Hace algunas semanas publiqué en el blog un breve párrafo de Francis Thompson sobre los niños. El Prof. Antonio Caponnetto hizo referencia en un comentario a que ese mismo Thompson era el autor de un poema sublime, The Hound of Heaven, traducido por Castellani como El lebrel del cielo, y todo esto me recordó un hecho insignificante: A fines de enero de 2017, en un día frío y lluvioso, paseaba con un amigo envuelto en su abrigado balandrán negro por las callejuelas de Cambridge y, luego de cruzar el puentecito que atraviesa el Cam por Bridge St., encontramos a la derecha una librería de viejo. Y allí, entre rimeros de libros abandonados por estudiantes aburridos, encontré uno que me interesó. Era The Poems of Francis Thompson, en la edición de Oxford de 1937. No sabía yo que ese día era la víspera de una jornada trágica que me llevaría a estar un mes a la cabecera de una cama del hospital universitario de Oxford asistiendo a mi amigo de una grave dolencia. Entre estos avatares y preocupaciones olvidé mi librito que terminó tiempo más tarde, arrumbado en medio de muchos de sus colegas en algún estante de mi biblioteca.
El post y el comentario, y la coincidencia de la fecha, hizo que lo recordara y que recorriera por primera vez sus páginas, donde encontré otro tesoro de Thompson. Se trata de un breve poema que copio aquí en inglés, seguido de una traducción que me sonroja porque yo de poeta no tengo nada. Pero como sé que muchos de los lectores del blog sí que saben de poesía, quizás se avengan a corregirlo todo lo que sea necesario y, entre todos, podamos componer una versión castellana que merezca ser leída y recordada.
Nuestra Señora de la Noche
Marie-Pierre Semler (1901 - 1993)
Lines for a Drawing of Our Lady of the Night
This , could I paint my inward sight,
This were Our Lady of the Night:
She bears on her front's lucency
The starlight of her purity:
For as the white rays of that star
The union of all colours are,
She sums all virtues that may be
In her sweet light of purity.
The mantle which she holds on high
Is the great mantle of the sky.
Think, O sick toiler, when the night
Comes on thee, sad and infinite,
Think, sometimes, 'tis our own Lady
Spreads her blue mantle over thee,
And folds the earth, a wearied thing,
Beneath its gentle shadowing;
Then rest a little; and in sleep
Forget to weep, forget to weep!
Nuestra Señora de la Noche
¿Podría yo pintar con estas líneas mi visión interior?
Esta fue Nuestra Señora de la Noche:
Ella porta el resplandor de su frente,
la luz estelar de su pureza;
Porque en los blancos rayos de esa estrella
está la unión de todos los colores;
Ella resume todas las virtudes que pueden existir
en la dulce luz de su pureza.
El manto que sostiene en alto
es el gran manto de los cielos.
Piensa, oh agotado trabajador infatigable, cuando la noche
llega sobre ti, triste e infinita,
Piensa que, a veces, Nuestra Señora
extiende su manto azul sobre ti,
Y envuelve a la tierra cansada,
bajo esa suave sombra;
Entonces, descansa un poco, y duerme
¡Olvídate de llorar; olvídate de llorar!
Wanderer, es necesario poner el signo de interrogación en el primer verso? Según la versión inglesa que aparece en la entrada es una pregunta indirecta.
ResponderEliminarDelicado, sentido y hermoso!Muchas gracias!
ResponderEliminarMuy lindo. Corregiría la última línea solamente. "Forget to weep" no debe traducirse literalmente. Mejor sería, "No llores más, no llores más". O incluso, por cuestión de ritmo, "No llores más, María, no llores más".
ResponderEliminar¡Bah! Sugiero nomás.
J.T.
De inglés no sé nada, de escribir un poco. Ergo, opino de la traducción, que, a más de parecerme una belleza, estoy de acuerdo con las dos sugerencias de los primeros dos comentarios.
ResponderEliminarUna belleza. Que bueno sería Don Wander profundizar un poco sobre "El Lebrel..." Castellani Dixit.
