativo que prohíbe “fornicar”. Digo “en su sentido íntegro” porque no es posible sostener que esos actos sean, en todos los casos, gravemente deshonestos en sentido subjetivo" (p. 455). Pero más allá de que todo esto fuera conocido por Francisco, ¿cómo se explica la flagrante torpeza de Tucho, de creer que en un ambiente como la curia romana es suficiente con tener la protección del beatísimo?
La torpeza era previsible porque estamos en presencia de un personaje infatuado en su púrpura, que se autopercibe hombre de genio pero que, por más que se acicala, no puede esconder su mediocridad. Es el caso típico que ocurre a muchos dictadores como Bergoglio que, a fin de evitar recibir sombras de sus subordinados, eligen para rodearse a personajes limitados y ramplones. Todo funcionará más o menos bien mientras el jefe pueda ejercer el control de daños; cuando esta posibilidad desaparece por el motivo que sea, el pavo real que ha sido colocado en un puesto relevante, esponja su plumaje y comienza a pasearse por la granja cometiendo un sinfín de tropelías.
De ese modo se entienden las respuestas que el cardenal Fernández ha expresado a las críticas de FS, en las que divide a quienes lo cuestionan en tres grupos: los que no entendieron el documento; los africanos, que son una suerte de categoría especial y primitiva de cristianos que habitan en países bárbaros donde la homosexualidad todavía es penada por la ley, y los que tienen "mala leche" (sic). ¿En qué categoría, por ejemplo, incluiría a los cardenales Müller o Sarah? ¿Son burros que no entienden, o más bien tienen "mala leche"? Realmente, resulta más que asombroso que un personaje de este (bajo) calibre ocupe un lugar tan importante y decisivo en la Iglesia.
¿Cómo es posible que el cardenal Fernández no haya tanteado antes el terreno para conocer la reacción que tendría el documento? Es la actitud básica que adopta cualquier persona que ocupa un cargo de gestión por más elemental que éste sea. Y preguntas como estas conducen a la intriga sobre las verdaderas motivaciones del documento. Como dije anteriormente, y más allá de las declamaciones que puedan escucharse aquí y allá, la declaración no posee una causa y un fin pastoral. Habilitar la bendición para parejas heterosexuales que se encuentran en situación irregular parece superfluo. Si se trata de personas casadas, separadas de sus cónyuges legítimos y que viven en situación de concubinato, pareciera que, después de Amoris letitiae, la nueva declaración llegó tarde, pues si esas parejas pueden comulgar, cuánto más podrán recibir una bendición. Quien puede lo más, puede lo menos. Y si, en cambio, la pareja está constituida por novios convivientes, todos sabemos que si los tales eran católicos prácticos antes de iniciar la convivencia, lo siguen siendo también después ya que muy pocos sacerdotes son los que les advertirían que viven en pecado mortal. Desde hace mucho tiempo están convencidos que lo importante es el amor, y que si ellos se aman, un papelito, o un vestido blanco o la marcha nupcial no vendrán a cambiar nada. Por tanto, no hay objeciones para ese tipo de convivencias que ya son la cosa más normal del mundo.
Si, en cambio, la pareja está integrada por personas del mismo sexo, no parece que sean muchas las que estén interesadas en recibir una simple bendición, a la que perciben como un premio consuelo que los ofende más que conforma. Y, sobre todo, porque cualquiera de esas parejas que estuviera interesada en una bendición podía obtenerla sin necesidad de declaración pontificia; simplemente debía dirigirse al sacerdote indicado. Hemos visto fotos de bendiciones de este tipo ocurridas en Alemania o en Bélgica; el obispo de Almería nos dice que él ha bendecido “a bastante gente así” y me consta que en muchas ciudades argentinas, sobre todo en los templos jesuitas, desde hace al menos treinta años, se bendicen parejas homosexuales. Y no se trata de bendiciones espontáneas y privadas; a ellas asisten familiares y amigos de los bendecidos, se realiza en el templo y el sacerdote utiliza ornamentos sagrados. Es decir, la práctica ampliamente aplicada es muchísimo más generosa de lo que admite la declaración. ¿Cuál fue entonces su objetivo? ¿Por qué arriesgarse a que sucediera lo que está sucediendo: una enorme división dentro de la Iglesia?
