La noticia apareció en medio de la turbulencia y de los ataques de pánico provocados por el triunfo de Trump y, por eso mismo, paso poco menos que desapercibida para muchos. Me refiero a la publicación de la carta con cinco dubia en relación al confuso texto de Los amores de Leticia que enviaron al Santo Padre algunos cardenales, los tres mosqueteros que en realidad son cuatro, en el mes de septiembre.
Algunos detalles para tener el cuenta:
1. Los cardenales firmantes no ocupan actualmente ninguna función específica lo cual les da mayor libertad dado que no pueden ser misericordiados. Sin embargo, Magister asegura que “no es un misterio que su apelación ha sido y es compartida por no pocos cardenales que están todavía en plena actividad, también por obispos y arzobispos de primer nivel, en Occidente y en Oriente, pero que han decidido mantenerse en las sombras”. Y esto lo sabe Bergoglio.
2. Si bien los cuatro cardenales firmantes no tienen “fierros”, como sí los tienen el cardenal Dolan de Nueva York o el cardenal Collins de Toronto firmantes ambos de la “carta de los trece”, son autoridades en lo suyo, y lo suyo es materia particularmente sensible en este caso: Burke es canonista, prefecto de la Signatura Apostólica antes de ser misericordiado; Brandmüller, reconocido historiador de la Iglesia; Caffarra, el teólogo más respetado durante el pontificado de Juan Pablo II y autoridad, si la hay, en temas de matrimonio y familia y, sorprendentemente, firma también el cardenal Maisner, emérito de Colonia y representante durante décadas del establishment episcopal alemán.
Luego de un mes de espera y de no obtener respuesta, los purpurados hicieron pública la carta, a fin de proceder según el mandato evangélico, y encerrar de ese modo a Bergoglio que, presumiblemente, debería dar una respuesta. ¿Qué tenemos hasta ahora?
1. El silencio del papa Francisco porque su respuesta exigiría, necesariamente, jugarse en un sentido o en otro, que es justamente lo que evitó hacer en Los amores de Leticia, donde apenas si incluyó una nota a pie de página que desató la confusión. A los tres mosqueteros cardenalicios no puede responderle lo que le respondió a los periodistas hace algunos meses cuando le hicieron una pregunta análoga: “Pregúntenle al cardenal Schönborn que es un gran teólogo”, les dijo. En este caso, Burke y su grupo le preguntan explícitamente a Bergoglio como sucesor de Pedro y maestro en la fe. Es él, y no otro, quien debe dar la respuesta.
2. Respuestas por elevación, que son las que le gusta disparar Bergoglio. En la audiencia del último miércoles habló de “soportar a las personas molestas”. Dijo: “Enseguida pensamos: «¿Cuánto tiempo tendré que escuchar las quejas, los chismes, las peticiones o las presunciones de esta persona?». También sucede, e veces, que las personas fastidiosas son las más cercanas a nosotros...”. Muchos consideran que estas palabras expresan la actitud que tiene el papa hacia los molestos preguntones.
O bien, lo que dice en el reportaje aparecido el viernes pasado en L’Avvenire. Dijo: “(Algunos tienen)... una concepción cristiana teñida de un cierto legalismo, que puede ser ideológico, con respecto a la Persona de Dios que se hizo misericordia en la encarnación del Hijo. Algunos -piense en ciertas réplicas a la Amoris laetitia- continúan a sin comprender; o es blanco, o es negro, incluso si todo sucede en el flujo de la vida donde se debe discernir”. El Papa Francisco prefiere permanecer en los tonos pastel, donde nada es definido, todo es difuso y casi todo es permitido. Y a ese colorinche él lo llama misericordia.
En en el mismo reportaje añade: “Otras veces se ve de inmediato que salen críticas aquí y allá para justificar una posición ya asumida, no son honestas, se hacen con espíritu malo para fomentar la división. Se ve de inmediato cierto rigorismo escondido de una falta, de querer esconder dentro de una armadura la propia triste insatisfacción. Si ve la película La fiesta de Babette existe ese comportamiento rígido”. También estas palabras parecen estar dirigidas a los cuatro cardenales, y esto lo piensa nada menos que un bergogliano de primera línea como Andrea Tornielli. En este caso, el papa recurre a la vieja táctica jesuita de descalificar al enemigo sin brindar argumento alguno. Los criticones lo que hacen es sembrar “mal espíritu” que conduce a la división. Nadie sabe bien en qué consiste el mal espíritu, pero lo importante es rotular con un epíteto que resulte fácilmente identificable y repudiable. Y, además, les adjudica una patología: esta gente debe tener algún problema interno que resuelven creándose una armadura. Por eso mismo, porque se trata de un caso patológico, hay que ser cuidadosos para evitar el contagio y no molestarse en responder sus argumentaciones. Notemos las fuentes teológicas a las que recurre Bergoglio para fundamentar su respuesta. La mención a una “armadura” hace referencia, sin duda, al viejo libro de autoayuda de Bob Fisher “El caballero de la armadura oxidada” y, de modo explícito, se refiere a la película de Gabriel Axel La fiesta de Babette, y pone a los cuatro cardenales en el lugar de Martina y Filipa, las dos rígidas solteronas protagonistas del filme. Como no podía ser de otro modo, el Santo Padre recurre a la interpretación comunísima y más que discutible de la película. Más allá de esto, es llamativa la profundidad y solidez de las argumentaciones pontificias...
En la homilía pronunciada durante la creación de los nuevos cardenales, habló de evitar "polarizaciones", las que cuales pueden infectar también a los cardenales. No apeló esta vez a la gama cromática del blanco y del negro, pero la idea es la misma. Para Bergoglio no hay sí sí, no, no; ni cosechas o desparrames, como enseña el Evangelio. Para él, todo es igual: prefiere navegar por el medio.
Todas estas respuestas indirectas, en el fondo, no hacen más desacreditar a Bergoglio. Justamente él, que ha reprochado duramente a la Curia y a los obispos por la merecida fama de "chismosos" y ha condenado los chismes y habladurías, ha caído en el mismo vicio porque, como bien afirma Marco Tossati, las respuestas por elevación terminan siendo puros chismes, es decir, el recurso de aquél que no quiere enfrentarse con su oponente y otorgarle la respuesta que con toda licitud reclama, y prefiere desacreditarlo con habladurías, aunque en este caso sean públicas.
