Todo esto, por cierto, es trágico. Hace 50 años la Argentina tenía unos 20 o 30 pensadores de raza y oficio, con una cultura completa y sus 10.000 lectores. Hoy a lo sumo hay 5 o 6 y sus lectores no llegan a 1000. Y de estos 1000, casi sin hijos interesados en pensar (al menos mal) como sus padres.
Para peor, a nadie le importó un carajo lo que escribió el Padre Castellani en su Reforma de la Enseñanza, y así en vez de la formación del carácter, de la formación de hombres, logramos eruditos molestos que no leyeron a Lugones pero sí a Elliot y a Claudel y que en vez de hacer base con el Siglo de Oro Español o Dante lo hicieron con lecturas al estilo Benson perdiéndose en lo accesorio. Se logró asi un saber decoyuntado.
Y si me equivocó, los deafío a que me digan de un solo tipo que con 70 años hoy pueda hacer la crítica literaría que Ramón Doll hacía a sus 30 (cuando todavía era socialista).
La inteligencia nacional no existe. De eso no hay más.
Como le comenté a Wanderer, este collage salió de modo violento; una vez terminado me di cuenta que faltaban muchos, pero... andá a reordenar vos las fotitos. Para subsanarlo, ya estoy armando otro, y otro... La cultura argentina es un ente infinito.
Y anticipo: al final prepararé algo en serio, con los nombres de la verdadera tradición de nuestra patria. Uno o dos, porque tampoco son pocos. No va a ser un Billiken, así que obviaremos figuritas de próceres. Vamos a ver con W el modo de presentarlo en alta calidad, para que quien lo desee pueda imprimirlo y, tal vez, enmarcarlo.
"Somos peronistas, siempre estamos en medio del pueblo y el tumulto", indicó Cristina Kirchner al retirarse del cementerio de Río Gallegos donde despidió a su compañero político y sentimental de toda la vida. "No vamos a cambiar justo ahora", señaló con una sonrisa a pesar del dolor. PUBLICIDAD
Así lo relata el columnista de Página/12 Horacio Verbitsky en la edición impresa de hoy tras haber accedido a la ceremonia íntima que se celebró el pasado viernes en la capilla del cementerio de esa ciudad para brindarle el último adiós al ex presidente Néstor Kirchner.
El responso, a cargo de tres sacerdotes de estrecha relación con la familia Kirchner, consistió ?según la crónica- en la lectura de un breve texto bíblico y una conversación entre amigos en torno a la resurrección. En esa oportunidad, uno de los curas manifestó: "Todos morimos, pero pocos dan la vida, como Kirchner". Dijo también que "quienes dan la vida resucitan en el pueblo" y que "el pueblo argentino resucitó, porque estaba humillado y sin esperanzas y Néstor con sus actos se las devolvió".
Durante la celebración, la Presidenta se sentó en la primera fila a la izquierda del féretro, junto con sus hijos, el gobernador Daniel Peralta y el primer mandatario de Venezuela, Hugo Chávez. A la misma altura a la derecha, seguían sus suegras, cuñadas y sobrinos.
También participaron la hermana de Cristina, Giselle Fernández, la esposa del ministro de Planificación Julio de Vido, Alessandra Minnicelli, y la actriz Andrea del Boca, entre otras personalidades.
En ese difícil momento, según recogió el periodista, Cristina quiso que la acompañarán, además, representantes de organismos defensores de los derechos humanos, que llegaron desde Buenos Aires, familiares de Kirchner, unos pocos legisladores a los que siente próximos, como Agustín Rossi o Eduardo Fellner, además de amigos de toda la vida y compañeros de militancia, de ella, de Néstor y de Máximo Kirchner, que permaneció durante más de veinte horas al lado de su madre.
Este último, según el artículo, abrazó durante la ceremonia a un compañero de Río Gallegos y disparó: "Al matar a ese pibe en Constitución [por Mariano Ferreyra, militante del PO] también mataron a mi viejo. Estaba indignado. Todos esos tipos tienen que ir en cana".
Por otro lado, trascendieron algunos detalles de la ceremonia realizada en Buenos Aires donde una multitud despidió los restos de "Lupo".
Otro de los sacerdotes contó a Verbitsky que durante el velatorio en la Capital Federal, Cristina pasaba la mano por el ataúd y como si acariciara a Kirchner le decía en voz muy baja "caprichoso, caprichoso".