No podemos saber con certeza los motivos, pero podemos conjeturarlos. Un interesante artículo de Paolo Giulsiano publicado en el blog de Aldo Maria Valli, conjetura que FS está "destinada al clero, a los religiosos y religiosas de tendencia homosexual, que encontrarían así justificación, ante sí mismos y ante los feligreses, de su sentimiento, un sentimiento que recibiría la aprobación de un cofrade, en nombre de la misericordia y de la acogida". Es probable. Y es probable también la interpretación del P. Santiago Martín: FS no es más que una subida de temperatura del agua donde se cuece la rana; la finalidad no es otra que la aceptación lisa y llana de las relaciones homosexuales y la habilitación del matrimonio entre personas del mismo sexo, tanto para laicos como para sacerdotes. Sin embargo, y sin descartar otras teorías, yo me inclino por el proverbio acuñado por un buen y sabio amigo y que dice: “Todo es autobiografía”. Detrás de muchas de las decisiones que se toman anidan motivos personales, muchas veces desconocidos para el mismo protagonista. Por eso mismo, yo conjeturo que el principal -aunque no único- motivo de FS ha sido de carácter personal. La elevación del cardenal Fernández al importantísimo cargo que ocupa y su incurable tendencia a la verborragia y al protagonismo, ofrecen a cualquier observador la posibilidad de delinear su particular psicología. Fue muy reveladora la crónica escrita por un habitante del pequeño pueblo donde nació y que publicamos hace pocos días. Tucho fue un niño y jovencito de ánimo delicado, con una inteligencia superior a la media de sus vecinos, y que siempre se sintió disminuido por sus coetáneos. En su pueblo natal, justamente porque sus sensibilidades contrastaban con los modales recios de los hijos de granjeros que allí habitaban; en el seminario, por las mismas razones y por su propensión a adular a sus superiores; en su vida de clérigo, por la poquedad de sus orígenes; en su vida de académico, por su inteligencia modesta, pues ya no tenía que medirse con muchachitos más amantes del fútbol y de las mujeres que de los libros, sino con intelectuales de fuste. Cualquier psicólogo podrá explicar que este tipo de personalidades tienden a generar en lo más profundo de su psicología, un enorme resentimiento que busca compensación a través de, por ejemplo, reivindicaciones. El hecho a todas luces extraño de que el cardenal haya vuelto a su pueblo vistiendo sus relumbrantes talares púrpuras es una clara reivindicación de la que probablemente no sea él del todo consciente; es el modo que tiene el pobre hombre de vengarse de las humillaciones sufridas en su niñez y adolescencia. Sus compañeros ahora no son más que granjeros sudorosos o verduleros panzones; él es una celebridad mundial. Y así se puede explicar su incontinente manía por publicar libros insulsos, y también Fiducia supplicans y las respuestas a las dubias y demás catarata de documentos emanados en las semanas previas: se reivindica de las humillaciones que le hicieron sufrir los teólogos de Buenos Aires y de Roma y, sobre todo, de las sombras que esparcieron acerca de la calidad de sus saberes desde el mismo dicasterio que ahora preside en tiempos del cardenal Levada, y cuando él se postulaba a rector de la Universidad Católica Argentina.
Algunos opinan que la declaración salió porque el tema de las bendiciones a parejas homosexuales no alcanzó las mayorías necesarias en el sínodo de la sinodalidad, que era la estrategia que había ideado Francisco para pagar sus votos a los alemanes y demás europeos que lo hicieron papa. El texto se habría estado preparando desde hace mucho y se habría dado a conocer luego del fracaso sinodal. No podría explicarse de otro modo, arguyen, la rapidez con la que fue redactado (apenas tres meses después de la toma de posesión de Fernández). Una cosa no quita la otra, pero yo no pondría el ojo en la velocidad de su elaboración: para cualquiera resulta evidente que se trata de un texto de la más baja y elemental calidad teológica, como toda la producción de Fernández, y que puede ser redactado fácilmente en pocos días.
Se podría objetar que la explicación psicológica sería suficiente siempre y cuando el responsable último de la declaración hubiese sido el cardenal Fernández, pero lo cierto es que fue refrendada por el mismo Papa Francisco. ¿Por qué lo permitió? Veo aquí tres posibilidades que no se excluyen totalmente entre sí. La primera es porque el pontífice está seriamente presionado por los episcopados progresistas, principalmente el alemán, sobre las reformas que prometió realizar en la Iglesia a cambio de votos, según fuera relatado en su momento por el cardenal Daneels. Y con FS les tira un hueso descarnado para que se entretengan un rato mientras él gana tiempo… para su próxima muerte. Es la táctica que ha seguido durante todos estos años: darles lo que ya tienen, tema sobre el cual ya hablamos en este blog. La segunda es que Bergoglio está mayor y enfermo, y ya no tiene la astucia que tenía hace algún tiempo. Se deja envolver más fácilmente, cede a las zalamerías de su favorito y se confía ciegamente en él. Las cosas ya no funcionan tan bien como antes. Finalmente, podría darse el caso que Fiducia supplicans haya sido un error garrafal de Tucho, el que pagará muy caro. Sobrevinieron consecuencias del todo inesperadas que complicarán no solamente lo que resta del pontificado de Francisco sino también el próximo cónclave. Se trataría de un error análogo al de Traditionis custodes que provocó el exilio a la insignificancia del cardenal Arthur Roche (a propósito, la interpretación que dimos hace poco menos de un año sobre la anunciada constitución apostólica que barrería los restos supérstites de la liturgia tradicional y por la cual fuimos severamente criticados, resultó acertada).
Finalmente, advierto sobre un aspecto metodológico que plantea FS y que resulta preocupante. La declaración se apoya para sostenerse argumentalmente en una distinción innovadora: la existencia de bendiciones litúrgicas o rituales y las bendiciones pastorales, distinción que tendría como único locus theologicus el magisterio del papa Francisco. Se trata, por cierto, de una argucia que no pasa el mínimo análisis serio y que podrá ser desbaratado fácilmente. El problema, sin embargo, es que el cardenal Fernández, según se comenta, planea continuar aplicando este mismo principio para otros casos. El próximo sería la ordenación de diaconisas. Para ello recurriría a la distinción de ordenaciones sacramentales, que seguirían reservadas solamente a los varones, y ordenaciones pastorales o como quiera llamarlas, a las que podrían acceder también las mujeres. Más allá de los disparatado de esta novedad teológica, el principio podría ser aplicado de modo análogo a una infinidad de casos; por ejemplo, podríamos tener sacerdotisas pastorales que estarían habilitadas para una consagración no sacramental del pan y del vino, y para otorgar un perdón misericordiante y no sacramental en la confesión. O bien, podría darse el caso que la inventiva del cardenal Fernández distinguiera entre relaciones sexuales pecaminosas y relaciones sexuales amorosas: las primeras serían las que se dan entre personas de cualquier género en situaciones de sexo casual, y continuaría siendo pecado mortal, y las segundas cuando media una relación afectiva entre los intervinientes. Las posibilidades son infinitas.