En en el mismo reportaje añade: “Otras veces se ve de inmediato que salen críticas aquí y allá para justificar una posición ya asumida, no son honestas, se hacen con espíritu malo para fomentar la división. Se ve de inmediato cierto rigorismo escondido de una falta, de querer esconder dentro de una armadura la propia triste insatisfacción. Si ve la película La fiesta de Babette existe ese comportamiento rígido”. También estas palabras parecen estar dirigidas a los cuatro cardenales, y esto lo piensa nada menos que un bergogliano de primera línea como Andrea Tornielli. En este caso, el papa recurre a la vieja táctica jesuita de descalificar al enemigo sin brindar argumento alguno. Los criticones lo que hacen es sembrar “mal espíritu” que conduce a la división. Nadie sabe bien en qué consiste el mal espíritu, pero lo importante es rotular con un epíteto que resulte fácilmente identificable y repudiable. Y, además, les adjudica una patología: esta gente debe tener algún problema interno que resuelven creándose una armadura. Por eso mismo, porque se trata de un caso patológico, hay que ser cuidadosos para evitar el contagio y no molestarse en responder sus argumentaciones. Notemos las fuentes teológicas a las que recurre Bergoglio para fundamentar su respuesta. La mención a una “armadura” hace referencia, sin duda, al viejo libro de autoayuda de Bob Fisher “El caballero de la armadura oxidada” y, de modo explícito, se refiere a la película de Gabriel Axel La fiesta de Babette, y pone a los cuatro cardenales en el lugar de Martina y Filipa, las dos rígidas solteronas protagonistas del filme. Como no podía ser de otro modo, el Santo Padre recurre a la interpretación comunísima y más que discutible de la película. Más allá de esto, es llamativa la profundidad y solidez de las argumentaciones pontificias...
En la homilía pronunciada durante la creación de los nuevos cardenales, habló de evitar "polarizaciones", las que cuales pueden infectar también a los cardenales. No apeló esta vez a la gama cromática del blanco y del negro, pero la idea es la misma. Para Bergoglio no hay sí sí, no, no; ni cosechas o desparrames, como enseña el Evangelio. Para él, todo es igual: prefiere navegar por el medio.
Todas estas respuestas indirectas, en el fondo, no hacen más desacreditar a Bergoglio. Justamente él, que ha reprochado duramente a la Curia y a los obispos por la merecida fama de "chismosos" y ha condenado los chismes y habladurías, ha caído en el mismo vicio porque, como bien afirma Marco Tossati, las respuestas por elevación terminan siendo puros chismes, es decir, el recurso de aquél que no quiere enfrentarse con su oponente y otorgarle la respuesta que con toda licitud reclama, y prefiere desacreditarlo con habladurías, aunque en este caso sean públicas.
3. La defensa de los progresistas. Como no podía ser de otro modo, los progresistas en teología se comportan del mismo modo que los progresistas políticos. La defensa que han hecho de Bergoglio es muy llamativa y causa gracia. Su argumento más fuerte se reduce al siguiente: “¿Cómo se les ocurre a cuatro cardenales pedirle aclaraciones al Papa, ¡nada menos que al Papa!, que a nadie debe explicaciones”. Justamente los mismos que se rasgaban las vestiduras cuando, durante el pontificado de Benedicto XVI, alguien osaba reclamar algunas de las prerrogativas magisteriales pontificias, alegando que eso no eran más que rémoras del pasado, ahora se erigen en defensores acérrimos de la infalibilidad pontificia, aún en el magisterio ordinario, yendo mucho, pero mucho, más allá de lo que el mismo Vaticano I definió. Caso emblemático de todo esto son las columnas aparecidas recientemente en el sitio Religión digital.
El clarinetista Julio Algañaraz titula su informe sobre el sínodo advirtiendo que Francisco "cruzó a los cardenales rebeldes". Ahora está bien visto, parece, ser autoritario, enérgico y hasta cruel. A los ultraconservadores nada; ni justicia, habría dicho Perón. Lo curioso del caso es que una amplia mayoría de los lectores que comentan la nota están de acuerdo con Burke. Impensable hace un par de años: los lectores de Clarín le dan la razón "al cardenal rebelde partidario de Trump".
El clarinetista Julio Algañaraz titula su informe sobre el sínodo advirtiendo que Francisco "cruzó a los cardenales rebeldes". Ahora está bien visto, parece, ser autoritario, enérgico y hasta cruel. A los ultraconservadores nada; ni justicia, habría dicho Perón. Lo curioso del caso es que una amplia mayoría de los lectores que comentan la nota están de acuerdo con Burke. Impensable hace un par de años: los lectores de Clarín le dan la razón "al cardenal rebelde partidario de Trump".
4. La cancelación, en la práctica, del consistorio. Se trata de la respuesta más patética de todas y la que demuestra el grado de nerviosismo de Francisco y los suyos. El periodista Edward Pentin, corresponsal americano en el Vaticano, dio a conocer que "el Papa está hirviendo de rabia" debido a la carta de los cardenales. El caso es que el consistorio que se celebró el sábado pasado contó solamente con el acto público de creación de los nuevos cardenales. Tal como detallan algunos sitios, según lo establece el derecho canónico, (c. 353), en todo consistorio el papa debe mantener reuniones reservadas con todo el colegio cardenalicio a fin de tratar cuestiones del gobierno de la Iglesia, y es eso lo que se hizo siempre. Pero resulta que ahora, con un pontífice que se la pasa hablando de sindalidad, colegialidad y diálogo, cancela las reuniones en las que podía darse ese intercambio enriquecedor de ideas entre el sucesor de Pedro y sus colaboradores más inmediatos. Según se especula, y es la única explicación razonable, el papa Francisco no quiso enfrentarse al colegio cardenalicio porque debería haberse expresado, y esta vez sin recurrir a libros de autoayuda o películas taquilleras, sobre las dubia planteadas por los “tres mosqueteros”. Y sabe también que a los cuatro cardenales se le habrían sumado muchos más, y sabe finalmente que no habría sabido qué responder y que los machetes que pudiera haberle pasado Tucho Fernández no le habrían servido de nada.
¿Qué hará Bergoglio? Yo creo que, jesuíticamente, no hará nada. No responderá la carta, no se reunirá con cardenales peligrosos y seguirá mirando para otro lado, rodeándose del aplauso de la prensa laica y de sus secuaces progresistas.
