Podría seguir varios meses posteando información reservada
acerca de las prácticas del Opus Dei y de las enseñanzas del Padre. No es
necesario. Quienes aún quieran saber más acerca de esta prelatura pueden descargar el archivo zip que
está dando vueltas por la web.
Pero la cuestión es aquí más profunda, y el que puso el dedo
en la llaga fue Juancho, y nos dejó a todos con la brasa en la mano. Preguntó
si habían antecedentes en la Iglesia de situaciones similares. Y la verdad es
que sí.
Tal como hablábamos con un grupo de buenos amigos hace unos
días en torno a un single malt, lo
que hizo José Escrivá fue solamente tensar a lo bestia el principio que desde
hace siglos aplicaban los jesuitas y muchas otras congregaciones subsidiarias.
Como bien se ha dicho, las instrucciones secretas del Opus no son más que una
copia de las jesuitas. Coacción, control, búsqueda de influencias, sed de
dinero, etc. son prácticas que, con matices más o menos pronunciados, existen
desde hace mucho en el ámbito católico. Es importante aclarar, sin embargo, que
en la mayoría de los casos la intención era buena y apostólica: si se
coaccionaba a un joven para que ingresara en la orden, era porque se creía que
el mundo es peligroso y su salvación estaría asegurada allí dentro (Don Bosco
hasta tuvo un sueño al respecto); si se los controlaba, era porque se temía que
cayera en los peligros que acechan a cualquier persona célibe y se condenara;
si se buscaban influencias, era para evitar que se aprobaran leyes inicuas o
para que llegara al poder algún buen cristiano; si se buscaba dinero, era para
sostener las obras misionales o para erigir un nuevo orfanato. En definitiva,
se trataba de utilizar los medios del mundo para alcanzar fines evangélicos.
Y la práctica es vieja, muy vieja. Aunque se enojen algunos
lectores, debo confesar que nunca me convencieron los métodos utilizados por
San Bernardo para poblar sus monasterios. Que haya conseguido que casi cincuenta
familiares suyos se hicieran monjes indica tres posibilidades: o que la
vocación no existe, o que fueron convencidos o coaccionados para ingresar a la
vida monástica, o ambas. No se explica de otro modo.
Otra de las prácticas del venerable fundador del Cister era pescar en la pecera. Están publicadas
las cartas que intercambiaba San Bernardo con obispos y abades encolerizados
porque se había llevado a sus mejores monjes.
Claro que San Ignacio y su milicia, sobre todo después del
generalato de Aquaviva, se convertirán en maestros de la técnica. El Papa
necesitaba de un ejército y cualquier medio era lícito para proporcionárselo. En
definitiva, las huestes salvarían sus almas y la Iglesia extendería su reinado.
No hay fin más loable que este; los medios deberían ordenarse entonces a
conseguirlo.
No es de extrañar, entonces, que José Escrivá aplicara la
técnica, a lo bestia, en España. Y que Carlos Buela la aplicara, a lo grasa, en
Argentina. Y podemos seguir contando, en vistas a los resultados y a las
denuncias que todos conocemos: Servi Trinitatis, Legionarios de Cristo, Lumen
Dei, Schoenstatt, y ya se escuchan rumores de otro instituto industria
nacional.
Pero ¿no habrá sido así siempre? Definitivamente, no. San
Benito, el gran fundador e introductor de la vida monástica en Occidente, dice en
el capítulo 58 de su Regla: “No se reciba fácilmente al que recién llega para
ingresar a la vida monástica, sino que, como dice el Apóstol, "prueben los
espíritus para ver si son de Dios". Por lo tanto, si el que viene
persevera llamando, y parece soportar con paciencia, durante cuatro o cinco
días, las injurias que se le hacen y la dilación de su ingreso, y persiste en
su petición, permítasele entrar, y esté en la hospedería unos pocos días. Después
de esto, viva en la residencia de los novicios, donde éstos meditan, comen y
duermen. Prevénganlo de todas las cosas duras y ásperas por las cuales se va a
Dios. Si promete perseverar en la estabilidad, al cabo de dos meses léasele por
orden esta Regla, y dígasele: He aquí la ley bajo la cual quieres militar. Si
puedes observarla, entra; pero si no puedes, vete libremente”. Casi podríamos
decir que San Benito propone una coacción al revés: se lo empuja al interesado
para que no ingrese. Y si se lo admite, será luego de superar numerosas
pruebas.