El pontificado de Jorge Mario Bergoglio -todos lo recordamos-, comenzó siendo una farsa. Diez años después de ha convertido en una catástrofe.
Tucho tiene que manejar su legado. Cuando muera Francisco y a él lo manden de vuelta a cuidar las plantas en Alcira Gigena, muy largos años, porque va a ser joven todavía ¿Qué va a hacer? Isabel Perón se acurrucó en el rol de 'la peor gestión presidencial de la historia', Fernández ¿va a querer quedar así?
ResponderEliminarSus escritos agradan a la porción más minoritaria y estéril de la Iglesia, los católicos dentro de 50 años no van a estar entre los homo-salesianos, ni entre los jesuitas, porque esas órdenes ya van a haber muerto. Se vienen suicidando hace tiempo ya.
Y el mundo pagano? Así como nadie recuerda a los innovadores más audaces del Vaticano II (pregúntele a cualquier profesor UBA si conoce a algún Padre Conciliar) tampoco nadie va a recordar a Fernández.
Los únicos que se acuerden de él van a ser los católicos del futuro: como alguien que hizo varias cosas muy mal, o como alguien que se arrepintió de haberlas hecho.
Desgraciadamente no creo que sea una porción minoritaria. A partir del CVII, la Iglesia con el apoyo de la mayoría de sus fieles, cambió la religión. Hoy ni la misa novis ordo ni doctrina son plenamente católicas.
EliminarCreo que debería Vd. haber comentado el comunicado conjunto de todas las conferencias episcopales africanas. Lo más asombroso no es que lo rechacen, sino que lo hacen ¡con "el acuerdo de Su Santidad el Papa Francisco y de Su Eminencia el Cardenal Víctor Manuel Femández"! ¿Cuándo se ha visto tal cosa? ¿Que en menos de un mes un continente entero se niegue a aplicar un documento papal, y el propio Papa les dé el visto bueno para ello? Nótese además que Tucho ha tenido, según parece, tres cambios de posición sobre la aplicabilidad del documento. Primero dijo en una entrevista que debía aplicarse (pero no mucho), luego que igual no, luego en su aclaración semireculatoria volvió a su posición original (que sí pero no), y finalmente parece aceptar de facto que no se aplique en África. Y si no se aplica en África, ningún motivo hay para que sinodal y pastoralmente cualquier obispo de cualquier lugar del mundo discierna que en su diócesis eso no cabe, o que sólo cabe con unas condiciones que lo hacen a todos los efectos una bendición individual que los homosexuales no querrán. Así que al final todo para nada, tiran la Iglesia por el precipicio por un documento que no aplicarán ni conservadores (porque no se puede aplicar sin escándalo) ni progresistas (porque evidentemente no aceptarán los humillantes límites de esta "bendición en el armario"). Todo esto sería muy gracioso si no fuera a llevar tantas almas al Infierno.
ResponderEliminarLo más probable es que ante la intransigencia de los africanos el Papa optara por unirse a ellos antes que ser desobedecido y generó que el rechazo a FS sea con su aprobación.
EliminarAunque ayer, en en programa Che tempo che fa, se encargó de decir que los que rechazan FS es porque no entienden. O sea, los trató de africanos ignorantes.
AL igual que Simón de Cirene que procedía de Africa y ayudó a Cristo a llevar la Cruz, hoy las Conferencias Episcopales africanas están ayudando a llevar la cruz a la Iglesia. Y como he escrito en otros comentarios, Bergoglio y las Conferencias Episcopales de Alemania, Suiza, Holanda, Austria representan a Judas
EliminarVea W., las hipótesis pueden ser muchas incluyendo las de su nota, pero permítame hacer hincapié en una que el artículo carece (tal vez lo haya dicho en otro) y es lisa y llanamente la alineación directa con la agenda globalista satánica, con todo lo que esto implica, autodenominada Agenda 2030. Hoy vemos que lo que se consideraba conspiranoico hace solo 10 años, no solo era una realidad, sino que ahora se muestra descarnado y triunfante.
ResponderEliminarPor eso creo que los devaneos apóstatas intra eclesiales del bergogliato no responden ya solo a jugarretas posicionales curiales, sino a los dictados claros y perentorios de la elite globalista luciferina que tiene al mundo al borde del colapso total.
Motus in fine velocior, les urge que surja El Otro cuanto antes.
"Mala Leche"....pocos tienen tan "mala leche" como Bergoglio y el Tucho.