¿La publicación de la carta de los cardenales no servirá de nada? A los fines inmediatos que perseguía, no, porque Bergoglio no responderá. Sin embargo, creo que tendrá un efecto positivo a mediano plazo. La autoridad y peso de los cardenales que la suscriben terminará de abrirle los ojos a otros miembros de la jerarquía sobre el rumbo que Francisco le ha impuesto a la Iglesia, que termina en su disolución, y actuarán en consecuencia. Quizás tímidamente; quizá con un poco más de estridencia, pero servirá, creo yo, para que en el próximo cónclave los cardenales piensen muy bien el nombre que escriben en la papeleta. Y un buen ejemplo de esto lo podemos ver en la elección de las autoridades de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, que se realizó el martes pasado. Se la entendió como un referendum sobre el papa Francisco y, una vez más, perdió. Todos los puestos fueron ocupados por los obispos más alejados de su pensamiento. Mons. Cupich, su preferido, arzobispo de Chicago, creado cardenal el sábado ni siquiera estuvo entre los nominados. Magister escribe un buen análisis de la situación.
Escolio: Yo tengo un dubium. ¿Por qué los Tres Mosqueteros hicieron públicas sus dubia apenas pocos días antes del Consistorio? ¿No habría sido más eficaz pedirle al Papa que respondiera delante de todo el Colegio Cardenalicio?
Posibilidad 1: Burke es un pésimo estratega político; fue un error debido a su impericia. En última instancia, lo que quería era que se hicieran públicos los errores doctrinales de Bergoglio.
Respuesta: Es verdad que al cardenal Burke le falta cierta sagacidad propia del hombre político. Varias veces se ha ido de boca y ha terminado perjudicado. Pero no puedo pensar que la decisión de publicar las dubia haya sido tomada en solitario. Entre los cuatro firmantes, Meisner y Caffarra -sobre todo el primero-, son personajes político experimentados. Por otro lado, es inverosímil que los cuatro se hayan cortado solos; creo más bien, y es lo que afirma Magister, que detrás de ellos hay muchos más y, lo más lógico es que entre ellos estén los trece que firmaron la famosa nota durante el sínodo. Si es así, la publicación de los dubia seguramente fue consultada con varios de ellos, al menos con los más poderosos. Y Dolan no es ningún ingenuo. Yo creo que lo pensaron bien. Por eso me inclino por la
Posibilidad 2: Fue una encerrona a Bergoglio. Si las dubia no se publicaban y encaraban al Papa en pleno consistorio exigiendo una respuesta, lo más probable hubiese sido que éste pateara la cosa para adelante, como hace siempre. "La Congregación para la Doctrina de la Fe se está ocupando del asunto. Les pido un poco de paciencia", podría haber sido su respuesta. Y las tres mosqueteros no habrían obtenido nada, si siquiera la simpatía de los otros purpurados que los habrían mirado como violentadores del Sucesor de Pedro. Y no podrían haber publicado la carta.
Al publicarse las dubia, a Francisco le quedaban dos opciones: seguir adelante con el Consistorio tal cual estaba previsto, es decir, con las reuniones con todo el Colegio, o suspenderlas.
En el primer caso -es decir, si se hubieran realizado como corresponde y como siempre se hizo reuniones del Papa con sus cardenales-, todos los purpurados estarían al tanto de las preguntas y esperarían una respuesta. No se habrían conformado con una dilación. Y la respuestas eran muy simple: Sí o No. Y Bergoglio no podía darlas. Ni siquiera la astucia y doblez en las que fue entrenado en la Compañía le habrían servido en la ocasión. ¿Le iba a decir a Kasper que hablara por él? Imposible. Las preguntas las debía responder él y solamente él, y cualquiera hubiese sido la respuesta se hundía.
En el segundo caso -suspender el Consistorio dejando solamente la parte ceremonial que fue lo que finalmente hizo- fue, creo yo, el peor error de Bergoglio y el mejor batacazo de los tres mosqueteros a mediano plazo. Ha quedado públicamente demostrado, al menos a ojos de los cardenales y obispos del mundo entero, que Francisco es un autócrata caprichoso, que le importa un bledo la colegialidad y el diálogo con los que se llena la boca y que, consecuentemente, le importa un bledo la opinión de sus hermanos en el episcopado. Es decir, perdió credibilidad, y la perdió muy feo.
Por supuesto que los obispos progres seguirán prendidos a su pollera transparente, simplemente por una cuestión ideológica. Pero los que están en el medio; los que aún tienen fe y buenas intenciones pero seguían creyendo todo el verso bergogliano, y que son la mayoría, comenzarán a mirarlo con desconfianza: el Sucesor de Pedro es incapaz de responder cinco simples preguntas que, con todo derecho, le hacen algunos de sus cardenales. Y no solamente eso, sino que ningunea a todo el Colegio y a sus opiniones. Para muchos, este traspié significará también una caída estrepitosa de la imagen de Bergoglio.
Los cuatro cardenales dubitativos han suspendido sobre la cabeza del Soberano Pontífice una espada de Damocles. De esta no saldrá fácilmente, sencillamente porque no tiene modo de salir. Como explica Marco Tossati, responder a los cardenales diciendo que aquel que está en pecado mortal objetivo (con todos los atenuantes del mundo) puede comulgar es romper con todo lo que la Iglesia enseñó hasta ahora. Lo de Bergoglio con el sínodo y la Amoris Laetitia fue una avivada, pero la avivada de un puntero peronista, con las patas muy cortas: no contaba con las dudas cardenalicias.
Lo positivo se verá en el mediano plazo (que esperemos que sea lo más mediano posible), es decir, en el próximo cónclave. Tal como se están dando las cosas, podríamos llevarnos una grata sorpresa.
¿Qué va a pasar? Nada, porque ya pasó. No creo que haya una aclaración sobre la cuestión de los recasados porque, cualquiera que fuese, no haría más que oscurecer el panorama. Lo que pasó, y esto es lo más trascendente, es que Bergoglio perdió, y perdió mal. Ya no solamente seremos los argentinos quienes abramos los ojos acerca de quién es verdaderamente este personaje, sino que serán los obispos del mundo entero (excepto los argentinos, por cierto) quienes sabrán con qué buey están arando.
En definitiva, Bergoglio volcó.
Bergoglio odia el decir Si o No, su zona preferida es el gris tal como lo acaba de decir. Todo un personaje gris, en medio de un Colegio gris, una Iglesia gris y de un pais gris.