Es verdad que las técnicas vocacionales implementadas por
los jesuitas y por las congregaciones post Trento fueron la respuesta que
consideraron más adecuada para la situación que estaban viviendo. Es probable
que nosotros, en su lugar, hubiésemos hecho cosas peores. Sin embargo, esta
realidad no nos impide el juicio. Y por eso digo: si el Reino de Cristo no es
de este mundo, no pueden utilizarse los medios de este mundo para alcanzarlo.
Pero tampoco irse tanto para el otro extremo, como hiciera Benito.
ResponderEliminarEs conocido que los seminarios lefes son autónomos entre sí y que muchas veces ha pasado que despiden a los seminaristas.
Algunos de estos se van a seminarios lefes de otros países, estudian, los ordenan y terminan siendo buenos curas. "Así, ante la duda, queda claro que vocación tenían", saben decir.
Algunos aparecen en otro país con un dominio del nuevo idioma local que es insuficiente al menos por el primer año.
Me parece mucho.
Ni muy muy, ni tan tan. Si se mete para cura y dice explícitamente que se quiere quedar cuando se lo pregunten, pues ... que se quede!, problema suyo!
Seminarista echado (a mi me echaron bien).
Ludovicus dijo,
ResponderEliminarY aunque todas estas organizaciones no quisieran ser castas, al menos deberían ser cautas, estimado Wanderer.
El secretismo, la manipulación, el control, en la época de internet, de la psiquiatría, de la gente que vive más de cuarenta años, no va más.
Todo esto se sabe. Todo está inventado. Todas las manipulaciones sectarias se parecen, hasta en lo de parecerse diferentes.
Todas las personas explotan, tarde o temprano. No hay nada oculto que no vaya a ser revelado.
Así que querer recurrir a la negación o a la mordaza judicial es un arma de doble filo.
Estimado W.:
ResponderEliminarSi un lee la voz "cuenta de conciencia" en el "Diccionario histórico de la Compañía de Jesús" se encuentra con que la ínclita patentó el "know how" de prácticas hoy vigentes.
http://books.google.com.ar/books?id=bEm8WXQXmYwC&pg=PA1019&dq=%22cuenta+de+conciencia%22+compa%C3%B1%C3%ADa+de+jes%C3%BAs&hl=es&ei=tziwTt6cDun40gHa-diwAQ&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=1&ved=0CC8Q6AEwAA#v=onepage&q=%22cuenta%20de%20conciencia%22%20compa%C3%B1%C3%ADa%20de%20jes%C3%BAs&f=false
Y no es el único tema. También en la sobrevaloración de las revelaciones privadas hay un precedente de las "segundas revelaciones".
Saludos.
No estoy deacuerdo con usted en tratar de comparar al Opus Dei con algunas ordenes religiosas fundadas sobre el hombro de grandes santos. Que San Bernardo haya atraído por su humildad de vida a muchos de sus parientes, quiere decir que era un hombre pleno de Dios, que su vida atría, que convertía con el buen ejemplo. No se olvide amigo Wanderer que la vida religiosa es el gran muro de contención de la justicia divina, que por la oración de esos hombres otros se salvan, que por la vida y oblación de esa vida plena de renuncias y sacrificios la Misericordia de Dios se extiende por toda la tierra. Puede que haya habido vocaciones mal informadas que se hayan lanzado a la aventura de la vida religiosa sin saber como era verdaderamente ésta, pero la regla de San Benito es muy clara y sabia que para filtrar estas falsas vocaciones, existía un filtro con un orden jerárquico como es; el postulantado, el noviciado, la promesa de votos, hasta llegar finalmente al verdadero monje que hace su profesión de votos solemnes. Por lo demás, la vida religiosa está orientada a la oración y al trabajo, todo ello para agradar a Dios, porque ellos tranforman los consejos evangélicos en una obligación voluntaria para sus vidas. El fin es salvar las almas renunciando al mundo,pero entonces ¿Cúal es el fin de los nuevos movimientos laicales?, la verdad es que no queda para nada de claro, porque se entremezclan aspectos religiosos con fines mundanos, anejo a conductas de tipo fariseaicas,distorsionando el mensaje evangélico.