ResponderEliminarPara mí, además, el documento tiene un destinatario que tantas satisfacciones le ha dado a Bergoglio desde 2013 (y a Fernandez desde que llegó a Roma): la prensa secular. Elisabetta Picqué, Scalfari y todos los que lo siguen en sus viajes y recogen las frases que él dice buscando titulares de diarios: "quién soy yo para juzgar; hagan lío; todos, todos, todos".
ResponderEliminarEn estos 10 años hemos visto que a Bergoglio le encanta que hablen de él en los medios, hacía rato que no les daba nada a alguno de sus chupamedias y aquí les lanzó algo que les da algo para hablar durante unos meses. Mientras tanto, como ud. dice, les tira un hueso a los obispos alemanes y belgas que le estaban pidiendo algún gesto para su agenda progre.
PS: Admirable la valentía generalizada de los obispos africanos. Allí apareció "un tapado", el cardenal congoleño Fridolin Ambongo Besungu, quien parece estar a la cabeza de este movimiento. El Card Sarah, aunque no sea obispo de ninguna diócesis en ese continente, no se quedó atrás y también salió con los tapones de punta
Para mi el doc. FS es la pluma de Fernández, pero el tufo es de Francisco, que en el querir emanar este doc. se sirvió de Tucho, del cual ya conocía sus pensamientos y sus escritos. Por eso lo mandó a llamar del otro lado del océano y le "pidió" que esperaba de él algo muy distinto a los anteriores prefectos de la CDF.
ResponderEliminarEs Francisco que se sirvió de Tucho, estaba seguro que con él podía contar para esto.
El pensamiento de los dos es el mismo. Dios los crea y ellos se juntan!
Sara
¿Realmente un conclave se acerca o su muerte está próxima? Muchos lo vienen diciendo hace más de un año - incluso aqui- pero luego parece difuminarse. En Argentina muchos - aún dentro del Episcopados - se han asombrado de la aceleración en la fecha de la canonizacion de Mama Antula en una época en la que nunca hay ceremonias de canonizacion (será el 11/2 y siempre son en octubre) y han visto en ello un signo de que "no hay tiempo". Sin embargo, este mismo fin de semana Francisco dijo que retomaría las visitas a las parroquias de Roma, afirmo que no piensa renunciar y anunció posibles viajes a la Polinesia en agosto y a Argentina hacia finales de año.
ResponderEliminarCuesta, entonces, comprender si realmente lo del final de pontificado y conclave es inminente, o si solo son deseos que lejos están de realizarse.
Pienso que quienes llevan tiempo hablando de un cónclave inminente confunden sus deseos con la realidad.
EliminarCuando un amigo nos contó en Roma que se decía en el Vaticano que al cardenal le gustaba pasearse con sus prendas coloradas, pensé que era una broma de los pícaros; pero cuando lo vi llegando a la parroquia de Alcira y a otros eventos así, y porque sí (Burke aparece con roquete y muceta o cappa magna porque las rúbricas del ceremonial antiguo se lo exigen, pero ir de sotana roja pelada no existe, menos en el Novus Ordo) era ver y no creer.
ResponderEliminarEs notable que el único argumento de teología moral que se le ocurre a este mediocre desde hace treinta años es decir que cuando se analiza el objeto del acto moral en materia sexual (que como ¨objeto¨ que es sólo puede ser analizado ¨objetivamente¨) éste no puede ser calificado de ¨malo¨ porque existen elementos subjetivos de inimputabilidad.
ResponderEliminarUna falacia lamentable que vale tanto para cualquier objeto de acto moral (no sólo para adúlteros u homosexuales), sea de un genocida, de un narcotraficante o de un pedófilo. Esto lo dijo en el pornolibro, en Amoris Laetitia y ahora en Sodoma Lubricans. Es un pobre tipo.
Sodoma lubricans, ja ja. Sí, Ludovicus. Así hay que llamar al bodrio.
EliminarSi sólo puede ser analizado objetivamente (porque es un "objeto" (!!!) ), entonces ¿cómo es que existen elementos "subjetivos"?
EliminarY resultan que esos elementos "subjetivos" son de "inimputabilidad" (¿sabrá este príncipe elector el significado de "inimputablidad", porque no es exactamente "no ir de putas") (¿no había dicho que sólo puede ser analizado objetivamente ? ¿a viene lo de elementos subjetivos inimputabilidad?)
Así, por ejemplo, de un acto objetivo de sodomía, el elemento subjetivo (la persona)
de "inimputabilidad" (la voluntad personal de no ser castigado un acto prohibido por la Ley de Dios)...
Toda esta estafa me confirma que ha sido un gran error haber dejado de enseñar Santo Tomás en latín...
Y no porque sean mágicos uno u otro (la doctrina del santo y el idioma), sino por el esfuerzo de educarse en latín (paideia) para luego poder estudiar filosofía y teología en latín, cosa que no estaba al alcance de todo el mundo, como el Tucho y seguramente por eso lo quitaron.
Recuerdo además que los exámenes eran públicos, orales y en latín.
Creo que Santa Teresa decía que nada teme el diablo tanto como el agua bendita...; seguro que hay por ahí algún santo o beato que diga que "nada teme tanto el diablo y los mediocres como el latín"...
Un par de latinajos a tiempo y espantas a este colorado besucón del tres al cuarto.
¡Mano de santo!
(Vade retro Satana!)