Ese mismo cura ratificó que "Néstor era muy caprichoso" y explicó que por eso "el pueblo argentino está como está y le responde como le responde".
Entre otras cosas también circuló que la decisión de velar a Kirchner a cajón cerrado en la Casa Rosada respondió a un comentario que el propio ex presidente hizo en vida al referirse a los velatorios que tenía lugar en el Congreso. De acuerdo con lo expresado por amigos de Río Gallegos, a Kirchner no le gustaban este tipo de ceremonias a cajón abierto, en los que los restos de una persona quedan expuestos a las miradas morbosas de cualquiera.
Amigo, le agradezco la aclaración. Nunca hubiese podido suponer que esa carita era de una tal Milagros. Siempre sospeché de esa afirmación marechaliana:"cada nombre es un destino". ¡Minga! Más bien, la podría haber considerado como doble de riesgo de Carlos Tevez.
"Macedonio se queda mirando al perro que le lame la mano. Y me dice, fijate qué inteligente, no confunde mi mano con un pedazo de carne. Es un fuerte intelectual, che" (Borges y Bioy, "Cuentos breves y extraordinarios").
Hay dos omisiones dolorosas: Mirta Legrand y el Padre Marcó. Son fuertes intelectuales de centro derecha, che.
Tribunus: ¿Fue tan masivo en serio? La TV Pública dijo que pasaban 3000 por hora frente al muerto. Eso da un total de 72.000 personas. No son muchas. Son más bien pocas. Súmele otras 70.000 y réstele las que fueron por plata. No es un número masivo.
Che, Lupus, te olvidaste de Ricky Fort, nada menos. Igual, LA intelligentzia argentina de hoy se resume y compendia en Tinelli. Él es la argentinidad del 2010.
Tribunus. Me como todas y cada una de las carretilladas de idiotas útiles del kirchnerismo. Y le aseguro que nunca, pero nunca, vi más bondis estacionados en la 9 de Julio que esta vez. Si eso es expontaneo... Lo que da bronca es la imagen que de buena fe se llevan los que desde el interior lo vieron por TV. Un abrazo.
Acá me pongo a cantar esta milonga en la Plaza. Me siento como en mi casa porque sé que es mi lugar. Nos lo supimos ganar de las fuentes al balcón. Fue un auténtico aluvión de pueblo, todos mezclados, en patas, descamisados, reclamando por Perón.
En aquella primavera –fue en octubre, como ahora– había llegado la hora y era la hora primera. Parecía una quimera lo que entonces empezaba, y se me lengua la traba porque diez años después se daba todo al revés: la Plaza se desangraba.
Es simple contar los sueños pintar la inauguración de una gesta, la ilusión desatada y sus empeños. Y es fácil sentirse dueños de la desgracia y pensar cuando nos pegan fulero que no hay nada que cantar, que sólo queda colgar la guitarra en el ropero.
Para llorar siempre es tarde; temprano, para el festejo. Con el Viejo o sin el Viejo esta plaza siempre arde. Ninguna bomba cobarde pudo clausurar la Historia. La derrota o la victoria son un sencillo avatar: nos volvemos a juntar porque tenemos memoria.
No se llena un agujero con flores o con lamentos. Bien haigan los sentimientos por el que se fue primero, pero nunca el sensiblero renuncio que hace decir: No nos queda porvenir, y acá ya ha pasado tanto... Si ha de servir este canto que sirva para seguir.
Esta milonga será para cantarla entre todos. Respetando cada modo de pensar la realidad. No nos falte caridad: aciertos y desatinos hicieron nuestro destino con réprobos y patriotas. Nadie rompa las pelotas: somos todos argentinos.
No olvidemos, sin embargo, que hoy se juegan muchas cosas. Desde los tiempos de Rosas (cada uno se haga cargo) viene un litigio muy largo entre el campo popular y un grupo, listo a acatar los dictados del Imperio. Es un asunto muy serio, cosa de nunca acabar.
Por eso es que a la salida repito mi moraleja: siempre es más fácil la queja, el lamento o la sentida palabra de despedida a un sueño y su devenir. Yo no lo dejo morir porque alguno lo disponga: vaya pues esta milonga, que sirva para seguir.
Vi pasar bajo mis pies el cortejo por Avenida Alem, cuando recién salió de la Rosada.