ResponderEliminarAlt-Right de Flores City
Yo solo puedo acordarme del Salmo 2, que dice:
ResponderEliminar4 Qui habitat in caelis, irridebit eos,
Dominus subsannabit eos.
5 Tunc loquetur ad eos in ira sua
et in furore suo conturbabit eos
¡Saludos!
Wanderer,
ResponderEliminarse me ocurre que si el tema de las dubia no se disolviera solo, y se convirtiera así en una espina ineludible para la Santa Sede, una respuesta que esta podría llegar a dar -sin verse obligada a responderlas de modo directo y claro- sería convocar a un Concilio Vaticano III, para que sea la Iglesia en su conjunto la que deba asumir la responsabilidad de responder las dubia, y definir así si quiere o no asumir un cambio doctrinario.
Cualquiera fuera la respuesta que un Concilio Vaticano III diera al tema de la comunión sacramental de los divorciados vueltos a casar, la Santa Sede saldría bien parada.
Hay otro tipo de consistorios: Los de las causas de beatificación o canonización. En uno de ellos, a los cuales obviamente no acuden todos los cardenales sino los que están en ese momento en Roma, fue que renunció Benedicto.
ResponderEliminar¿Y qué tal que uno de los próximos Francisco nos dé la sorpresa? Y por "sorpresa" no quiero decir que responda a los 4 cardenales...
Wanderer, no sé a cuál artículo de Algañaraz se refiere, pero el que veo en estos momentos dice exactamente lo mismo que el que cité de La Capital de Rosario: es una conspiración y el Papa respondió.
ResponderEliminar"El Papa les respondió a los cardenales rebeldes que encabezan una revuelta en su contra"
"Agredido por una conspiración de cardenales y sectores eclesiales de ultraderecha que lidera el cardenal norteamericano Raymond Burke, un abierto partidario de Donald Trump, el Papa Francisco aludió claramente a la situación que se vive en las cumbres de la Iglesia, debido al “virus de la polarización y la enemistad”, al crear esta mañana en la basílica de San Pedro a 17 nuevos cardenales, 13 de ellos electores en el próximo Cónclave que elegirá a su sucesor, por ser menores de 80 años de edad.
Jorge Bergoglio debió suspender sin hacer anuncios los dos días previos a la ceremonia de hoy, en la que el pontífice argentino debía encontrarse en el Consistorio con los cardenales presentes en Roma. Esto ocurrió en febrero de 2014 y 2015. Pero el ataque de Burke y otros purpurados obligaron al Papa a no hacer la reunión para evitar “situaciones embarazantes”, como dijo una fuente a Clarín."
Estimado Wanderer,
ResponderEliminaréste es un off-topic, que tiene relación con el asunto de los progre y de las naturalezas que estos niegan (y con cómo esa forma de pensar ha infectado al catolicismo). Hoy, La Nación publicó un artículo sobre una hermana Carmelita Descalza de Neuquén, que trabaja para sacar travestis de la prostitución. Claramente lo que esta monja hace es una obra de amor, y creo que pocos estaríamos dispuestos a meternos en ese lodazal para rescatar seres humanos como ella lo hace. Y por eso que hace, merece el mayor de los respetos.
Lo que me chocó es que una monja Carmelita Descalza, una católica, afirme: "La vida de una travesti, de una mujer trans, como a mí me gusta llamarlas, es muy triste. Muy dolorosa. Ellas desde que nacen, o desde que deciden un cambio, sentirse mujer y manifestarlo a la familia, ya empiezan a ser lastimadas". ¿Puede ser que esta monjita -tan evidentemente llena de amor a su prójimo y de auténticas buenas intenciones- tenga en su cabeza tal bruma mental que no se dé cuenta de que está en presencia de un hombre, y no de una 'mujer trans'?. ¿O se da cuenta, y prefiere seguirles el juego con la mentira que estas personas se han creado, creyendo que siguiéndoles el juego de la mentira les hace un bien?. Y luego aparece un Obispo (Mons. Bressanelli), que tampoco aclara los tantos.
Estoy empezando a creer que el problema de fondo del catolicismo no es de Fe. Me parece que en el fondo de nuestros problemas hay una falla en la Razón.
Hermana Mónica Astorga
Haga lo que haga ya perdió toda credibilidad, creo que nadie le toma en serio. No se `puede un día decir una cosa otro día la contraria para el tercer día decir que le manipulan. Le gusta que manipulen sus palabras porque si la primera vez que dió a Scalfari una entrevista y le manipularon no vuelve a dar ninguna se acabó el problema, pero le gusta estar en el candelero.
ResponderEliminarMuchas cosas le salen mal, viajes que los venden como un éxito no lo son y desde luego a Europa ni viaja ni piensa viajar porque sabe que no llena.
Bergoglio está en la "cresta" de su ola construida con los favores del mundo y no pocos obispos y cardenales, y creen que va a renunciar porque 4 cardenales le presentan una dubia? En serio creen que un hijo de la Companía es tan débil (políticamente)?
ResponderEliminarUn Concilio para la dubia?
Creo que a algunos se les está yendo la mano y la dubia la va a "resolver" en la próxima entrevista, y que tenemos pontificado para rato con este Papa.
Suena como la opción de mayor sentido común.
Por lo menos, ya van dos años.
EliminarAnónimo de las 16:44,
ResponderEliminarpara los católicos que rechazan el Principio de No Contradicción -que son la enorme mayoría-, Francisco las dubia ya las resolvió. De hecho, para ellos, las dubia nunca existieron.
El tema es si piensa hacer algo con los poquísimos católicos que aún aceptan el Principio de No Contradicción.
"la vieja táctica jesuita de descalificar al enemigo sin brindar argumento alguno"
ResponderEliminarEsto es más bien una táctica de Gramsci, o de la Escuela de Frankurt, o de Saul Alinsky. Los jesuitas no fueron tan cínicos, y menos los de antaño.
Dark Henry, en todo caso, los jesuitas le enseñaron la táctica a Gramsci y cía. La Compañía siempre fue igual. Fíjese la enorme bajeza y doblez, mentira y crueldad con la que se comportaron en el siglo XVII con los rotulados como "jansenistas".
ResponderEliminarEstimado Wanderer:
ResponderEliminarEn cuanto al momento escogido para publicar el documento, pienso que antes habría sido imposible, pues en cualquier hito previo Bergoglio podría haber tratado a los cardenales de precipitados, por pretender adelantarse al Sínodo, a la Exhortación o a la aplicación de la misma por los Obispos. Ahora que ha quedado en evidencia el resultado de todo esto, los signatarios tenían todos los antecedentes de hecho suficiente -aparte de los argumentos doctrinales- para hacer presente el asunto sin temor a ser defenestrados a la primera.