Tucho no es mediocre. Alguien mediocre es de la media. Éste es submediocre. Y con una inteligencia de párvulo. Sólo así se explica que confunda el grado de culpa con el hecho objetivo pecaminoso. Un sujeto puede tener atenuada la culpa al cometer un pecado, pero el acto en sí sigue siendo malo.
EliminarSí, es elemental. Elementos del voluntario y elementos del acto moral, primera bolilla de filosofía moral. Tucho es un bartender y hace un cocktail.
Eliminar¿Qué diríamos si cuando se analiza el uxoricidio, se dijera que si bien el acto es malo, no se puede decir hoy en día que matar a la mujer de uno sea pecado mortal, habida cuenta de que existen elementos que atenúan o incluso inimputabilizan al asesino? Como dice un blogero ilustre, lo que subyace es que el adulterio o la homosexualidad no son pecados o no al menos no son graves.
EliminarCreo que de algo sirvió FS. Primero "quemó" a Tucho, por lo cual en el cónclave no tendrá muchas chances de salir vestido de blanco. Quedó mal con todos. Para los proges el documento no les sabe a nada. Para los "conservadores", es un herejía.
ResponderEliminarSegundo, dio un buen sacudón en la Iglesia, particularmente la africana. Y la respuesta de estos últimos no quedará olvidada en el cónclave. Un Papa africano de piel negra podría ser la convergencia de dos corrientes. Por un lado los "progre" tendrá para mostrar al mundo que pusieron un negro en Roma, y por otro lado los "normales" (que quiere la Iglesia sin cambios doctrinales en matrimonio, sacerdocio, etc.) tendrán un Papa que no quiera tirar la Iglesia por la ventana. Me llama la atención un cardenal, el arzobispo de Kinsasa. Nombrado arzobispo y cardenal por Francisco, miembro de del pequeño Consejo de 9 Cardenales, pero uno de los organizadores de la respuesta africana a FS. De 63 años, tal vez un poco joven para algunos. Es solo un pensamiento, nada más...
Sobre diaconisas, de la misma forma que hace mucho sucede lo relatado sobre bendiciones de sodomitas, ya existen de facto las diaconisas. Recuerdo siendo adolescente ir a un pseudoretiro espiritual en las montañas, a una casita que una supuesta orden religiosa femenina tenia (desconozco su estado canónico), las cuales realizaban la "celebración de la palabra" y distribuían el Cuerpo de Cristo. No es mi intención juzgar a esas mujeres, las cuales hacían una laboral pastoral en una zona rural en la cual casi nunca llegaba un sacerdote... Pero un nuevo documento sobre diaconisas solo será blanquear algo existente.
Nuestro auxilio es el nombre del Señor, que hizo el cielo y la tierra.
La Iglesia Africana puede muy bien separarse de la obediencia sodomítica de Bergoglio y sus hechuras, como ha pasado justamente con los obispos africanos de la Unión Anglicana, que ya no reconocen la autoridad del arzobispo de Canterbury.
EliminarY de ahí precisamente tomarán la idea.
Fiducias suplicans es menos grave que Fratelli Tutti, enciclica que es totalmente herética
ResponderEliminarCoincido totalmente con la frase "Todo es autobiografía". He llegado a afirmar algo parecido, respecto de la justicia y que puede aplicarse al caso: "Los jueces se juzgan a sí mismo en sus sentencias" (si Zafaronni protege a un pedófilo, por algo es).
ResponderEliminarPero creo que en el artículo aplican la frase al Tucho cuando también se le puede aplicar a Francisco.
De hecho, no entiendo como unas fotografías de hace casi una década, se mantienen, curiosamente, ocultadas. Dejo el link abajo. Allí se puede ver a Francisco caminando de la mano con un sacerdote abiertamente pro-homosexual.
La pregunta que me hice entonces, y que repito en mis conversaciones con amigos que aún defendienden al porteño, es por qué Bergoglio perdió la sensibilidad para ir caminando de ese modo de la mano, con un varón, que además es cura, y que además es pro-homosexual. (La pregunta va acompañada de una previa invitación mía a darme la mano del mismo modo, y ante su normal rechazo, lanzo el interrogatorio).
A quienes teníamos esas imágenes en mente, FS no nos sorprende. Sólo blanquea algo que ya se notaba.
https://pagina-catolica.blogspot.com/2014/05/avanza-la-jerarquia-gay.html?m=1
Alfonso Jesús Vivar
Se hace demasiado hincapié en Tucho
ResponderEliminarLo que hace Tucho, lo hace porque obispos de lugares como Alemania y Bélgica quieren eso, tal vez como recompensa por haber votado por Bergoglio, o por lo financieramente importantes que son para la Iglesia.
Y Bergoglio lo permite, confiado en su praxis peronista que incluye ser un "movimiento" que abarca desde la izquierda hasta el fascismo, en el que se le dice a cada uno lo que quiere escuchar, o se dicen cosas ambiguas que pueden ser interpretadas favorablemente tanto por izquierda como por derecha, y cada uno se recorta el Perón que prefiere.
Por eso tenemos los amores de Leticia, y la gente no sabe si los divorciados recasados pueden comulgar o no, cada uno interpreta lo que quiere, y ahora este esperpento de las bendiciones de homosexuales en pareja, que no es bendiciones de parejas homosexuales, del mismo modo que el nacional socialismo no es el socialismo nacional.