ResponderEliminarMovimientos laicales y vida religiosa contemplativa son dos maneras opuestas de ver el mundo, son dos concepciones de la verdad, mientras que la vida religiosa busca agradar a Dios por la renuncia voluntaria y humilde al mundo, la otra. la laical quiere sambullirse en el mundo para conquistarlo y meter en el espacio que le sobra a Dios. Como ve, el agua con el aceite no pega, por lo demás toda la vida religiosa siempre le ha sido muy grata a Dios, habiendo numerosos papas en el pasado que la alabavan, junto a innumerables santos.
Por último, lo respeto mucho, pero eso no quiere decir que discrepe en algunos de sus pensamientos
Si te echaron Fly, Seminarista Echado, venite para el IVE que revisamos el asunto.
ResponderEliminarSanrafaelino.
El Opus Dei y otros grupos afines han logardo convertir a la religión en un capítulo de la psiquiatría. No se olviden de Torres Pardo. Lo que está haciendo este hombre es espantoso.
ResponderEliminarEstimado Anónimo de las 1602: Me parece que usted ha mezclado las cosas. Yo no comparo; relato hechos. Que gran cantidad de familiares hayan seguido a San Bernardo porque los "atraía su humildad" me suena ingenuo y, además, muy peligroso. Porque si usted acepta el principio de las vocaciones que son tales por la atracción de "grandes" hombres, podría funcionar en el caso de San Bernardo pero qué hacemos en el caso de Karadima? ¿Y en el de Buela? Ese principio no puede ser validado.
ResponderEliminarEn cuanto al resto, estoy totalmente de acuerdo con usted. Pero nunca se cuestionó aquí la vida religiosa.
El último silogismo es una falacia.Pareciera resumar cierto tufillo a maniqueismo jansenista y condiciona a nuestras preferencias el alcance de la Encarnacion.
ResponderEliminar(Escribir en un blog con intención apologética o de apostolado es,en cierto modo,trabajar en extender el Reino con medios de este mundo, por ejemplo, actitud condenable a toda vista según este razonamiento)
Santo Tomas dice otra cosa de como debe entenderse el término "mundo" y Pieper los desmenuza concienzudamente.
"Ves Madre, Yo hago nueva todas las cosas" como dice Gibson que dijo Cristo en la Pasión. Y si hizo nueva todas las cosas, no se puede decir, sin que se peque de simplificación bestial, que el mundo es una porqueria y no tiene nada que ver con el Reino. La criatura no coopera con el Creador porque quiere; al contrario, porque el Creador incorporó a la criatura en Su vida íntima, es que queda abierta la posibilidad (y obligación para el bautizado) de cooperación con su Creador. Y esta cooperación no se da en la virtualidad de Matrix, sino en el mundo, con el mundo y por el mundo, si entendemos este término positivamente como lo hace Santo Tomas.
No sea que llamemos impuro a lo que Dios purificó.
Sobre los métodos, es cuestión opinable. De otro modo,parece que toda la Iglesia debería ser benedictina. Pero coincido plenamente en la crítica dirigida a los excesos.
Es muy simple. Jesús nunca coaccionó a nadie. Llamaba, pero no forzaba. Jesús decía: van a llorar y se van a lamentar.
ResponderEliminarAcá es al revés, te pintan la vida consagrada con el estilo de los pastores evangélicos, la felicidad y la alegría, la gloria de ser más perfecto... Pura vanidad, que los lleva a arruinarse.
Aplaudo la desición del seminario de Buenos Aires de agregar un año más. Cuánto más difícil sea entrar, menos chances de que llegue alguien con falsa vocación.
No hay nada peor que un cura sin vocación. Es infeliz él, y le hace mal a los feligreses.
Anónimo de las 20:47: Si lo dijo Mel Gibson, no hay nada más que agregar.
ResponderEliminarAnónimo 20:47: ¿Su nombre real es Nicolas Maquiavelo?
ResponderEliminarEvidentemente W no es Amish ni mucho menos, pero tampoco eso quiere decir que todo medio es bueno.
No cualquier medio es apto para trasmitir la Verdad, debido a que algunos cuando lo hacen la deforman y mucho.