Era el doble o triple de algunas manifestaciones de "grupos sociales" -piqueteros pagos- que a veces van al Ministerio de Trabajo, más autos oficiales.
Deben haber sido unas veinte mil personas, como mucho. En el de Alfonsín por Avenida Callao hubo más.
Y en el de Perón, Evita e Irigoyen, ni hablemos.
Es risible como la izquierda quiere transformar a este ladronzuelo en un prócer. Es increíble -se lo debemos a Duhalde- que esso personaje llenos de odio estén teniendo el poder y la presencia que tienen hoy -sobre todo en los medios-. Hay que limpiar esa roña de la faz de la patria.
A no engañarse por el número de la turba. Se trata de una minoría pequeñísima e insignificante. No son muestra de nada sino que esos que se vieron eran todos. Ocurre que son activistas, y los activistas son así, van a todos los actos. La gran mayoría de la gente estaba en sus trabajos, o en sus casas.
Anónimo de las 05:12 (pucha la hora): el P. Bouchacourt, el P. Calderón... no sé si esta selección es cajetilla, pero la que ud. propone es de sacristía. Los argentinos miran cada vez menos a los curas. ¿Ud. es uno de ellos?
Todas las omisiones detectadas fueron tenidas en cuenta, y más aún. Ya está en proceso la segunda parte.
Muy bueno, Lupus, pero no se entiende muy bien el criterio para incluir o no a algún personaje. No sé si el título se lo propuso a Ud. a Wanderer o no, pero si así fue, supongo que incluir como intelligentzía a personajes a los cuales casi no se les conoce la voz, no sé... Por ejemplo, ¿incluir a De Vido, a E. L. Duhalde, a Garré, a Moreno...? ¿o a Zecca que no lo conoce nadie excepto gente vinculada a la UCA o el seminario de Bs. As.?
Yo incluiría como intelligentzía a quienes en medios culturosos e intelectualoides acaparan suspiros: à gauche se me ocurren Capusotto, Caparrós, Lanata, Víctor Hugo, Pagani, Aliverti, etc.; y à droite, Morales Solá, Nelson Castro, Aguinis, A. Posse, Massot, R. Fraga, Cachanosky, Rozitchner, etc.
Le falto el compañero camionero, al cual le debemos el disgusto que ocasionó que el tuerto explote y , Horacito V que desde pasquín 12 marca tendencia surda.INDEC ALIVIADO
Este Tribunus lo vio desde lo que Uds. llaman el "interior" y desde la TV pareció realmente masivo, a juzgar que se trataba nada menos que un "político".
Ni el acérrimo enemigo Clarín-TN dejó entrever que no fuera una concurrencia importante.
Desde la Provincia (que no necesariamente es la de Bs. As.) rogaría informen objetivamente quienes han sido testigos presenciales.
de todos estos, me quedo lejos con moria casan
ResponderEliminarEso es la Argentina que nos merecemos .
ResponderEliminar¿ Porque ...?
That is the question
Sí, Lupus. Yo en tu lugar hubiera puesto la te Messi, no la de Tevez.
ResponderEliminar¿No sabés que es nuestro nuevo dios?
Mago Capria.
Todo esto, por cierto, es trágico.
ResponderEliminarHace 50 años la Argentina tenía unos 20 o 30 pensadores de raza y oficio, con una cultura completa y sus 10.000 lectores. Hoy a lo sumo hay 5 o 6 y sus lectores no llegan a 1000. Y de estos 1000, casi sin hijos interesados en pensar (al menos mal) como sus padres.
Para peor, a nadie le importó un carajo lo que escribió el Padre Castellani en su Reforma de la Enseñanza, y así en vez de la formación del carácter, de la formación de hombres, logramos eruditos molestos que no leyeron a Lugones pero sí a Elliot y a Claudel y que en vez de hacer base con el Siglo de Oro Español o Dante lo hicieron con lecturas al estilo Benson perdiéndose en lo accesorio. Se logró asi un saber decoyuntado.
Y si me equivocó, los deafío a que me digan de un solo tipo que con 70 años hoy pueda hacer la crítica literaría que Ramón Doll hacía a sus 30 (cuando todavía era socialista).
La inteligencia nacional no existe. De eso no hay más.
El Carlista.