Tucho tendría la culpa de la mala praxis, de haber fracasado en su intento de ambigüedad peronista, o el Papa se habría equivocado en darle a Tucho un trabajo imposible.
¿No ha llegado la hora de abolir la Sociedad de Arrupe, digo de "Jesús"?
EliminarNo hace más que promover el mal en el mundo.
Una cátedra de lujo la suya, Don Wander, como siempre. Pero ante semejante catástrofe yo me haría la pregunta del millón. ¿Qué nos espera entonces? ¿Cómo va a terminar esta película de horror?
ResponderEliminarCreo que un buen termómetro para medir esa temperatura que nos ahoga sería observar el camino recorrido por el prestigioso P. Santiago Martín citado en esta misma nota.
En efecto, desde el mismo día que Francisco se sentó en la Silla de Pedro, el Padre Martin, que nunca dejó de defender la sana doctrina, siempre tuvo elogiosos comentarios para él. Eso siempre me dejó un sabor amargo en la boca.
Pero por lo visto no hay mal que dure 100 años, la gota que derramó el vaso fue la FS de Tucho Fernández.
A partir de entonces el fundador de los Franciscanos de María -sin dejar de proclamar que ama al Papa o a lo que él representa- también proclama a quien quiera oír que aprobar la bendición de parejas homosexuales es una herejía que la Iglesia nunca aprobó ni aprobará jamás.
Considero de gran valor la autorizada palabra del Padre Martin porque sabiendo que sus comentarios, seguidos a diario por millones de católicos en todo el mundo, pueden ser tomados en serio porque conoce los secretos de la curia y su opinión refleja la situación caótica que hoy vive la Iglesia y que, por lo visto, ya no tiene vuelta atrás.
¿Qué significa eso? Para mi significa que los que piensan como Tucho y como Francisco nunca se arrepentirán porque están convencidos de que están en lo cierto, que los tiempos cambiaron y que la Iglesia debe acompañar esos cambios.
Y los que pensamos lo contrario también estamos convencidos que eso es una herejía y que ellos son unos apóstatas que han perdido la fe, si es que alguna vez la tuvieron.
¿Cómo termina esto entonces?
Todo indica que nos espera lo peor, el cisma está a la vuelta de la esquina y sus consecuencias no sólo serán graves para la Iglesia, también para el mundo, especialmente
en Occidente donde los católicos -aunque sólo lo sean por el bautismo- somos millones.
2024 promete ser un año de grandes convulsiones políticas, económicas, sociales y religiosas que cambiarán la faz del mundo para siempre.
Nuestro Señor no nos pide la victoria, sólo nos pide la lucha, la victoria es Suya. En ese escenario dantesco, pienso que en el silencio y la oración deberíamos pedir la fe y el valor que nos faltan para dar testimonio y perseverar hasta el fin, sabiendo que después de pasar por la puerta angosta lo mejor está por venir. Que nadie lo dude.
No se puede decir que Parolin haya desautorizado a Tucho. Ha dicho que FS “es un buen documento, la Iglesia de hoy no es la Iglesia de hace 2000 años”.
ResponderEliminarWanderer, sobre la celebración privada de la Misa "Novus Ordo", querrá decir que no se puede concelebrar.
ResponderEliminarLo que dice es que no se permite la celebración individual y solamente se admite la concelebración.
EliminarEn cuanto a las motivaciones del documento, probablemente sean más simples que las que aquí se exponen. Francisco y Tucho han querido que las bendiciones de parejas homosexuales se normalicen en la Iglesia y que no dependan de la disponibilidad de este sacerdote o de aquel obispo.
ResponderEliminarEstimado Wanderer. En la última entrevista que se le hizo a Bergoglio, él afirmó que espera que el infierno esté vacío.
ResponderEliminarParece que aún mucha gente no se ha percatado de algo que es muy obvio: nuestra jerarquía es atea en su mayor parte, y que están dentro de la Iglesia para destruir y hacer daño, motivados por sus odios o resentimientos personales, o porque la masonería se lo ordena.
Tucho es malo, pero Bergoglio es muchísimo peor.
Tucho parece haber experimentado no solo los besos profundos sino tb las experiencias pseudo místicas que describió...Está gente vino a destruir...
ResponderEliminarPara mi la cuestión de la aceptación de las relaciones homosexuales y la habilitación del matrimonio entre personas del mismo sexo, excede totalmente a la Iglesia Católica. Se trata de una imposición de las élites globalistas, lo vemos continuamente en la Televisión, los diarios, todo lo que sale de Hollywood, Disney, etc. y los gobiernos lo imponen en la educación. Se impone la legislación a los países del tercer mundo, junto con el aborto, la inmigración descontrolada, plandemias y otras ocurrencias como el calentamiento, todo forma parte de la misma ingeniería social diabólica. Bergoglio ha elegido el camino de plegarse sin cuestionamientos a la ONU, al foro de Davos y a estas élites (si no puedes con ellos, úneteles, habrá pensado). Recuerdo que Benedicto hizo amagues de resistir y ¿Qué le hicieron? Vatileaks, y sobre todo la la exclusión del sistema Swift, por supuestas maniobras delictivas del Banco Vaticano (que implicaba que el Banco Vaticano no podía ni enviar ni recibir dinero) ¿Cómo va a mover el dinero negro la mafiosa Logia Vaticana si la banca vaticana esta fuera del sistema? Este fue el talón de Aquiles de Benedicto, así que lo renunciaron a Benedicto y lo del sistema Swift se solucionó inmediatamente después de la renuncia. Todos contentos con Bergoglio, las élites con la Iglesia apoyando su ingeniería social y los mafiosos lavando el dinero con la banca vaticana.