Ahora, ¿obligación de cooperar con el Reino...? palabras que escuché en mi adolescencia y todavía me causan escalofrios, no tenemos obligación, sino que estamos llamados a vivir en el Reino, no a construirlo ¿Qué piensa que nuestras pobres y míseras manos lo van a construir aquí en la tierra?
Nuestra salida, si somos realistas es repetir las palabras de la Virgen: Fiat mihi secundum verbum tuum. Y lo demás se dará por añadidura.
Saludos Cordiales
Mary Lennox
P.D.: ¿W y si en el caso de San Bernardo le dejamos una puertita abierta al milagro no como regla sino como excepción de Dios?
Dijo un anónimo "Aplaudo la desición del seminario de Buenos Aires de agregar un año más. Cuánto más difícil sea entrar, menos chances de que llegue alguien con falsa vocación."
ResponderEliminarQué poco entendés del tema. El tipo sin vocación es aquél a quien le encanta el seminario (tal como se lo concibe hoy), pero no ser sacerdote.
Si querés que no haya curas son voación poné a alguien con verdadera vocación a discernir quién debe seguir y quién no. Tarea por otra parte propia del obispo para realizar por ssí o por otro.
¿Alguien sabe si los Kikos aplican también algunas de estas técnicas ? ¿Se les podría meter en este mismo saco o lo suyo son solamente problemas de liturgia y ser judaizantes? Y en cuanto a los Focolares alguno tiene información de primera mano?
ResponderEliminarGracias
Soy el anónimo de las 16:02. y llámeme Christian:
ResponderEliminarGracias por su respuesta, veo que tenemos ciertas coincidencias y otras diferencias legítimas de apreciación, sigo manteniendo mi posición que uno se comvierte a través del buen ejemplo de grandes hombres de Dios, San Agustín quedó muy marcado con San Ambrosio, San Mauro con la vida de San Benito, y así le puedo enumerar muchos casos en la historia de la Iglesia. Pero ¿Qué pasa entonces con los fundadores de los nuevos movimientos religiosos?, no se olvide de las advertencias de Nuestro Señor respecto a los lobos con piel de ovejas, los falsos cristos, estos también seducen, pero generalmente lo hacen con personas ingenuas. La diferencia de matices es que unos seducen en la verdad, y los otros con novedades y subterfugios, como sucede en el caso de herejes como Lutero. Una manzana podrída dentro de un cajón de manzanas si no es sacada a tiempo pudre a las demás, a su vez, un hombre pleno de Dios causa el efecto positivo contrario, eleva a los otros hacia el cielo, por estar más cerca de la causa. existe un principio metafíco que dice que " mientras más cerca se está de una causa, más se sufre de su efecto", mientras más cerca del sol estemos, más nos quemamos. Analogamente, mientras más seamos de Dios, más atraemos a otros hacia Él, no por nuestra fuerzas, sino por que en nosotros opera más fuertemente la misericordia de Dios dada por la gracia.
Finalmente, debo decirle que me quedó muy claro que usted nunca cuestionó la vida religiosa, eso no lo pongo en duda, pero si relató hechos que se dan bajo distintas circunstancias, donde la circunstancia explica cabalmente el hecho. Siga adelante con todo lo que hace, siempre es bueno debatir con altura de miras y respeto por lo demás. Hay que repetar al pecador, pero no respetar el error.
Puestos a desconfiar creo que ni el mismo San Benito tomo al pie de la letra sus indicaciones. La verdad es que no fue solo San Bernardo, también fue Cluny, San Francisco, los dominicos...
ResponderEliminarNo me parece justo partir del principio de que la vida religiosa es para pocos. Ya santo Tomás se plantea algunas de estas objeciones y deja traslucir de que es mejor equivocarse entrando. (II-II, q.189 art.9 y 10 y en las obras en las que definde la vida religiosa).
Creo también, estimado Wanderer, que corremos el riesgo de juzgar esa realidad pasada con los ojos de hijos del ´68. La idea de coacción hoy es muy distinta de la del 1600 cuando todavía existía la esclavitud.
Por otro lado querría saber si a los que se casan se les exige tanta prueba como a los que entran en la vida religiosa.
No! nada de sospechas sobre l ultimo que se menciono Made in Argentina!Hay Casos concretos, torres pardo y su "legión" están causando estragos en muchas chicas y chicos del movimiento...algunos salimos a tiempo de sus "legiones de jóvenes" a Dios gracia.
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