Así efectivamente fue una encerrona a Bergoglio. Él, que creyó ser más astuto que todos y que seguramente pensó que los tradicionalistas y conservadores reaccionarían de modo histérico y destemplado, se ha topado con unos pocos cardenales que lo han enfrentado con respeto pero con firmeza y dando la cara, porque quizás antes habría sido impertinente. Se creyó sus propias caricaturas, ahora está acorralado por causa de su propia soberbia, y no importa que responde si o no o que siga pateando el asunto indefinidamente, pues cualquier elección le traerá costos.
Paralela a la actitud de Burke y cia., están las del Cardenal Sarah, ejemplo de humildad cristiana ante las ofensas groseras que ha recibido, y de Monseñor Fellay, que dio un pequeño golpe mediático con el nuevo seminario de EE.UU. ¿Podrá Bergoglio pelear una guerra en todos los frentes?
En cuanto a la reacción de los progres -en particular de Religión Digital- confieso que la he disfrutado casi con sadismo jejejejejej. Resulta asombrosa la cantidad de sofismas que Vidal se gasta en atacar a Burke: ataques ad hominem, la enesima invocación al Concilio, apelaciones a la compasión, más una cantidad impresionante de frases vacías, sin ningún argumento digno de tal nombre. Lo he dicho antes: a diferencia nuestra, ellos no tienen Fe ni Esperanza (solo son “seguidores de Jesús” según sus propias palabras), por lo que esperan todo de los medios humanos y ven que esos medios no están dando el resultado previsto.
ResponderEliminar"que va a renunciar porque 4 cardenales le presentan una dubia?"; efectivamente, la carta de los 4 cardenales por si sola no va hacer que bergoglio renuncie, pero serán otros factores que harán que bergoglio renuncie.
"tenemos pontificado para rato con este Papa"; yo lo dudo mucho, bergoglio ya ha dado muestras de cansancio y de problemas de movilidad cada vez mas evidentes. a eso hay que añadir el cabreo de la curia, de muchos cardenales y obispos con bergoglio, teniendo en cuenta eso y siendo extremadamente optimistas, bergoglio duraría como papa hasta 2020 o 2021, ya sea que renuncie, que le hagan renunciar o que termine su ciclo biológico de vida.
Wanderer,
ResponderEliminarEn otra mota reciente Mons. Burke dice que si el Papa no responde entonces tocará a los Cardenales hacer un acto formal de corrección:
http://infovaticana.com/2016/11/16/urgente-burke-advierte-papa-no-aclara-la-confusion-haran-acto-formal-correccion-error-grave/
Saludos.
Pedro de Portocarrero, desde Moguer
Que no renuncie que vamos a tener que fumarnoslo aca como Papa jubilado y lider del peronchismo renovador kirchnerista.
ResponderEliminarBenigno
Parece que no habrá prelatura para los curas de la Frate. A cambio, Su Santidad les prorroga indefinidamente las facultades para confesar.
ResponderEliminarDe veras lo siento: por la Iglesia y por las almas. Aunque me alegro por esos buenos curas que podrán seguir tranquilamente como hasta ahora, sin mayores injerencias.
Man with no name: me parece un delirio la especulación que propone. Después de JPII hecho una piltrafa por el Parkinson puedo esperar cualquier cosa de Bergoglio... ¿o realmente cree que va a dejar el poder así nomás por la oposición de la Curia y unos obispos "carcas"? Él es Papa de la Gente, no del clero. El clero no merece ni en su mayor dignidad (cardenalicia) una reunión con él. Salvo que sean curas borrachos, chorros o ex-curas.
ResponderEliminar2020? Sigo creyendo que tenemos para 6 o 7 años mas (si renuncia). Si no renuncia capaz tengamos para una década ganada más.
Si Bergoglio no responde entonces que le pregunten al Papa Emerito y ahi si veremos a dos Papas enfrentados?
ResponderEliminarSi Bergoglio no responde entonces que le pregunten al Papa Emerito que piensa. Veremos ahi dos Papas enfrentados segun las profecias?
ResponderEliminarAyer lei el articulo del diario clarin. Y me parecio la bost... mas grande del mundo. Pero hoy conoci "religion digital", causa del link que dejo ud. ¡Que bost....!!!
ResponderEliminarY yo que solo habia conocido aciprensa hasta ahora. Hay cosas peores!
Sería interesante un análisis sobre una serie que se llama The young pope. El papa (Pío XIII) es un autócrata de ideas opuestas a Francisco pero de comportamiento similar.
ResponderEliminarUn jesuita jamás deja el poder. Bergoglio nunca renunciará.
ResponderEliminar"Veremos ahi dos Papas enfrentados"
ResponderEliminarDios mío, esto va en la misma línea del exabrupto delirante de Gänswein sobre el "ministerio petrino ampliado". Cuánta pavada...
"Sería interesante un análisis sobre una serie que se llama The young pope."
ResponderEliminarEs una basura completa. No vale la pena mirarla ni para reírse un rato de lo ignorantes y common place que son guionista, director, etc.
The Borgias por lo menos tiene cierto nivel de trama, contexto histórico y presupuesto, más allá del porno gay y todos las perversiones habidas y por haber. Incluso hasta tiene algunas sorpresitas en cuanto a planteos morales o a escenas litúrgicas.
Pues si Bergoglio dictó los Amores de Leticia esparciendo confusión acerca de los sacramentos del matrimonio y la Eucaristía, y no se espera que aclare nada, y sigue dedicado a demoler la Iglesia de muchas maneras, prodigando nombramientos nefastos, y tampoco cabe esperar que renuncie..., no sé qué significa que «Bergoglio volcó».
ResponderEliminarque daño le hace esto a la Iglesia, pienso en quienes con sincero corazón siguen a jesucrito y ven estos escándalos y confusiones, uno ya sabe que está todo dicho y escrito, aunque igual obvio es muy bueno que nos reafirmen en la Fe desde las jeraquias, pero quienes se están acercadon a la Iglesia y ven esto, como podran creer después en los pastores de la Iglesia?, terrible daño
ResponderEliminarConsecuencias de esta carta:
ResponderEliminar- el clero: 90% no les interesa ningún argumento o prueba, "el Papá es re copado y punto. A que hora sirven el café con masas finas ?"