ResponderEliminarCoincido con usted Jorge. Pero sin embargo Bergoglio no esta totalmente plegado a la agenda globalista en algunos aspectos: se manifestó en contra del aborto, aunque no es un tema del que hable mucho; también se manifestó en contra de los "vientres de alquiler", recientemente llamó a prohibir en el mundo esta práctica atroz; también habló del invierno demográfico y de la necesidad de una mayor tasa de natalidad. ¿Lo hace por verdadera convicción o porque si dice lo contrario termina de destruir la unidad de la Iglesia? No lo sé.
EliminarEs para disimular, quiere tener a todos contentos. La hipocresía es su marca
EliminarLas interpretaciones terminan siendo tan diversas, como diversos son los intérpretes, aún cuando, es evidente, muchos bebemos de las mismas –o parecidas- fuentes.
ResponderEliminarPor mi parte, considero que se le dan muchos “méritos” a Tucho, así como exclusivos “méritos” a Francisco en todo lo que acontece.
“Másticas orgásmicas”, al margen, lo cierto es que me parece extraño que Tucho se cortara solo con lo de FS. Quiero decir: sin considerar –por las razones que fueran- que tenía vía libre para mandarse con eso (así, eso…).
FS no respondía a nada que se le demandara –formal y públicamente, al menos- al Dicasterio a su cargo. Ahora, que a mí me parezca extraño, no es razón suficiente como para excluir la posibilidad de que sí, que haya sido algo propio y que lo sacó de “su galera” porque se consideró en condiciones de hacerlo. Qué lo llevó a esto último, en ese caso, lo sabrá Dios…
Si la cuestión estaba cerrada en 2021, por el Cardenal Ladaria, qué lleva a Francisco a auto-contradecirse, es otra pregunta.
Avaló lo de Ladaria, como avaló lo de su connacional (ver: https://www.youtube.com/watch?v=XG1aQTRuOcU). ¿Con qué objeto se auto-contradice, en tan poco tiempo entre lo de Ladaria y lo de Tucho Fernández? O: ¿por qué razón lo hace?
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/// Continúo.
ResponderEliminarLo de la exclusión del Vaticano del sistema Swift, pudo ser la estocada final contra Benedicto; y, se demuestra por el hecho de que habiendo renunciado –y sin que nada cambie- se volvió al sistema Swift, sin que nadie hiciera olas.
Lo de los vínculos con el poder en las sombras, el tema bancario-mafioso-financiero y mugres similares, son de muy larga data. Que lo digan el Papa Luciani y el Padre Malachi Martin, o que lo digan los jesuitas que llevaron a que parte de los suyos “se acoplaran” al gobierno nicaragüense, tras la caída de Somoza. Sólo ejemplos.
Bergoglio no llegó sólo al papado.
El encierro global impuesto en 2020, les dio muestras de cómo podía funcionar el experimento. La muerte de Benedicto, libera el camino. El Sinodo viene a profundizarlo. Francisco, añoso y con salud quebrada, se apura a cumplir con sus amigos o con quienes puedan estar apurándolo (si es que alguno lo puede hacer…). Además, dos guerras –en simultaneo- en dos continentes distintos, con tantas naciones involucradas –abierta o encubiertamente-, con la capacidad de mutua destrucción masiva actual, no es algo que haya acontecido antes. Con lo grave que fue, la cuestión de los misiles en 1962, hoy parece juego de niños.
Aun recordando aquello de que “los muertos que voís matáis, gozan de buena salud”, para el caso, no veo un probable sucesor muy diferente al Papa actual. Salvo que se termine teniendo dos Papas y que –ambos- se consideren sucesores y cabeza de la “única y verdadera Iglesia”. Ahí sí: ¡¡¡mamma mía!
Dios escribe derecho en renglones torcidos, me decía mi madre. Habrá que confiar. Y orar…, y hacer penitencia…., y procurar cumplir –debidamente- nuestras obligaciones de estado…
A fin de cuentas, ninguno de nosotros sabe si verémos el día de mañana.
El P Santiago Martin también insinúa que el móvil podría haber sido provocar un cisma dentro de la Iglesia y esta me parece una hipótesis dramáticamente acertada
ResponderEliminarNo creo que las alternativas propuestas por Wanderer sean excluyentes. Y creo, como Ud., que Bergoglio/Francisco hace rato que quiere provocar un cisma. Él mismo ha hablado en algunas declaraciones de cisma. La persecución de las comunidades Ecclesia Dei/Summorum Pontificum al mismo tiempo que mantiene una aparente buena predisposición hacia la FSSPX, creo que viene por este lado. La amenaza de excomunión a los indios de rito malabar que no aceptaban los cambios litúrgicos parece haber sido un experimento "localizado".
EliminarSi fuera así, habrían aprovechado la rebelión de los obispos africanos para declarar el cisma y, sin embargo, han pactado con ellos.