Como le comenté a Wanderer, este collage salió de modo violento; una vez terminado me di cuenta que faltaban muchos, pero... andá a reordenar vos las fotitos. Para subsanarlo, ya estoy armando otro, y otro... La cultura argentina es un ente infinito.
ResponderEliminarLupus
El único que supera en cara de boludo a Laguna es J.P. Feinnman.
ResponderEliminarNo sé quién es el que está a la derecha de Rial y los dos de la derecha de Zaffaroni.
El Carlista.
Y anticipo: al final prepararé algo en serio, con los nombres de la verdadera tradición de nuestra patria. Uno o dos, porque tampoco son pocos. No va a ser un Billiken, así que obviaremos figuritas de próceres. Vamos a ver con W el modo de presentarlo en alta calidad, para que quien lo desee pueda imprimirlo y, tal vez, enmarcarlo.
ResponderEliminarLupus
Mago Capria dijo:
ResponderEliminarDe La Nación:
"Somos peronistas, siempre estamos en medio del pueblo y el tumulto", indicó Cristina Kirchner al retirarse del cementerio de Río Gallegos donde despidió a su compañero político y sentimental de toda la vida. "No vamos a cambiar justo ahora", señaló con una sonrisa a pesar del dolor.
PUBLICIDAD
Así lo relata el columnista de Página/12 Horacio Verbitsky en la edición impresa de hoy tras haber accedido a la ceremonia íntima que se celebró el pasado viernes en la capilla del cementerio de esa ciudad para brindarle el último adiós al ex presidente Néstor Kirchner.
El responso, a cargo de tres sacerdotes de estrecha relación con la familia Kirchner, consistió ?según la crónica- en la lectura de un breve texto bíblico y una conversación entre amigos en torno a la resurrección. En esa oportunidad, uno de los curas manifestó: "Todos morimos, pero pocos dan la vida, como Kirchner". Dijo también que "quienes dan la vida resucitan en el pueblo" y que "el pueblo argentino resucitó, porque estaba humillado y sin esperanzas y Néstor con sus actos se las devolvió".
Durante la celebración, la Presidenta se sentó en la primera fila a la izquierda del féretro, junto con sus hijos, el gobernador Daniel Peralta y el primer mandatario de Venezuela, Hugo Chávez. A la misma altura a la derecha, seguían sus suegras, cuñadas y sobrinos.
También participaron la hermana de Cristina, Giselle Fernández, la esposa del ministro de Planificación Julio de Vido, Alessandra Minnicelli, y la actriz Andrea del Boca, entre otras personalidades.
En ese difícil momento, según recogió el periodista, Cristina quiso que la acompañarán, además, representantes de organismos defensores de los derechos humanos, que llegaron desde Buenos Aires, familiares de Kirchner, unos pocos legisladores a los que siente próximos, como Agustín Rossi o Eduardo Fellner, además de amigos de toda la vida y compañeros de militancia, de ella, de Néstor y de Máximo Kirchner, que permaneció durante más de veinte horas al lado de su madre.
Este último, según el artículo, abrazó durante la ceremonia a un compañero de Río Gallegos y disparó: "Al matar a ese pibe en Constitución [por Mariano Ferreyra, militante del PO] también mataron a mi viejo. Estaba indignado. Todos esos tipos tienen que ir en cana".
Por otro lado, trascendieron algunos detalles de la ceremonia realizada en Buenos Aires donde una multitud despidió los restos de "Lupo".
Otro de los sacerdotes contó a Verbitsky que durante el velatorio en la Capital Federal, Cristina pasaba la mano por el ataúd y como si acariciara a Kirchner le decía en voz muy baja "caprichoso, caprichoso".
Ese mismo cura ratificó que "Néstor era muy caprichoso" y explicó que por eso "el pueblo argentino está como está y le responde como le responde".
Entre otras cosas también circuló que la decisión de velar a Kirchner a cajón cerrado en la Casa Rosada respondió a un comentario que el propio ex presidente hizo en vida al referirse a los velatorios que tenía lugar en el Congreso. De acuerdo con lo expresado por amigos de Río Gallegos, a Kirchner no le gustaban este tipo de ceremonias a cajón abierto, en los que los restos de una persona quedan expuestos a las miradas morbosas de cualquiera.
A la der. de Rial, Milagros Salas.
ResponderEliminarA la der. de Zaffaroni, Zecca y nosotros.