-el pueblo: no se entera y si alguien es tan marciano de avisarles de la existenxia de dubias le dirán con mayor o menor claridad "me chupa un huevo, Francisco es re copado y punto. A que hora juega sacachispas ?"
...lo mismo q la carta de los 13 cardenales, q el breve examen critico de la misa pal pueblo y q el obispo indignado injustamente excomulgado, ni livieres, ni franciscanos de la inmaculada, etc etc
Es un líder político mundial y la gran mayoría de las almas solo quieren pasarla bien , no conozco a nadie fuera del tradicionalismo q le importe un bledo estos temas.
Consecuencias sobre las almas: dado otra valiente proclamación de la verdad de 4 cristianos mayor número de almas no podrán defenderse con ignorancia insalvable frente al tremendo juicio que nos espera.
Ciertos tes u otras infusiones han probado su eficacia contra el habito de no renunciar. Benedicto se dio cuenta de esto a tiempo.
ResponderEliminarAlt-Right de Flores City
GASTÓN: Don Wanderer creo que ya he comentado sobre esto antes pero de nuevo -desde la gratitud y admiración por lo que nos aporta su blog- le tengo que manifestar que habiendo conocido en mi juventud algún jesuita como el P.Jesús Solano y algo de Historia de la Compañía desde la biografía del Fundador hasta la de los Mártires del Canadá, por ejemplo, no veo justificada su antipatía -creo que es la palabra justa- a esta institución. Por lo demás y en cuanto a la mentalidad Jorge M. Bergoglio no tiene nada en común con los jesuitas ignacianos clásicos salvo algún que otro defecto que aquellos tuvieran.
ResponderEliminarOtra cosa sería la realidad actual de lo que -con manifiesta falsedad- se sigue llamando Compañía de Jesús. Aunque esto valdría probablemente para todas, o casi, las órdenes y congregaciones religiosas.
Ricardo Algorta, no lo crea. Por lo que se ve en los comentarios en Clarín y La Nación, Francisco es cada vez más despreciado. Son pocos y cada vez menos los que piensan que es "un copado", por lo general solo peronistas de izquierda y por motivos políticos-ideológicos.
ResponderEliminarAlgunos en este blog viven en una burbuja.
ResponderEliminarHace varios años, un gran amigo perteneciente a una familia de gobernantes peronistas del norte, me dijo una de esas frases -las que te dan calle- que los define a los peronistas -y encima mi amigo no estaba hablando de un cargo público, sino de un cargo en una cámara empresaria-:
"Yo no renuncio absolutamente a nada, que me echen, renunciar nunca".
Renunciar es de radicales y milicos, los peronistas y conservadores no renuncian, a lo sumo los echan.
Saludos,
Anónimo de 21 de noviembre de 2016, 9:34:
ResponderEliminarLa prórroga indefinida para la Confesión es una medida de "buena vecindad" del Papa para la FSSPX. Los analistas de uno y otro lado afirman que la ventaja (el tiempo) está del lado de Roma, que es cuestión de esperar.
Yo, por el contrario, diría que éste es un indicio de "política de Estado".
Lo que me parece insólito es que supliendo indefinidamente la jurisdicción ordinaria para la Confesión, no se hable también del matrimonio, que necesita también del elemento de territorialidad. Capaz que llega para Navidad con un moño.
http://remnantnewspaper.com/web/index.php/articles/item/2888-il-boom-cardinal-dubia-and-roman-schism
ResponderEliminarIs this the beggining of the end?
En cuestión de matrimonio, no creo que la Iglesia conceda nunca a la Fraternidad una jurisdicción que tampoco llegaría a tener aunque fuese reconocida canónicamente como prelatura personal. Si acaso, facultará a estos sacerdotes para que puedan casar a los fieles que lo pidan, pero actuando en representación de los párrocos territoriales. El expediente se instruirá en una parroquia y el matrimonio se inscribirá en sus libros. Y la jurisdicción para entender sobre nulidades será la ordinaria, sin que los fieles lefes tengan fuero especial, es decir: el tribunal diocesano (con sentencia ejecutiva a la primera, aunque se pueda apelar) o su alternativa, el proceso Mitis Iudex (también diocesano). Si hay «divorcio católico» —y parece que lo hay— será para todos los católicos y lo repartirán los obispos territoriales.
ResponderEliminarMe permito desafiar la lógica wanderiana:
ResponderEliminar"Campora al gobierno, Peron al Poder"
Bergoglio podría encontrar alguna marioneta. Candidatos sobran.
¿Corre el tiempo a favor de Roma? No me parece
ResponderEliminarSi Bergoglio fuera tan astuto como creíamos que era, habría lanzado de inmediato la regularización canónica, unilateral incluso, de la FSSPX. Todavía podía ganar tiempo encorsetando a los tres obispos en un andamiaje jurídico donde lograría un margen de control sobre seminarios, prioratos y comunidades religiosas. Fellay habría tenido que aceptar so pena de parecer ingrato y desdecir su discurso de los últimos 5 años a lo menos.
Sin embargo, la indefinida concesión jurisdiccional no compromete para nada a la FSSPX –al menos oficialmente- y libera quizás el mayor lastre para superar los escrúpulos de muchos que tal vez iban a la misa pero debían confesarse con curas progres infumables o neocon algo sectarios. Para el grueso de los fieles tradis la cosa sigue igual y de hecho mejora: llegan nuevas familias, nuevas vocaciones y la respetabilidad de la Frate crece entre otrora fanáticos juanpaulistas.
La Frate seguirá haciendo lo que ha hecho todos estos años –liberada ahora de incomodas alianzas políticas como en los 70 y 80-, mientras que Bergoglio y su sequito están atrapados en la dinámica que les exige hablar día tras día para llamar la atención. Dejenlo una semana un silencio y se desinfla todo, no hace falta echarlo, ni que renuncie.
Al anónimo de las 11.45 sólo le digo dos cosas: la primera es que se trata de una pregunta y como tal conlleva posibilidad de una u otra más no es afirmación, y lo segundo es que no creo sea un lugar este para responder de esa forma con su "pavada".
ResponderEliminarRicardo Algorta,
ResponderEliminarme parece muy acertado su análisis. Ahora bien, ¿quiere realmente la gente una iglesia 'copada', con una jerarquía 'copada'?. ¿Es eso lo que realmente buscan?.