EliminarEn septiembre 2019, al regreso de África , en una entrevista para La Stampa, Francisco dijo que no tenía miedo de un cisma al interno de la Iglesia.
EliminarAnónimo 12:27
EliminarUsted no conoce a Bergoglio. Jamás lo va a declarar él. Va a esperar a que lo hagan los otros.
De hecho, uno de sus voceros oficiosos en la Argentina ya anda inventando que Viganò quiere crear una iglesia paralela.
"No es un dogma, solo mi opinión: me gusta pensar que el infierno esté vacío. Espero que lo esté” Ha dicho Bergoglio.
ResponderEliminar¿Que significa? Mas o menos lo siguiente: YO soy tan bueno, pero tan bueno, y tan misericordioso, que soy incluso mas bueno y misericordioso que el estrecho (por lo de la puerta estrecha) de Jesús que pone gente en el Infierno y que anda juzgando a vivos y muertos ¿para qué un juicio si todos se salvan?
Yo creo que el usurpador del Trono de San Pedro, espera que el infierno este vacio, sobre todo porque se la ve venir, sabe adonde va y am parecer no se quiere arrepentir.
EliminarLe va a convenir apurarse puede que no tenga mucho tiempo.
El infierno está lleno de boludos.
EliminarHay tantos que no caben y viven entre nosotros, esperando ingresar allá abajo.
¡Qué pena tener q continuar hablando del pavo T! Empero, como señala D. Wanderer, no queda otra. A favor del Tucho (en sentido figurado), sólo puedo decir que a Bergoyono se le escapa nada. Lo q no acontece xq él lo quiere, pide o manda, ocurre xq él no po impide, pudiendo hacerlo. En todo caso, siempre sabe que pasa, qué se está tramando, qué piensan sus inferiores, etc.
ResponderEliminarHace años, cuando vivía en Bs As y era abogada dela nómina de TIB, pude constatar más de1 vez quelos curas que fungían de jueces o defensores del vínulo, no se atrevían a hablar de determinados asuntos, en la sede del tribula. Tampoco en sus parroquias ni en la Fac Dcho. Canónico: "Las paredes oyen", era la explicación.
Yo iba a misa a Madre Admirable, cuyo párroco no daba la comunión en la mano; sin emgargo, cuando veía rostros desconocidos, avisaba antes de iniciar la distribución de la Eucaristía y decía que, los fieles que deseaba comulgar en la mano, podía recibirlan así, podían acercarse al ministro extraordinario. A esto se sumaban sus sermones, eruditos, y a veces muy críticos. Indefectiblemente, a primera hora del lunes, recibía una llamada de la curia o una visita de decano, y la correspondiente reprimenda. A Bergoyo nada se le escapa y nada perdona.
Si las bendiciones a parejas homosexuales fueran el pago de Francisco a los cardenales alemanes y demás europeos que lo hicieron papa, ¿cómo ha esperado al décimo año de su pontificado para realizar el pago? A su edad podría no haber llegado y hubiera quedado la factura sin pagar.
ResponderEliminarPrimero ha tenido que crear un equipo fiel a sus ideas.
EliminarAquí entran todos los obispos que ha obligado a presentar su renuncia.
También ha estado tanteando, porque si lo hubiera hecho al principio le hubieran desentronado; pero en estos 10 años la gente se ha acabado por acostumbrar a sus heterodoxias.
Supongo que la presión de los obispos alemanes ha sido importante, como importante ha sido haber deshabilitado la posible presión de los tradicionalistas al prohibir la misa bimilenaria.
Idiota no es; y los que le han puesto en el trono de Pedro, aún menos.
Simplemente está implementando teología jesuita moderna.
Pero es que Ud lo quiere todo ya?
EliminarA mí personalmente el documento FS, no me parece herético en cuanto a su redacción, pero sí en cuanto a los sentidos que a partir de su letra se puede interpretar. No hablaríamos por tanto de un texto herético sino de interpretaciones heréticas. Entendiendo además que el documento parece querer estas posibilidades, las alienta, las acoge, las justifica, las insinua.
ResponderEliminarSeñor, el texto es manifiestamente herético al sostener que Dios bendice el mal.
EliminarMucho palabrerio,para entender algo mas simple e irrerfutable "satanas(con minuscula)esta' manejando los hilos de numerosas marionetas que le responden colocadas en estrategicos
ResponderEliminarpuestos de la Iglesia
El humo de satanas es un realidad historica que muchos olvidan, que supera al modernismo , ,conservadorismo,etc
Quien es el principe de este mundo?Contra quien es la batalla final?
La motivación es ir avanzando la agenda para que los curas puedan casarse entre ellos.
ResponderEliminarEntre ellos??? Mama mia
Eliminar"Cuando escritores embusteros, que se atreven en su soberbia y en su ignorancia -quizá en su mala fe- a calificarse como teólogos, perturban y oscurecen las conciencias, cada uno de nosotros ha de anunciar con mayor fuerza la doctrina segura, a través de un proselitismo incesante".
ResponderEliminarSan Josemaría Escrivá de Balaguer
Realmente la Iglesia y fundamentalmente sus líderes y los feligreses están pasando por una crisis moral e intelectual terrible. Esto se hace evidente durante los dos años terribles ocasionado por la pandemia viral y se hace mayormente importante en los tiempos actuales
ResponderEliminarNo me han dejado espacio para hacerlo.
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