Días atrás, precipitadamente, contesté afirmativa a la interrogante de W. de si muerto el perro se acabó la rabia.
ResponderEliminarSin embargo lo acontencido en las honras fúnebres me parece demostrar lo contrario, no solo no se acabó sino que salió fortalecida.
Estoy perplejo por las muestras masivas que despertó Kirchner. La verdad no lo imaginaba, y no parece que haya sido armado, sino espontáneo.
Hay que reconocer que algo debe de haber tenido, es imaginable una movilización semejante con Menem, o De la Rúa.
¿Será que Kirchner no era el demonio que decían que és?. El germen de la duda se instaló en mí.
Tribunus Plebis.
Tribunus Plebis.
Amigo, le agradezco la aclaración.
ResponderEliminarNunca hubiese podido suponer que esa carita era de una tal Milagros.
Siempre sospeché de esa afirmación marechaliana:"cada nombre es un destino". ¡Minga!
Más bien, la podría haber considerado como doble de riesgo de Carlos Tevez.
Suyo,
El Carlista.
Ludovicus,
ResponderEliminar"Macedonio se queda mirando al perro que le lame la mano. Y me dice, fijate qué inteligente, no confunde mi mano con un pedazo de carne. Es un fuerte intelectual, che" (Borges y Bioy, "Cuentos breves y extraordinarios").
Hay dos omisiones dolorosas: Mirta Legrand y el Padre Marcó. Son fuertes intelectuales de centro derecha, che.
Tribunus: ¿Fue tan masivo en serio? La TV Pública dijo que pasaban 3000 por hora frente al muerto. Eso da un total de 72.000 personas. No son muchas. Son más bien pocas. Súmele otras 70.000 y réstele las que fueron por plata. No es un número masivo.
ResponderEliminar100 pesos por pasar 3 veces...
ResponderEliminarPero había más gente que en la fiesta naranja, jaja...
Che, Lupus, te olvidaste de Ricky Fort, nada menos. Igual, LA intelligentzia argentina de hoy se resume y compendia en Tinelli. Él es la argentinidad del 2010.
ResponderEliminarEl P. Bouchacourt, parte de nuestro intelectualato? Yo insisto con el tesorero, o con el P. Alvaro Calderón.
ResponderEliminarMuy "cajetilla" la selección. Además, Milagro (María del Milagro) Sala, es discípula del gordo silo, que entonces debería engrosar la lista.
Seguí participando.
Wanderer: lo de 3 mil por hora es imposible. Es más o menos uno por segundo. Es un dibujo del IndeK.
ResponderEliminarTribunus.
ResponderEliminarMe como todas y cada una de las carretilladas de idiotas útiles del kirchnerismo.
Y le aseguro que nunca, pero nunca, vi más bondis estacionados en la 9 de Julio que esta vez.
Si eso es expontaneo...
Lo que da bronca es la imagen que de buena fe se llevan los que desde el interior lo vieron por TV.
Un abrazo.
Por Juan Sasturain
ResponderEliminarAcá me pongo a cantar
esta milonga en la Plaza.
Me siento como en mi casa
porque sé que es mi lugar.
Nos lo supimos ganar
de las fuentes al balcón.
Fue un auténtico aluvión
de pueblo, todos mezclados,
en patas, descamisados,
reclamando por Perón.
En aquella primavera
–fue en octubre, como ahora–
había llegado la hora
y era la hora primera.
Parecía una quimera
lo que entonces empezaba,
y se me lengua la traba
porque diez años después
se daba todo al revés:
la Plaza se desangraba.
Es simple contar los sueños
pintar la inauguración
de una gesta, la ilusión
desatada y sus empeños.
Y es fácil sentirse dueños
de la desgracia y pensar
cuando nos pegan fulero
que no hay nada que cantar,
que sólo queda colgar
la guitarra en el ropero.
Para llorar siempre es tarde;
temprano, para el festejo.
Con el Viejo o sin el Viejo
esta plaza siempre arde.
Ninguna bomba cobarde
pudo clausurar la Historia.
La derrota o la victoria
son un sencillo avatar:
nos volvemos a juntar
porque tenemos memoria.
No se llena un agujero
con flores o con lamentos.
Bien haigan los sentimientos
por el que se fue primero,
pero nunca el sensiblero
renuncio que hace decir:
No nos queda porvenir,
y acá ya ha pasado tanto...