Porque para religión 'copada', es mucho más 'copada' la Anglicana. Y esto para no mencionar a sus primos, los Episcopalians de USA, que son realmente 'copadísimos' (obispos gays conviviendo con sus parejas, sacerdotisas lésbicas, divorcio normalizado, matrimonio gay en todos sus gustos, anticoncepción normalizada, aborto tolerado, comunión para todos y todas -en Canadá hasta le han dado la comunión a un perro-, etc.). Y sin embargo, parece mentira, pero cuanto más 'copadas' se ponen las religiones, menos fieles consiguen convocar (de hecho, el anglicanismo se está extinguiendo. Y -a todo fin práctico- casi ha dejado de existir como religión). Porque la gente puede parecer tonta. Pero se ve que no lo es del todo. Y sacan -rápidamente- la evidente conclusión de que para dar rienda suelta a todas y cada una de mis pulsiones y de mis instintos, no necesito de un grupo de ancianos con vestimentas del Bajo Imperio Romano que me estén diciendo a cada paso que todo lo que a mí se me ocurra hacer siempre estará bien.
Pasa que los 3 Obispos ya están con un pie adentro. Ahora, dicen los más mala leche, falta el clero bajo. Algo de verdad en eso habrá.
ResponderEliminarLefe estepario, le comento que fuera de "la Frate" hay muchos --muchísimos-- sacerdotes que son excelentes confesores y no son ni progres infumables ni neocones sectarios. Los neocones en general son de instituto/ congregación religiosa. Y los progres infumables tampoco son la mayoría: muchos son fumables.
"Un jesuita jamás deja el poder. Bergoglio nunca renunciará".
ResponderEliminarWanderer: los últimos prepósitos generales de la Compañía de Jesús, desde Arrupe, han renunciado al cargo. Renunciaron Arrupe, Kolvenbach y Nicolás.
anonimo de las 20 14. Me refería a una situación que puede aquejar muchos fieles. Al menos yo agradezco que entre mis confesores habituales hay un Opus, y es excelente
ResponderEliminarComparto el comentario del Sr Ricardo Algorta. A nadie le importa nada. De los que vamos a Misa cada domingo, menos del 5 % sabemos lo de los cuatro cardenales.Yo le mande´ a mi cura Parroco un articulo de Adelante la Fe sobre el tema, y el tipo evita darme una respuesta.
ResponderEliminarLa doctrina Catolica es cosa nuestra. El cura estupido este me dice que yo hablo de cosas antiguas. Bergoglio se sigue moviendo con astucia diabolica. No es de el, tanto "talento" para la destruccion de la Santa Madre Iglesia.
El Petiso Diaz (a) 21 de junio ( el mas corto de los Diaz)
NetflixMan:
ResponderEliminarpor el contrario me parece que la serie en medio de lugar comunes imaginados y mucho compenente yankee, tiene elementos que merecen un análisis.
Un papa que casi no cree, que tiene sin embargo conciencia de su poder absoluto, que manda al cuerno a los cardenales molestos a sus fines, que se escapa a la ciudad para comprar cigarrillos...
En fin, un Francisco pero desde otro ángulo al descubierto.
Ramón
Al grupo de obispos de Buenos Aires le respondió el mismo día ¿habrá estado convenido de antemano entre Francisco y Tucho la respuesta? (ironía).
ResponderEliminarhttp://infocatolica.com/?t=noticia&cod=27827
ResponderEliminar"Mons. Józef Wróbel, obispo auxiliar de Lublin (Polonia), muestra su apoyo a los cuatro cardenales que han solicitado al Papa que responda a cinco preguntas (dubia) sobre la doctrina de la Iglesia tras la publicación de la exhortación Amoris Laetitia. El obispo polaco cree que la exhortación «está mal escrita» y por eso se producen tantas interpretaciones".
Un Obispo más, el miedo se está perdiendo.
ResponderEliminarEn los comentarios de Infocatólica, la redacción dejó este mensaje:
InfoCatólica
De ahora en adelante InfoCatólica no dará paso a comentarios que traten al Papa de forma inapropiada al referirse a él. No se le debe llamar solo Bergoglio, ni hablar de la Iglesia de Bergoglio o adjetivar dicho apellido.
Velay que la Leticia había sido una 125.
ResponderEliminarEl Pulpero de la Recoleta
Comentario sin relación al artículo. La concesión de la facultada a los sacerdotes para absolver el pecado de aborto, en la era del aborto químico (anticoncepción abortiva) semeja al solemne acto Cristinista de abrogar el Rubro 59 en plena era de internet...más populismo.
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ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con InfoCatólica ......
Los de Infocatólica tienen cola de paja. Venían bien, pero hoy se descolgaron con ese mensaje. Se ve que la gente se estaba zarpando bastante en los comentarios, ellos le estaban tolerando bastante, y ahora alguien les bajó línea. Nunca vi que se ofendieran porque alguien le decia Wojtyla a JPII o Ratzinger a BXVI...
ResponderEliminarMons Wrobel dijo eso, que la Exhortación está mal escrita, así sin eufemismos? Todavía quedan obispos valientes...
ResponderEliminar¿Y desde cuando es inapropiado llamar a alguien por su apellido? Francamente ridículo
ResponderEliminarEntiendo que para algunos hablar así tiene un tono sedevacantista. Acaso no leen Historia -o al menos vean las series históricas- y captarán que a los Papas se les llamaba por su apellido y que nobles y pueblo lo respetaban en cuanto Pontífice pero como persona natural podían darse el lujo de hablar pestes de él.
La papalatria conservasdora se resiste a morir
¿Cuál será la razón para no dirigirse a él, como Su Santidad, Papa?
ResponderEliminarHa ido labrando mucha desconfianza y poca empata hacia su persona
No se le debe llamar solo Bergoglio, ni hablar de la Iglesia de Bergoglio o adjetivar dicho apellido.
ResponderEliminarAcaban de censurar a cientos de santos, beatos y venerables que en la historia de la Iglesia se han referido a un Papa por su nombre en el siglo; lo que no tiene absolutamente nada de malo.
Bueno, es lógico que le pongan coto ahora y no antes. Wojtyla o Ratzinger no eran malas palabras, pero Bergoglio sí lo es. Hay que escribir púdicamente B***.
ResponderEliminarSe puede referir uno a él como "You-Know-Who", o como "He-Who-Must-Not-Be-Named".