ResponderEliminarLa idea de la gracia santificante persiguiendo, acechando y sorprendiendo donde menos se espera, siempre me ha parecido una de las imagenes mas raras y bellas que leído.
Excelente. Yo cambiaría el primer verso, un tanto forzado y largo. Quizás algo como 'Si pudiera pintar mi visión íntima,"
ResponderEliminarConmovedor poema y muy buena la traducción. Gracias a D. Wanderer por traerlo al blog.
ResponderEliminarAunque muchos cocineros arruinan el guiso y el toque de los comités suele ser mortal para la poesía, me atrevo a sugerir que quizá podríamos cambiar los dos versos que empiezan con "Piensa". Convendría eliminar "infatigable", que no aparece en el original y es un contrasentido, porque el que está agotado no es infatigable. Si además trocamos "agotado" por "exhausto" (que es más intenso y onomatopéyico), eliminamos el "oh" (que no hace falta en español porque el vocativo ya se ve marcado por el verbo), cambiamos el orden de los dos primeros versos de forma más acorde con el genio del castellano, evitamos la repetición de "piensa", usamos verbos menos generales y hacemos otros pequeños cambios, las líneas podrían quedar:
Cuando la noche triste e infinita
caiga sobre ti, trabajador exhausto,
Piensa que es, quizá, Nuestra Señora
quien te arropa con su manto azul.
Coincido, por otra parte, con lo que han sugerido los dos primeros comentaristas.
No sé nada de poesía, pero, ¿No es importante la rima? Terminando en "azul manto" ¿No rimaría mejor con "trabajador exhausto"?
EliminarMuy lindos versos
Hilbert
No entiendo la propuesta de Tollers.¿por qué debería decir:"¡No llores más, María, no llores más!"? Si el poeta no se está dirigiendo a la Virgen, sino al cansado,contrito y lagrimeante pecador, o al simple hombre fatigado. Por otro lado, Don Wanderer, valoro su humildad, pero eso de llamar a licitación para traducir un poema, es demasiado democratismo para este sitio y sus lectores. Detrás de un gran poema no hay un sindicato de versificadores, sino un poeta.
ResponderEliminarAnónimo de las 7.31, no sería la primera vez que se logra una traducción mejor en los comentarios. Yo ni lo intento.
ResponderEliminarArme una comision de traductores y luego ponga lo que le parece, ja!. Me gusta su traduccion.
ResponderEliminarDecía Borges que la gloria de un poeta depende de su traductor...
ResponderEliminarOjalá pueda plasmar lo que todo mi ser vislumbra:
ResponderEliminaraquella llamada la Dama de la penumbra.
En su frente de claridad
fulge el sol de la Virginidad
Como los rayos de sol
crisol de todo color son
cobija ella todos los primores
en su suave halo virgen
el manto que lleva de broche
es el manto generoso del edén.
Piensa, operario abrumado en tu noche
lúgubre y sin retén
Piensa que día vendrá que Nuestra Madre
te cubra con su manto celeste
para ceñir la tierra inane
con su humilde hueste
Hora es ya de descansar; y mientras sueñas
deja por fin de llorar; deja de llorar.
No sé mucho de inglés, así que pido perdón de antemano si meto mal la cuchara, es decir, si meto la pata.
ResponderEliminarDe la primera oración, lo que está entre comas me parece un adjunto parentético, por lo que quizá sea más preciso: "Esta, ¿puedo {podré} pintar mi visión interior?, esta era Nuestra Señora de la Noche:". Y si me permiten un poco de licencia, creo que semánticamente la idea más próxima sería: "Así era, ¿podré pintar mi visión interior?, así era Nuestra Señora de la Noche:". En cuanto al tiempo, todos los verbos referidos a Nuestra Señora los pondría en imperfecto, de este modo conservaría el matiz durativo del tiempo presente y la condición pretérita de la visión, de paso que resulta más natural a la lengua española... creo; cuando se apela al trabajador ya sí los pondría en presente.
Con respecto al segundo verso: "Ella porta 'en' el resplandor...". No sé si es la preposición correspondiente pero me parece que debe ir una allí; quitaría además la coma.
Espero haber sido de ayuda...