Si ha de servir este canto
que sirva para seguir.
Esta milonga será
para cantarla entre todos.
Respetando cada modo
de pensar la realidad.
No nos falte caridad:
aciertos y desatinos
hicieron nuestro destino
con réprobos y patriotas.
Nadie rompa las pelotas:
somos todos argentinos.
No olvidemos, sin embargo,
que hoy se juegan muchas cosas.
Desde los tiempos de Rosas
(cada uno se haga cargo)
viene un litigio muy largo
entre el campo popular
y un grupo, listo a acatar
los dictados del Imperio.
Es un asunto muy serio,
cosa de nunca acabar.
Por eso es que a la salida
repito mi moraleja:
siempre es más fácil la queja,
el lamento o la sentida
palabra de despedida
a un sueño y su devenir.
Yo no lo dejo morir
porque alguno lo disponga:
vaya pues esta milonga,
que sirva para seguir.
Vi pasar bajo mis pies el cortejo por Avenida Alem, cuando recién salió de la Rosada.
ResponderEliminarEra el doble o triple de algunas manifestaciones de "grupos sociales" -piqueteros pagos- que a veces van al Ministerio de Trabajo, más autos oficiales.
Deben haber sido unas veinte mil personas, como mucho. En el de Alfonsín por Avenida Callao hubo más.
Y en el de Perón, Evita e Irigoyen, ni hablemos.
Es risible como la izquierda quiere transformar a este ladronzuelo en un prócer. Es increíble -se lo debemos a Duhalde- que esso personaje llenos de odio estén teniendo el poder y la presencia que tienen hoy -sobre todo en los medios-. Hay que limpiar esa roña de la faz de la patria.
A no engañarse por el número de la turba. Se trata de una minoría pequeñísima e insignificante. No son muestra de nada sino que esos que se vieron eran todos. Ocurre que son activistas, y los activistas son así, van a todos los actos.
ResponderEliminarLa gran mayoría de la gente estaba en sus trabajos, o en sus casas.
Anónimo de las 05:12 (pucha la hora): el P. Bouchacourt, el P. Calderón... no sé si esta selección es cajetilla, pero la que ud. propone es de sacristía. Los argentinos miran cada vez menos a los curas. ¿Ud. es uno de ellos?
ResponderEliminarTodas las omisiones detectadas fueron tenidas en cuenta, y más aún. Ya está en proceso la segunda parte.
Lupus
Lo que antes se dijo es cierto. Conozco gente que leyó todo Lewis pero no Antígona.
ResponderEliminarUn saber rengo. Un no saber.
Muy bueno, Lupus, pero no se entiende muy bien el criterio para incluir o no a algún personaje. No sé si el título se lo propuso a Ud. a Wanderer o no, pero si así fue, supongo que incluir como intelligentzía a personajes a los cuales casi no se les conoce la voz, no sé... Por ejemplo, ¿incluir a De Vido, a E. L. Duhalde, a Garré, a Moreno...? ¿o a Zecca que no lo conoce nadie excepto gente vinculada a la UCA o el seminario de Bs. As.?
ResponderEliminarYo incluiría como intelligentzía a quienes en medios culturosos e intelectualoides acaparan suspiros: à gauche se me ocurren Capusotto, Caparrós, Lanata, Víctor Hugo, Pagani, Aliverti, etc.; y à droite, Morales Solá, Nelson Castro, Aguinis, A. Posse, Massot, R. Fraga, Cachanosky, Rozitchner, etc.
Un collage, coronel, nada más. Ahí fue otro, con menos criterio que éste.
ResponderEliminarLupus
Le falto el compañero camionero, al cual le debemos el disgusto que ocasionó que el tuerto explote y , Horacito V que desde pasquín 12 marca tendencia surda.INDEC ALIVIADO
ResponderEliminarEste Tribunus lo vio desde lo que Uds. llaman el "interior" y desde la TV pareció realmente masivo, a juzgar que se trataba nada menos que un "político".
ResponderEliminarNi el acérrimo enemigo Clarín-TN dejó entrever que no fuera una concurrencia importante.
Desde la Provincia (que no necesariamente es la de Bs. As.) rogaría informen objetivamente quienes han sido testigos presenciales.
Tribunus Plabis.
Anónimo de las 18:03, Moyano y Verbitsky están.
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