ResponderEliminarAntes de ser exaltado al solio pontificio, en Buenos Aires le llamaban Judas B. Es una forma de evitar la mala palabra que empieza por B.
ResponderEliminarSe le puede llamar de muchas maneras. Como decía otro argentino, llamado por mal nombre el Cura Loco, «todas las cosas feas tienen muchos nombres».
ResponderEliminarPío XII decía de sí mismo "sono Papa Pacelli".
ResponderEliminarTiene su gracia que el escrúpulo onomástico de llamar al Papa por su apellido se haya suscitado precisamente en la web donde acuñaron aquella denominación calumniosa, aquel epítome de falacia y malevolencia, que fue la nota de «filolefebvristas» para motejar a los católicos demasiado católicos, y que sonaba a los píos oídos de sus lectores como una censura teológica, algo así como la nota de hæresi próxima. Con esa sola palabra, se daba por supuesto que una calificación muy negativa recaía sobre las enseñanzas de Lefebvre y de los lefebvristas, y además la sospecha se cernía difusamente sobre todo aquel que manifestase alguna afinidad hacia ellos. Con aquel invento el P. Iraburu, indigno sacerdote, se acreditó como un grandísimo canalla: un canalla con ingenio y poca vergüenza. Merecedor de la nota teológica de Bergoglim spiens.
ResponderEliminarvolviendo al tema inicial, la cosa ahora adquiere ribetes comicos
ResponderEliminarhttp://infocatolica.com/?t=noticia&cod=27833
"El presidente de la conferencia episcopal católica griega acusa a los cuatro cardenales de cisma y herejía"
Recuerda esas sesiones del Comité Central soviéticos cuando todas los cortesanos de Stalin se peleaban por destrozar a los caídos en desgracia. Penoso
¡El pollo se llama Frangkiskos Papamanolis! Como para hacer chistes... Predestinato, predestinato!
ResponderEliminarEl celoso obispo griego que ha fulminado excomuniones contra los cuatro cardenales lleva el muy hilarante nombre de Papamanolis. Realmente evocador, no solo por aludir al Papa sino también a las manolis, que al menos para el hablante español son toda una categoría sociológica: la de esas señoras de mediana edad y bajo nivel cultural, pobladoras de los suburbios de la mitad sur de España, bastante vulgares, gritonas y desenvueltas, pero dotadas a veces de cierta chispa castiza y popular.
ResponderEliminarDebería quedarles el nombre de papamanolis a esos ardorosos defensores de Su Santidad que, con exceso de celo y de obsecuencia, descalifican como «enemigo del Papa» a cualquier católico que se atreva a sostener la doctrina católica.
Podríamos hacer un elenco de las papamanolis que vociferan entre la jerarquía eclesiástica y los medios de comunicación, y llevar un top ten de ellas, puntuándolas mediante votación democrática, y hasta elegir a las Reinas de las papamanolis en sus diferentes categorías.
En la categoría de corresponsales de prensa, la corona de Reina de las papamanolis va a estar reñidísima entre la argentina Elisabetta Piqué (de La Nación, casada con un cura défroqué) y el español Juan Vicente Boo (del ABC, numerario del Opus Dei).
Conviene que Francisco no responda -y parece que está encaprichado- y que el colegio cardenalicio se preocupe más y abran los ojos y en el próximo cónclave elijan uno que sí responderá la dubia fuerte y claro. Necesitamos más que nunca la autoridad del papado en su magisterio extraordinario para desterrar el progresismo que se ha instalado en la Iglesia y se cumplirán las palabras de Cristo: no prevalecerán!
ResponderEliminarEstaba esperando y rezando por esto hasta que por fin llegó y si añado las derrotas del progresismo político pues lo estoy disfrutando muchísimo.
Beatriz
Por un momento, al leer la noticia del Obispo griego, pensé que eran los Ortodoxos griegos los que estaban a acusando a Burke de Cisma....
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ResponderEliminarLefe estepario
La palabra " Bergoglio " ha sido " prostituida para un uso peyorativo .....Ha sido " adjetivizada " como lo afirma InfoCatólica..
ResponderEliminarManolis , misma raiz que " Emmanuel " ...Dios con nosotros .....
Uff, papamanolis al teclado...
Eliminar"me parece un delirio la especulación que propone. Después de JPII hecho una piltrafa por el Parkinson puedo esperar cualquier cosa de Bergoglio"; no es ningún delirio mi planteamiento, ya que solamente me atengo a los hechos evidentes que están a la vista. al cansancio y a los problemas de movilidad de bergoglio cada vez mas evidentes, hay que agregar que bergoglio mismo también sufre de ciatica, de artrosis, y de cierta dificultad para respirar, cosas que con los años empeoran y mas en una persona anciana como bergoglio. por ende, lo mas probable es que bergoglio ante su inevitable empeoramiento físico y mental se vea en la obligación de renunciar, en vez de quedar a merced de las circunstancias, y de que la curia aprovechando dicha situación se haga con el control de la iglesia. por ultimo, sobre juan pablo ii, con su parkinson era como se dice en estados unidos un "lame duck", es decir un papa liquidado sin margen de maniobra por su misma enfermedad, y sin control alguno. y muy probablemente bergoglio con una personalidad tan posesiva y autoritaria, no deseara ser presa de una situación tan patética en donde un papa disminuido física y mentalmente se convierta en un cero a la izquierda.
ResponderEliminarImperdible : Luis Fernando Perez Bustamante (creo que ese es el nombre completo ) ,director de Infocatolica y muchisimas veces ,feroz filtro de los comentarios de los tradis, ha escrito que sin lugar a dudas, INFOCATOLICA esta del lado de los cuatro Cardenales que le plantearon a Judas B.sus dudas sobre "los amores de Leticia". Mas vale tarde que nunca !!!
ResponderEliminarAtahualpa Wilkinson (guitarrero y medio apertura)
Mons Athanasius Schneider también apoya a los cuatro cardenales: https://adelantelafe.com/exclusivo-obispo-athanasius-schneider-defensa-los-cuatro-cardenales/
ResponderEliminarInfocatolica esta del lado de los cuatro cardenales, pero censura a los lectores que le llaman Bergoglio a Bergoglio. Por las dudas...
ResponderEliminarAnonimo del 24 de noviembre 14:15
ResponderEliminarNo le pidas peras al olmo ,decia mi abuelita.Ya han avanzado ,y eso no es poco.
Atahualpa Wilkinson